La Dirección General de Salud Pública ha detectado un brote de hepatitis A que ha afectado a 33 personas en un restaurante de la zona centro de Palma y ha informado de que ya está controlado. Según ha confirmado la directora general de Salud, Maria Ramos, aunque el brote ya se da por controlado en el restaurante no se descarta que aparezca algún caso más.
Ramos ha señalado que ningún caso ha presentado complicaciones aunque ha habido algunas hospitalizaciones por corto periodo de tiempo. "Todos están bien y el primer trabajador infectado está curado", ha dicho.
Ramos ha señalado que el brote empezó a mediados de diciembre y que se dio a conocer cuando un médico de familia informó de que había detectado a dos pacientes contagiados en un mismo restaurante. Tras esto, se inició una investigación y se acabó por detectar al primer afectado, un trabajador del mismo restaurante, así como otros 25 casos relacionados que se produjeron en las fiestas de Navidad.
De esta manera, los inspectores de Sanidad Alimentaria llevaron a cabo una inspección en el local. Ahí, se detectó una serie de deficiencias que podrían favorecer a la expansión del brote y se les dio plazo para subsanarlas. Además, se les pidió que requisaran y destruyeran todos los alimentos y que se desinfectase por completo el local y que se estudiara a todos los trabajadores. Así, el restaurante se cerró entre el 10 y el 19 de enero, a la espera de que se realizase un estudio del mismo.
Tal como ha explicado Ramos, se detectaron tres casos más y una vez el local cumplió todas las exigencias y requisitos se volvió a abrir. "No descartamos que salgan más casos pero ya no estarían relacionados con el restaurante sino que serían casos terciarios", ha dicho. Asimismo, el sistema sanitario está avisado y están vigilantes a la hora de detectar esta enfermedad que se transmite vía fecal/oral.