El consumo de comida picante puede ser todo un manjar para algunos, pero también algo cercano al deporte extremo para otros. Sin embargo, más allá de la típica reacción de abrasión lingual y lagrimeo asociado, en teoría dicho consumo de picante no debería tener mayores efectos en el organismo humano.

Aún así, el youtuber Ben Sumadiwiria no solo sufrió dichos síntomas, sino que hubo algo más y pudo grabarlo en vídeo: Ben se quedó sordo durante 2 minutos tras comer fideos picantes, también llamados "fideos de la muerte" en Indonesia.

Las razones por las que el youtuber sufrió tal percance, aunque solo fuese temporal, no tienen una explicación médica clara, aunque sí existen algunas hipótesis al respecto.

El picante y el cuerpo humano

En este caso, los llamados "fideos de la muerte" que consumió Sudadiwiria pudieron activar las conexiones neuronales que conectan boca, garganta y oídos. Dichos fideos están fabricados con chiles tailandeses, unos pequeños chiles rojos que provocan entre 100.000 y 225.000 unidades de calor en la escala Scoville, una escala que se usa para medir el efecto picante de un alimento; dicha cifra equivaldría a un calor de 45 veces el que produce un jalapeño.

Aunque Sumadiwiria suele fabricarse sus propias salsas picantes y también añade chiles a sus comidas, lo que sufrió esta vez no le había llegado a ocurrir: sudor, rubor y el peor dolor que había sentido jamás; además de la sordera pasajera.

Existe un compuesto que otorga esta producción de calor a los chiles, la capsaicina. De hecho, dicho compuesto se usa también en determinados tipos de cremas contra el dolor muscular y articular, aunque jamás debe rozar siquiera los ojos por el extremo picazón que puede provocar. La capsaicina irrita cualquier célula humana, y muy especialmente aquellas células que recubren la mucosa de la boca, garganta, estómago y ojos.

Tan solo una pequeña cantidad de esta sustancia provoca ardor y dolor por irritación; si se usan concentraciones más elevadas, el cuerpo humano reaccionará produciendo mucosidad y lagrimeo para formar una barrera defensiva contra la capsaicina, a la vez que liberará endorfinas para contrarrestar el dolor y provocar la típica reacción de boca entumecida. Precisamente por dicho efecto endorfínico de rebote es por lo que se usan las cremas de capsaicina contra el dolor.

La capsaicina y la sordera temporal

Si la capsaicina se consume en concentraciones elevadas, la reacción de la mucosa de boca y garganta puede ser tan intensa que puede producir ampollas como forma de protegerse, llegando así a sacrificar la capa de células más externa con el objetivo de proteger las capas más internas.

Ahora bien, ¿y la sordera temporal?

Según ha comentado el Michael Goldrich, un otorrinolaringólogo del Hospital Universitario Robert Wood Johnson en Nueva Jersey a LiveScience, existen algunas razones por las que podría producirse dicho fenómeno. En primer lugar, es necesario recordar que la garganta y los oídos están conectados mediante las trompas de Eustaquio, las cuales ayudan a igualar las presiones del oído interno. Si los conductos nasales crean un exceso de mucosidad, se pueden llegar a bloquear dichas trompas de Eustaquio, algo que puede suceder con un exceso de picante. Por ello, es probable llegar a sufrir sordera temporal como consecuencia de un taponamiento mucoso temporal, según Goldrich, de forma similar a lo que ocurre en un resfriado.

Otra posibilidad, según Sam Marzo, del Departamento de Otorrinolaringologia de Loyola’s Medicine y experto en pérdida de audición, es que esta pérdida de audición se deba a una hiperestimulación del nervio trigémino. Dicho nervio otorga la sensibilidad a la cara y el control motor de cara y boca; además está conectado con el nervio coclear, responsable de transmitir la información auditiva.

Como curiosidad, se sabe que los individuos que sufren migraña a veces pierden la audición de forma temporal por una sobreestimulación de dicho nervio, lo cual afecta a los vasos sanguíneos del nervio coclear.

Tanto en uno caso como en otro, si la pérdida de audición no mejora progresivamente, es recomendable buscar ayuda médica, ya que es posible que se haya producido un daño coclear permanente.