Ocho cosas que no sabes sobre el pene
La ciencia ha estudiado el principal órgano genital masculino y algunas conclusiones son sorprendentes.
3 marzo, 2019 11:27Noticias relacionadas
Es uno de los órganos con más sinónimos en cualquier lengua, la mayoría malsonantes, pero se trata de una de las posesiones más preciadas de la mayoría de los varones. Sin embargo, muchos de sus dueños probablemente no conozcan muchas características del pene, una parte del cuerpo que tiene muchas más peculiaridades además de su falta de hueso. El máster en Salud Pública del Dartmouth Institute y periodista Martin Downs describe en WebMd ocho cosas sobre el pene que no se suelen saber.
Hay que usarlo
Para mantener el pene en forma hay que utilizarlo regularmente y no precisamente para orinar. Las erecciones son necesarias, según el profesor de Urología de la Southern Illinois University School of Medicine Tobias Kohler: "En esencial, hay que ejercitarlo". Se trata de mantener en este órgano un tono saludable, por lo que su suave músculo tiene que enriquecerse periódicamente con oxígeno por el flujo de sangre que engorda el pene y lo mantiene erecto, afirma el experto.
En cualquier caso, el médico relaja a aquellas personas que no tienen erecciones durante mucho tiempo, quizás por falta de estímulo sexual. Esto no es un problema siempre que la erección sea físicamente posible, ya que el cerebro tiene una especie de función de mantenimiento del órgano sexual, que se traduce en las erecciones nocturnas, en concreto en la fase REM del sueño.
No es el caso de las personas que son físicamente incapaces de lograrlo, como los que han sufrido un trauma en los nervios del pene o daño en los vasos sanguíneos. "Si no hacen algo para arreglarlo, su pene se les acortará en uno o dos centímetros", advierte Kohler.
Pene de sangre y pene de carne
Entre los hombres, no hay una relación consistente entre el tamaño de un pene en estado flácido y su longitud en erección. En un estudio con 80 participantes se vio que las diferencias entre el incremento de longitud entre un pene flácido y uno erecto variaban enormemente. Los llamados penes de carne crecen poco porque parten de un tamaño considerable en estado de flacidez, mientras que los que denominan de sangre son más finos cuando están en reposo y cambian muchísimo al erectar. Conclusión, si un hombre tiene un gran pene flácido no quiere decir que lo vaya a tener mucho mayor durante el sexo.
Sin embargo, un estudio del conocido sexólogo Alfred Kinsey demostró que la mayoría de los penes no pertenecen con claridad a una de las dos categorías. Alrededor de un 12% de ellos ganaban un tercio o menos de su longitud al alcanzar la erección y sólo un 7% la duplicaban.
La zona de placer
La mayoría de los hombres consideran la parte de abajo de la cabeza del pene y la parte de abajo del tronco las más sensibles al placer sexual, como confirmó un estudio publicado en la revista British Journal of Urology International en 2009. La parte superior de la cabeza y sus laterales ocupaban los siguientes puestos en este ránking de sensibilidad.
La sensibilidad disminuye con la edad
Muchos hombres no lo reconocerán, pero la ciencia ha hablado. Aunque no se sabe cuánto -distintos estudios han arrojado diferentes resultados- parece claro que el pene se vuelve cada vez menos sensible.
El drama empieza ya a los 25 años, aunque el mayor declive se ve entre los 65 y los 75. Sin embargo, esto se ha visto en investigaciones realizadas específicamente al respecto y no está tan claro que los hombres sean conscientes de la pérdida de sensibilización. Según Kohler, es una queja muy poco habitual en los servicios de Urología, frente a otras como la dificultad para conseguir erecciones o eyacular.
Los vibradores también les sirven
Al contrario de lo que podría parecer, los vibradores no son sólo para estimular las vaginas de las mujeres o el ano en ambos sexos, también son eficaces en el pene. Los dildos son tan útiles que algunos diseñados especialmente por médicos son usados por hombres con lesiones medulares para poder eyacular.
La mayoría de los varones no necesitan vibradores para alcanzar el orgasmo, pero los urólogos lo recomiendan a las personas con problemas de retraso en la eyaculación. En cualquier caso, la ciencia lo tiene claro: un hombre también puede utilizarlos sólo para divertirse.
Hay más pene de lo que el ojo ve
El urólogo bromea sobre la longitud del pene: "Muchos estarían orgullosos de saber que su órgano sexual es dos veces mayor de lo que ellos piensan". Esto ocurre porque esa mitad adicional está dentro del cuerpo, como si se tratara de las raíces de un árbol. Pero las cosas cambian si se ve una imagen tomada con una resonancia magnética.
En el pene viven 'cosas'
Dos investigadores del Translational Genomics Research Institute utilizaron test genéticos para identificar las bacterias que residían en el falo de los varones. La mayoría de los microorganismos resultaron ser anaeróbicos, es decir, que no necesitaban oxígeno para crecer. En total se encontraron 42 tipos de bacterias únicos en la piel del falo.
La mayoría de los hombres no están circuncidados
Aunque es muy común en algunas culturas, la circuncisión no es el estado más habitual del pene. Según un informe de 2007 de la Organización Mundial de la Salud, el 30% de los hombres lo están, aunque las tasas varían enormemente según la religión y la nacionalidad.
La Academia Americana de Pediatría estableció en 2012 que circuncidar a los recién nacidos tenía más beneficios que riesgo y que era perfectamente saludable hacerlo por elección personal.