Tomar fruta de postre es una de las costumbres más saludables de la dieta en España. Sí, las frutas son una fuente muy importante de fibra, vitaminas y minerales en la dieta, pero además son deliciosas. Cada estación trae nuevas frutas que no sólo aportan nuevos sabores, sino también componentes saludables diferentes. Solemos pensar que todas las frutas son dulces, que tienen pocas calorías y que, en general, todas aportan prácticamente lo mismo. Sin embargo, esto no es así.

La mayoría están compuestas casi por completo por agua y esto es lo que hace que sean alimentos tan poco energéticos. Ahora bien, hay frutas que, como el aguacate, sorprenden por su alto número de calorías y por tener grasas insaturadas. Estas últimas son nutrientes muy saludables que raramente se encuentran en las frutas. Debido a esta variedad en la composición nutricional de las frutas hace que los cardiólogos tengan sus frutas preferidas para comer todos los días y para recomendar a sus pacientes.

Por supuesto, el aguacate es una de ellas debido a su contenido de ácidos grasos monoinsaturados. "Diversos estudios han indicado que el consumo de aguacate reduce los niveles de colesterol total y de su fracción LDL (colesterol malo), así como los triglicéridos en sangre, acción posiblemente debida a su composición en ácidos grasos y a su riqueza en fibra", explica en este documento el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA). Sin embargo, debido a su cantidad de calorías recomiendan que no nos pasemos con el aguacate.

Pequeñas frutas

Eso sí, existe un tipo de frutas que el médico Andrew Freeman, director del departamento de prevención cardiovascular y bienestar del National Jewish Health en Denver (Estados Unidos), intenta tomar casi a diario. Se trata de las bayas, el grupo de frutas entre las que se encuentran los arándanos, las frambuesas y también las fresas. Los potentes efectos cardiosaludables de estas frutas pueden venir de sus abundantes antioxidantes y del hecho de que han demostrado prevenir la diabetes tipo 2.

Esta enfermedad es también un factor que aumenta el riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular. Al igual que el resto de frutas, las bayas son muy variadas tanto en sabor como en efectos sobre la salud, pero en general se dice que son fuentes de vitamina C, fibra y polifenoles. Este último grupo de sustancias es, precisamente, la que encierra un potente efecto antioxidante y antiinflamatorio. Ahora bien, existe una de estas bayas que los expertos han alabado en especial en los últimos años.

Se trata del arándano, la famosa baya de color azul. De hecho, la tonalidad de estas pequeñas frutas se debe a un tipo de polifenoles que destaca por su poder antioxidante que se conoce como antocianos. "Las antocianinas de los arándanos pueden reducir el estrés oxidativo, reducir el riesgo de enfermedad cardíaca tanto en personas sanas como en quienes tienen más probabilidades de padecerla", explica el portal norteamericano de salud Healthline. "Pero también pueden mejorar la salud de este órgano".

En ensaladas o desayunos

Esto se debe a que, según Healthline, los estudios han demostrado tener la capacidad de reducir el colesterol LDL en sangre, la probabilidad de un infarto, de desarrollar diabetes tipo 2 y mejorar la función de las arterias. Además, "un gran estudio observacional demostró que la gente que come arándanos tiene un deterioro cognitivo más lento, lo que significa que sus cerebros se mantienen más sanos a medida que envejecen", añade Healthline. Pero este portal también cita otras bayas con un gran poder cardioprotector.

Este portal también destaca el potencial de las moras, que se han relacionado en estudios con un descenso de la presión arterial y de los niveles de colesterol en sangre. "Otros estudios han demostrado que las moras pueden reducir la inflamación en personas con síndrome metabólico. De todas formas, estos estudios fueron muy pequeños. Se necesita más investigación para confirmar los beneficios de las moras", detalla Healthline. De hecho, las moras parecen ser más efectivas para el corazón que las frambuesas.

Pero, sin duda, la fresa es la baya que más consumimos los españoles cuando llega su temporada. Se trata de una de las mejores fuentes de vitamina C que existen y los resultados de varios estudios apuntan a que es muy efectiva a la hora reducir el colesterol en sangre, los triglicéridos, el estrés oxidativo, la inflamación e, incluso, el azúcar en sangre. "Las bayas son uno de los alimentos más saludables que puedes consumir", subraya Healthline. “Añádelas a una ensalada o úsalas como un topping saludable en tu desayuno”.