Una dieta vegana baja en grasas y rica en frutas, verduras, cereales y alubias mejora la sensibilidad a la insulina y el control del azúcar en sangre, mientras reduce la dependencia de la insulina terapéutica en pacientes con diabetes tipo 1. Así lo afirma un estudio del Comité de Médicos por una Medicina Responsable (EEUU) publicado en la revista Clinical Diabetes. Este tipo de alimentación, además, reduce los niveles de colesterol y el peso, mejorando al tiempo la función renal.
El origen de la diabetes tipo 1 se atribuye a una reacción autoinmune que destruye las células beta del páncreas productoras de insulina. Se trata de la hormona que ayuda a transportar la glucosa de la sangre a las células de los músculos y del hígado para metabolizarla y emplearla como energía. Por ello, los pacientes deben recibir insulina de forma externa para suplir el déficit.
Sin embargo, puede aparecer otra afección, la resistencia a la insulina, que lleva a las células a no reaccionar correctamente ante la hormona, con lo que la glucosa permanece en la sangre. Esta resistencia se ve fuertemente agravada por la grasa alimentaria, que puede inhibir la entrada de glucosa a las células. Los niveles altos de glucosa en sangre se relaciona con complicaciones de salud, sobrepeso y obesidad a largo plazo.
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El estudio duró 12 semanas, recoge Europa Press, con 58 adultos participantes y diagnosticados con diabetes tipo 1. Se les asignó aleatoriamente o bien a un grupo de alimentación vegana baja en grasas sin límites de calorías o carbohidratos, o bien a otro de raciones controladas, con una ingesta de carbohidratos invariante pero con las calorías restringidas para aquellos con sobrepeso.
Quienes tomaron la dieta vegana baja en grasas redujeron la cantidad de insulina que necesitaban tomar en un 28% y aumentaron la sensibilidad a la insulina en un 127%. la reducción del peso corporal fue de casi 5 kilos de media en ese grupo, mientras que los participantes del grupo controlado por raciones no adelgazaron significativamente.
La sensibilización a la insulina también se asoció con una mayor ingesta de carbohidratos y fibra. En el grupo vegano, el colesterol total disminuyó en 32,3 mg/dL en comparación con 10,9 mg/dL en el grupo bajo restricción calórica. El colesterol LDL disminuyó aproximadamente 18,6 mg/dL en el grupo vegano, pero no cambió significativamente en el otro grupo.
"El precio la insulina sigue siendo una preocupación en muchos países, y nuestra innovadora investigación muestra que una dieta vegana baja en grasas que no restringe los carbohidratos puede reducir las necesidades de insulina, controlar los niveles de azúcar en la sangre y mejorar la salud del corazón ", afirma Hana Kahleova, autora principal del estudio y directora de investigación clínica del Comité de Médicos para una Medicina Responsable.
La diabetes tipo 1 se asocia con un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular y muerte y, en este estudio, la reducción del uso de insulina se relacionó con un descenso del 9% en el riesgo cardiovascular. La disminución de HbA1c se vinculó con una reducción del 12% y del 8,8-12% en el riesgo de ataque cardíaco y enfermedad cardiovascular, respectivamente.
La reducción del colesterol LDL, finalmente, corresponde a una reducción aproximada del 20% del riesgo de sufrir un evento cardíaco importante, incluidos ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.