La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan) ha emitido una nueva alerta. Esta vez no se trata de la inclusión de ningún ingrediente extraño no declarado en el etiquetado, como suele ser habitual, sino de algo mucho más grave. Según un comunicado publicado por la agencia, que depende del Ministerio de Consumo, se ha detectado la presencia de hexahidrocannabinol (HHC) en unas galletas de chocolate de la marca Weed Nation.
La notificación fue trasladada a la Aesan a través del Sistema Coordinado de Intercambio Rápido de Información (SCIRI). Aunque el producto incluye una mención para que no se consuma, lo cierto es que presenta la apariencia de alimentos, especialmente atractivos para los niños, de ahí que se recomiende encarecidamente a todas las personas que tengan el producto afectado que se abstengan de consumirlo.
Según la información disponible, existe la posibilidad de comprar a través de Internet el producto mencionado. No obstante, ya se ha trasladado la alerta a las autoridades competentes de las comunidades autónomas a través del SCIRI, con el objeto de que se verifiquen la posible presencia de los mismos en el mercado o la puesta a disposición de los consumidores españoles; ya que su consumo implica un riesgo grave para la salud.
El HHC es un cannabinoide que, en estado natural, se encuentra en muy bajas concentraciones en las semillas de cannabis. Por ello se considera un cannabinoide menor, al igual que sucede con otros cannabinoides como el cannabinol, que es el principal componente activo de la marihuana.
Según el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (OEDT), la primera vez que se detectó el HHC fue en mayo de 2022 en Dinamarca. Posteriormente, han reconocido en este informe que han recibido identificaciones de HHC en 21 países; entre ellos, España.
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El citado documento también alertaba de que el hexahidrocannabinol se vende como reemplazo al tetrahidrocannabinol (THC). De hecho, el HHC es una modificación de la molécula del CBD o del THC, por lo que el resultado suele ser muy similar. Varios países europeos ya lo han prohibido o han anunciado que lo harán pronto. En España, en cambio, no se tiene constancia por el momento que se vaya a llevar a cabo esta medida.