Boiron no es una importante empresa francesa de productos homeopáticos con un valor en bolsa de 1.360 millones de euros y filiales en 20 países, entre ellos España, donde factura algo más de 25 millones anuales. No. Boiron es la homeopatía misma.
Sólo así puede explicarse que convocaran una conferencia de prensa en un hotel madrileño para denunciar la "campaña de comunicación sin precedente" que "ataca la homeopatía en España" y testimonia "una falta de respeto a los millares de médicos y a los millones de españoles que han escogido las medicinas homeopáticas". No pretendían defender el buen nombre de su empresa, sino el de su credo.
La homeopatía en España siempre ha tenido defensores y detractores, ¿qué ha cambiado para que la Directora General Delegada del Grupo Boiron, Valérie Poinsot, haya tenido que viajar desde Francia y organizar todo esto?
"Nuestro equipo en España ha hecho la misma pregunta que usted", ha respondido Poinsot a EL ESPAÑOL, "llevan criticándonos muchos años, ¿por qué vienes hoy Valérie? He decidido venir porque no podemos dejar que España siga sumida en ese desconocimiento". La verdadera razón, el desencadenante, parece estar sin embargo en la supresión, hace unos días, de un máster de Medicina Homeopática en la Universidad de Barcelona. "Lo peor no es no estar presente en las facultades, sino la mala información sobre homeopatía".
Sin embargo, confirmó que Boiron continuaría destinando recursos a promover la homeopatía en las aulas. "Como laboratorio, ayudamos a distintas escuelas de homeopatía y trabajamos con médicos que enseñan".
Datos sorprendentes
Junto a ella estaban el director de relaciones exteriores de la empresa, Jean François Lurol y dos aplicadas traductoras-intérpretes. A lo largo de su intervención, Poinsot ha lanzado una serie de sorprendentes aseveraciones como que el 33% de los españoles, el 44% de los belgas y el 57% de los franceses consumían homeopatía. O que uno de cada dos oncólogos franceses decían sí a la homeopatía.
La cifra del 33% de españoles, que la directiva francesa mencionó pese a desconocer la fuente del dato, ("me la tienen que dar ustedes, yo no la tengo", respondió a un periodista) procedía del 'Estudio sobre conocimiento y uso de homeopatía en España', publicado en la Revista Médica de Homeopatía por tres trabajadores de Boiron en 2012.
Borion es la homeopatía porque está también detrás de estos estudios, los financia y son sus propios investigadores los que los realizan. Muchos de ellos quizá aprendieron en alguno de los cursos de iniciación a la homeopatía que la empresa francesa financia en España. Luego los estudios se citan como argumento de autoridad en otro foro y el círculo se cierra.
"En Francia se hizo el mayor estudio farmacoepidemiológico, donde se comparaba a médicos alopáticos con aquellos que también usaban homeopatía", añadió Poinsot, refiriéndose al estudio EPI3, enteramente financiado por Boiron. Este hecho -que aparece correctamente señalado en el estudio- no implica dudar de sus conclusiones o independencia, pero resulta llamativo que la francesa no lo mencionara.
Con respecto al estudio de los oncólogos franceses, cabe decir que es poco concluyente. Una encuesta similar, realizada a oncólogos japoneses en 2003 y publicada en la revista Cancer, arrojaba que el 89% tenía poco o nulo conocimiento de la homeopatía, y que sólo el 0.9% de ellos declaraba haberla recomendado alguna vez.
Todo bajo control
La directiva de Boiron también insistió en un par de ocasiones en la presencia de médicos entre los asistentes, que hablarían encantados con los periodistas sobre los beneficios de la homeopatía. "Eloy es un médico de Pamplona, Alberto es un médico de Madrid", y así. Una búsqueda en Google confirmaba rápidamente la relación de connivencia entre las partes.
Otras de las aseveraciones difíciles de contrastar lanzadas por Poinsot era que el consumo de medicamentos homeopáticos hacía que se recetaran dos veces menos antibióticos, benzodiazepinas y antiinflamatorios. "En Francia se reconoce la homeopatía porque es buena para los pacientes y una fuente de ahorros para la Seguridad Social", ha dicho. "Si no hubiese homeopatía en España, los pacientes tendrían que ir a Francia a comprar y eso no sería bueno".
La intervención de los responsables de Boiron, cada vez más abigarrada y donde Poinsot ha llegado a comparar la homeopatía con la Nutella, porque "la critican, pero a todos los niños les gusta", no pasará a la historia de las ruedas de prensa aunque puede que sí a los manuales de gestión de crisis.
Mientras los responsables de la empresa homeópata trataban de explicarse, cientos de internautas se daban a la chufla con el hashtag #PreguntaABoiron, creado por el periodista científico Luis Alfonso Gámez.
Con todo, el nivel de ocurrencia de los tuiteros estaba muy por debajo de algunas de las cosas que se escucharon en la conferencia de prensa:
"La homeopatía son medicamentos nacidos de la experiencia, nacidos de la ciencia, es decir, de la experimentación. Son como estudios científicos a la inversa, tenemos pruebas de que funcionan en la vida real desde hace 200 años, no hace falta demostrarlo con ensayos clínicos porque ya ha quedado demostrado en la vida real. Hay medicamentos que funcionan en ensayos clínicos y luego en la vida real no. ¡Esto es mucho mejor!", ha dicho Poinsot, cuyo personaje trascendió a la mujer de negocios para situarse en algo parecido a una sacerdotisa.