El mejor baloncestista español de la historia ha lanzado dos severos golpes a la organización de los próximos Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, cuya inauguración sigue fijada para el próximo 5 de agosto.
Primero, Gasol ha publicado una tribuna en El País desgranando sus dudas sobre la pertinencia de celebrar un evento global en plena epidemia del Zika. Para rematar, según informa nuestro compañero Millán Cámara, la estrella de los Bulls ha afirmado esta mañana en un acto: "Estoy valorando acudir o no a los Juegos por la amenaza del Zika".
¿Es Pau Gasol una mujer embarazada?
La decisión de Gasol está espoleada por una carta abierta que más de 150 científicos de todo el mundo han dirigido a Margaret Chan, directora general de la Organización Mundial de la Salud, con copia al Comité Olímpico Internacional. Esta misiva alerta del riesgo de que los cientos de miles de visitantes a los JJOO provoquen una expansión mundial del virus, especialmente a países donde el mosquito Aedes aegypti, vector de la enfermedad, está presente.
Amicar Tanuri, genetista y experto en enfermedades infecciosas en la Universidad Federal de Río de Janeiro, contaba a EL ESPAÑOL hace unas semanas que los atletas en la Villa Olímpica "estarán muy protegidos, el problema es el pueblo, los suburbios de Río... es una calamidad". Tanuri y su equipo, los primeros en sintetizar el genoma del virus Zika, están en conversaciones para instalar cerca de la residencia de los deportistas un laboratorio móvil donde poder detectar el virus.
En cualquier caso, parece que, de acudir, la salud de Pau Gasol no se verá tan comprometida como la de los aficionados que vayan a verle competir a las Olimpiadas. Es necesario recordar que el virus sólo causa enfermedad a una de cada cinco personas y que sólo las mujeres embarazadas tienen un riesgo lo suficientemente grande como para plantearse su presencia en Río de Janeiro.
¿Llevan razón los científicos díscolos?
La OMS no ha tardado en responder a la carta de los científicos críticos con la celebración de los JJOO. En un comunicado, la organización señala que cancelar o cambiar los juegos no alteraría significativamente la expansión de la enfermedad. "Brasil es uno de los 60 países en los que hay una transmisión continuada del Zika mediante mosquitos", sostiene la organización.
¿Y qué opinan de esto los firmantes de la carta? En conversación con EL ESPAÑOL, el término escogido por Amir Attaran, profesor en la facultad de medicina de la Universidad de Ottawa en Canadá, es "bullshit". En español, sandeces.
"Es algo científicamente ignorante, deshonesto y peligroso por parte de la OMS", reitera Attaran. "La OMS ha fallado a la hora de evaluar el daño, ya que muchos de esos 60 países tienen cepas ancestrales del virus, pero esta nueva cepa brasileña es genéticamente diferente, ya hay dos artículos científicos publicados al respecto".
Tanuri fue precisamente uno de los que descubrió que el Zika de Brasil es genéticamente muy cercano a la cepa detectada en 2013 en la Polinesia Francesa, donde también se han registrado casos de microcefalia o síndrome de Guillain Barré. "Es como si en 1918 la OMS hubiese dicho 'por qué preocuparse por la influenza Española si tenemos influenza en prácticamente cualquier país', y ya se sabe lo que pasó con la gripe española, se extendió y mató a 60 millones de personas", dice Attaran.
Nunca dijeron que quisieran cancelar los JJOO
Otra reacción notable en contra de la famosa carta ha sido la de Tom Frieden, director de los U.S. Centers for Disease Control and Prevention (CDC), que ha declarado que "no hay ninguna razón de salud pública para cancelar o posponer los Juegos Olímpicos".
Sin embargo, Attaran cree que lo que dice Frieden no está en contradicción con lo que dicen ellos. "En realidad estoy de acuerdo con él, pero tiene que entender una cosa, él es director del CDC, y su responsabilidad es con los Estados Unidos, no está aconsejando al mundo entero y para los EEUU hay poco riesgo, por tanto no hay motivos para posponer los juegos", dice el médico, "si yo ocupara su puesto diría las mismas cosas, pero estos 160 científicos estamos hablando de salud global, y por eso decimos lo que decimos".
Además, el canadiense aclara: "Ninguno de nosotros quiere cancelar los juegos, eso es algo que ha salido en medios porque los periodistas se han hecho un lío". "En The Guardian citaron a tres expertos para decir que estábamos equivocados, pero era porque pensaban que queríamos que se cancelaran los juegos", explica Attaran.
Para estos científicos, cuando la OMS dice que cancelar los JJOO no tiene una justificación desde la salud pública, lleva razón. Sin embargo, "posponer o trasladar los JJOO es diferente, ya que trasladarlos a un sitio donde no exista este riesgo lo elimina".
Posible conflicto de intereses
Los propios autores de la carta que inspiró a Pau Gasol saben que, a menos de 100 días de la inauguración, las posibilidades de que los Juegos Olímpicos se retrasen son casi inexistentes.
Lee Igel, otro de los 150 firmantes de la carta y profesor en la Universidad de Nueva York, explica a EL ESPAÑOL que "la gente necesita valorar el contexto al completo: un mega-evento deportivo en mitad de una enorme epidemia en una ciudad anfitriona que está lidiando con una economía, una política y una sociedad turbulentas".
Otra de las razones que se arguyen en contra de los críticos es que los visitantes a los juegos -unos 500.000- serían una mínima parte de los cinco millones que habitualmente visitan la ciudad carioca cada año. Sin embargo, Igel sostiene que "la posibilidad de expansión de esta epidemia se basa en la realidad de que la red de viajes de los Juegos Olímpicos es distinta de los que se dan en el día a día, con una mayor probabilidad de que miles y miles de personas viajen desde Río a sus hogares en países que sufren de sistemas de salud, seguridad e infraestructuras sobrecargados".
Attaran se expresa del mismo modo: "Normalmente los viajeros que recibe Brasil vienen de países muy específicos, hay muy pocos viajes entre Etiopía o Sri Lanka y Río de Janeiro", dice el investigador. Pero en los JJOO, literalmente todos los países del mundo van a viajar a Brasil, y, dice "esos 500.000 visitantes tienen mucho más poder de extender la epidemia que 500.000 visitantes normales".
Los 150 científicos críticos llevan la lección preparada y no les ha costado rebatir la versión oficial de la OMS, que para más inri se ha encontrado con el apoyo implícito de deportistas como Gasol, la campeona olímpica de heptatlón, Jessica Ennis-Hill, quien va a retrasar su viaje a Brasil, o la selección estadounidense de natación, que hará su concentración pre-olímpica en Atlanta y no en Puerto Rico por temor al virus.
"Gran parte de la oposición que tenemos", dice Attaran, "es gente que dice que cambiar los JJOO sería un error geopolítico". "Bueno, lo siento, pero no creo que debamos crear un problema global de salud sólo por una concepción estúpida de la geopolítica", y añade: "La OMS tiene un claro conflicto de intereses, ya que están haciendo de consultores para el Comité Olímpico Internacional y para los organizadores de los juegos, y si la OMS está haciendo de consultora, evidentemente aconsejar que los Juegos Olímpicos no tengan lugar iría contra sus intereses, porque para empezar, tendrían que admitir sus errores como consultores".