Hablar del clavo es referirse a una especia con siglos de historia detrás, que puede utilizarse en la cocina para aportar personalidad, aroma y sabor a toda clase de platos dulces y salados. Pero más allá de su olor y sabor, lo cierto es que el clavo también destaca por sus beneficios para la salud.
Esta especia ya fue empleada de forma medicinal desde hace miles de años. Se trata de una planta a la que se le han atribuído propiedades antimicrobianas, antifúngicas, antiinflamatorias, relajantes, digestivas e incluso cicatrizantes, entre otras. Pero sus beneficios no acaban ahí, ya que su consumo está ligado a su poder para combatir tres afecciones bastante frecuentes en España.
Hablamos de los problemas digestivos, dolores e infecciones de garganta y las dolencias que afectan al sistema respiratorio. Aún a pesar de todo ello, sigue sin tratarse de una de las especias más consumidas en España. Te contamos todo sobre sus propiedades y beneficios.
Las tres enfermedades que combate el clavo
Se trata de tres afecciones que están muy vinculadas a las potentes propiedades carminativas y antiinflamatorias del clavo, así como su potente capacidad para reforzar el sistema inmunológico.
- Problemas digestivos: incluir clavo en la dieta ayuda a aliviar y mejorar la salud en el sistema digestivo gracias a esas propiedades carminativas y antiinflamatorias que antes hemos mencionado. Estas ayudan a calmar los gases, la indigestión o las molestias estomacales.
- Infecciones o problemas de garganta: sus propiedades antimicrobianas también ayudan a combatir las bacterias que causan enfermedades en las encías y en la boca. Ayudando también a evitar la irritación en la garganta y en las vías respiratorias, reduciendo el dolor y la inflamación.
- Resfriados, catarros y síntomas respiratorios: también es capaz de calmar la tos y otros problemas gracias a su capacidad para combatir virus y bacterias, y para fortalecer el sistema inmunológico.
Pero el poder y beneficios de esta especia va más allá de su capacidad para aliviar los síntomas y combatir estas tres enfermedades. A continuación te detallamos otras ventajas para la salud que podrás obtener de su consumo.
Otros beneficios del clavo
En su versión de aceite, derivado del clavo de olor, nos encontramos con que este tiene un impacto positivo en la circulación sanguínea, por lo que su aplicación en la piel y siempre diluida en agua, resulta beneficiosa para todo el cuerpo. Además, su utilización promueve una piel más nutrida y fortalece el sistema inmunológico.
El clavo además, posee propiedades analgésicas y antisépticas naturales gracias al eugenol, una sustancia presente en él. Esta propiedad lo convierte en un aliado para combatir el acné, mantener la salud de la piel y prevenir la formación de arrugas.
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Todo ello unido también a que el consumo de té de clavo de olor puede aliviar dolores de cabeza, cólicos menstruales, fiebre, dolores de dientes e inflamaciones de garganta. Por otro lado, su capacidad para acelerar el metabolismo lo convierte en un aliado para la quema de grasa, siendo un recurso natural para perder peso.
Además, el clavo de olor tiene beneficios para la tiroides y puede ayudar a controlar los niveles de colesterol. Su contenido de eugenol también le confiere propiedades antiinflamatorias, lo que puede contribuir a reducir los síntomas de inflamaciones.
Contraindicaciones de su consumo
Es esencial ser cuidadoso al considerar el uso del clavo de olor, ya que hay ciertas situaciones en las que su consumo no es recomendable. Por ejemplo, no se debe utilizar si se padece una úlcera gástrica, ya que podría empeorar la condición.
Además, si se sabe que se tiene alergia a alguno de los componentes del clavo de olor, su uso debe evitarse para prevenir reacciones alérgicas adversas. Los diabéticos deben evitar también su consumo sin una indicación y seguimiento médico adecuados, ya que podría afectar los niveles de azúcar.
Clavo.
También deberían evitarlo las personas bajo tratamiento con anticoagulantes, estas deben consultar a un médico antes de tomar clavo de olor, ya que puede interferir con el efecto de estos medicamentos y aumentar el riesgo de sangrado.
Tampoco se recomienda su uso en niños menores de tres años debido a posibles efectos adversos, ni durante el embarazo o la lactancia, ya que podría tener efectos negativos en la madre y el bebé.
Además, los profesionales médicos desaconsejan su uso antes de cualquier intervención médica debido a su efecto sobre la coagulación sanguínea. El eugenol presente en el aceite de clavo de olor puede retardar el proceso de coagulación, lo que podría aumentar el riesgo de sangrado durante la operación.