España es un país de lácteos. No hay más que observar la calidad de nuestra leche y de muchos productos derivados de ella, desde el queso hasta los yogures. Estos últimos son muy consumidos, aunque en muchos casos no son tan saludables como se podría esperar. Además, según la Sociedad Española de Patología Digestiva, se estima que alrededor del 40% de la población española tiene algún grado de intolerancia a la lactosa. Para ellos, afortunadamente, existen alternativas saludables, como este Postre de soja sabor Natural con coco Alpro.
Ahora, Mercadona ha rebajado el precio del bote de 400 g a 1,95€. Elaborado por la Danone SA, entre sus ingredientes, encontramos base de soja (agua, habas de soja descascarilladas (10,4%)), leche de coco (4,3%) (crema de coco, agua), azúcar, citrato tricálcico, correctores de acidez (citratos de sodio, ácido cítrico), estabilizante (pectinas), aroma natural, sal marina, vitaminas (B12, D2), antioxidantes (extracto rico en tocoferoles, ésteres ácidos grasos de ácido ascórbico), fermentos (S. thermophilus, L. bulgaricus).
Con estos ingredientes, el postre de soja de Alpro, ofrece, por cada 100 g de producto, los siguientes valores promedio: valor energético 55 calorías, 2,9 g de grasas, de las cuales 1,1 g de grasas saturadas, 2,4 g de hidratos de carbono, de los cuales 2,3 g de azúcares, 0,9 g de fibra alimentaria 3,9 g, proteínas y 0,25 g de sal. Unos valores que, a priori, parecen confirmar que se trata de un producto saludable, a pesar de contener algunos aditivos entre sus ingredientes.
Sin lactosa ni gluten
El Postre de soja sabor Natural con coco Alpro no tiene lactosa. Tampoco gluten. Al estar elaborado con soja, este producto es adecuado para personas con intolerancia a estos dos nutrientes, de modo que mucha más gente puede disfrutarlo sin los problemas asociados. Además, la soja le confiere toda una serie de propiedades muy interesantes para la salud.
La soja es una leguminosa rica en vitaminas y minerales, como las vitaminas del grupo B y minerales esenciales como hierro, calcio y magnesio. Además, destaca por su contenido en isoflavonas, unos compuestos con propiedades antioxidantes que ayudan a proteger las células del daño oxidativo. Estas isoflavonas se han asociado con beneficios para la salud cardiovascular y ósea, además de aliviar algunos síntomas de la menopausia en mujeres.
Otro aspecto importante de la soja es su capacidad para mejorar la salud digestiva gracias a su contenido en fibra dietética. Esta fibra contribuye a mantener el sistema digestivo saludable, ayudando en la regulación de los niveles de azúcar en sangre y promoviendo la sensación de saciedad. El consumo de soja también se ha relacionado con la reducción del riesgo de desarrollar enfermedades crónicas, como la diabetes tipo 2.
Rica en proteínas
Pero si por algo destaca la soja es por ser una excelente fuente de proteínas de origen vegetal. Contiene todos los aminoácidos esenciales, lo que la convierte en una proteína completa similar a las proteínas animales. Esta característica la hace muy interesante en el marco de dietas vegetarianas y veganas, además de ser baja en grasas saturadas y no contener colesterol, lo que contribuye a mantener niveles saludables de colesterol en sangre.
Estos nutrientes son esenciales para el correcto funcionamiento del organismo, ya que participan en múltiples procesos biológicos. Son los bloques de construcción de los músculos, tejidos y órganos, y son fundamentales para la reparación celular, el crecimiento y el mantenimiento del cuerpo. Además, las proteínas desempeñan un papel clave en la producción de enzimas y hormonas, que regulan funciones importantes como el metabolismo y la respuesta inmunológica.
Otro punto interesante es que el postre de Alpro es bajo en azúcares, con 2,3 g por cada 100 g de producto. En España, se consume casi 100 g de azúcar per cápita, es decir, el doble de lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Por eso, optar por alimentos, y sobre todo postres, bajos en azúcares puede tener beneficios para nuestro organismo.
En primer lugar, ayuda a mantener estables los niveles de glucosa en sangre, lo que reduce el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 y favorece un mejor control de la energía y el apetito a lo largo del día. Además, consumir menos azúcar contribuye a una mejor salud dental, reduciendo la probabilidad de desarrollar caries y otros problemas bucales.
Del mismo modo, una dieta baja en azúcares puede facilitar el control del peso corporal, ya que disminuye la ingesta de calorías vacías que suelen derivar en un aumento de peso. A largo plazo, también ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares, ya que el exceso de azúcar en la dieta está relacionado con niveles elevados de colesterol y triglicéridos en la sangre.