Elegir adecuadamente los alimentos que se consumen, especialmente si sufrimos un episodio de estrés, puede ejercer una gran influencia sobre la salud cardiovascular. Cuando se encuentra bajo presión o acumula falta de sueño, el organismo tiende a preferir alimentos densos a nivel calórico y nutricional. Eso nos lleva a menudo a aumentar la ingesta de grasas.
Una nueva investigación dirigida por Catarina Rendeiro, profesora de Nutrición de la Universidad de Birmingham, da con un clave para romper este círculo. El consumo de cacao puro sería un factor protector contra los efectos perjudiciales asociados a los alimentos grasos en gran parte gracias a su riqueza en flavonoides. Sus hallazgos de han publicado recientemente en la revista Food and Function.
Según los investigadores, los alimentos ricos en flavonoides equilibrarían la balanza evitando que la grasa afecte negativamente a la función vascular y el suministro de oxígeno cerebral. "Se ha demostrado en estudios previos que los alimentos grasos pueden perjudicar la recuperación vascular del organismo tras el estrés", explica la Dra. Rendeiro.
Los investigadores se centraron en los flavanoles, un tipo de compuesto antioxidante presente en diferentes frutas, verduras, frutos secos y té, incluyendo bayas y el cacao sin procesar. Los flavanoles tienen beneficios para la salud en general, y de forma específica para la tensión arterial y la salud cardiovascular en general.
Para el estudio, un grupo de adultos jóvenes y sanos consumió dos croissants con 10 g de mantequilla, 1,5 lonchas de queso cheddar y 250 ml de leche entera como desayuno. Se les dio a continuación una bebida de cacao que o bien tenía un alto contenido de flavanoles o una baja concentración. Tras un descanso, se pidió a los participantes completar una prueba de cálculo mental que aumentaba de velocidad durante ocho minutos y les avisaba cuando se equivocaban en una respuesta.
Se midió el flujo sanguíneo del antebrazo, la actividad cardiovascular y la oxigenación del tejido de la corteza prefrontal. Además, también se midió la función vascular (FMD) mediante la dilatación mediada por flujo braquial, una medida de pronóstico de riesgo futuro de enfermedad cardiovascular. La prueba mental, que era una tarea de estrés, indujo aumentos significativos de la frecuencia cardíaca y la presión arterial.
Según los resultados del estudio, el consumo de alimentos grasos junto a una bebida baja en flavonoides cuando se está estresado mentalmente reducía la función vascular en un 1,29%, algo que se prolongaba hasta 90 minutos después del evento estresante. Por contra, la toma de una bebida de cacao rica en flavonoides se relacionó con una función vascular significativamente mayor.
"Esta investigación demuestra que ingerir un alto contenido de flavonoles puede ser una buena estrategia para mitigar parte del impacto de las malas elecciones alimentarias sobre el sistema vascular", concluye Rendeiro. "Esto puede ayudarnos a tomar decisiones más informadas sobre lo que comemos y bebemos durante periodos de estrés".
Respecto a los alimentos ricos en flavonoles que pueden adquirirse a nivel comercial, los expertos aconsejan una ingesta de entre 400 y 600 mg/día de flavonoles a través del consumo de dos tazas de té negro o verde, o bien mediante una combinación de bayas, manzanas y cacao de alta calidad.