El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este martes, dentro del paquete de medidas destinadas a paliar las consecuencias de la aplicación del estado de alarma que vive España, que se van a destinar 30 millones de euros al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) para proyectos que investiguen el desarrollo de una vacuna contra el coronavirus Covid-19.
Así lo ha avanzado en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, el primero que se ha realizado de manera virtual en la historia de España. Sánchez ha calificado como "fundamental" la investigación para una "cura definitiva" del virus.
Pedro Sánchez ha destacado que se va a dedicar una "importante cantidad de recursos" a encontrar una vacuna. "Son medidas para apoyar la investigación científica y médica en la búsqueda de la vacuna en la que está inmersa el mundo, y España no puede permanecer al margen", ha apuntado.
En concreto, 25,2 millones de euros serán para el Instituto de Salud Carlos III. En principio, la mayoría, hasta 24 millones, irán destinados a proyectos cuyo fin sea "generar conocimiento sobre la infección" que facilite el abordaje de la misma en cualquier fase de su propagación, desde su propia biología hasta la inflluencia y el impacto para el sistema sanitario.
Un porcentaje menor de la partida -1,2 millones de euros- se destinará al ISCIII, un organismo dependiente del Ministerio de Ciencia e Innovación. En principio, esta cantidad se destina a "cubrir necesidades excepcionales" derivadas por esta emergencia, sea material especializado o apoyo económico para el personal.
Por su parte, el Centro Nacional de Biotecnología (CNB) del Consejo Superior de Investigaciones Científicas recibirá 4,45 millones de euros para gastos de investigación del coronavirus. Con esta partida, el CSIC va a impulsar el desarrollo de sus investigaciones actuales y avanzar en estrategias de protección frente al coronavirus.
Impulso a la investigación española
El énfasis en obtener una vacuna para prevenir la infección por el Covid-19 responde a uno de los frentes de ataque más obvios en la pelea contra la pandemia y al que se han sumado científicos de todo tipo de instituciones públicas y privadas de buena parte del planeta. Hasta el momento, se han publicitado varios enfoques prometedores desde laboratorios de varios países, y la propia Unión Europea puso en marcha hace semanas una convocatoria urgente para promocionar investigaciones en este ámbito.
El Ministerio de Ciencia e Innovación recordaba este lunes que mantiene contacto permanente con distintos entes de investigación para movilizar recursos, tanto materiales como personales, y dar prioridad a estas líneas de investigación que abordan tanto el diagnóstico de la patología como el tratamiento y la vacuna para la enfermedad.
En este ámbito, el grupo de investigación liderado por los científicos Luis Enjuanes e Isabel Sola, del Centro Nacional de Biotecnología del CSIC, tienen en marcha un proyecto desde el pasado 31 de enero, el denominado PIE-CORONAVIRUS. El objetivo de este trabajo es estudiar los mecanismos de patogénesis del coronavirus SARS-CoV2 con el propósito de eliminar de su genoma los genes responsables de la virulencia para obtener derivados atenuados, que son candidatos a vacuna.
El tiempo, un factor en contra
Entre los trabajos internacionales más destacables a día de hoy, China obliga a mirar qué se ha hecho en sus laboratorios. El gigante asiático parece haber dejado atrás lo peor de la pandemia, y esa experiencia acumulada en el tratamiento de la enfermedad, y el hecho de haber sufrido más casos que ningún otro país, ayudó a poner en marcha desde muy pronto la actividad científica para secuenciar el genoma del virus y estudiar posibles debilidades para combatirlo.
Este martes, el Ministerio de Defensa de China aseguró en un comunicado haber desarrollado "con éxito" una vacuna y ha autorizado las pruebas en humanos, aunque el texto no precisó cuándo comenzarían tales ensayos. La vacuna fue desarrollada por el equipo de investigación liderado por la epidemióloga Chen Wei, de la Academia Militar de Investigación Médica, dependiente de la Academia Militar de Ciencias.
"Preparados para una producción a gran escala"
Según Chen, la vacuna -desarrollada en consonancia con "estándares internacionales y la regulaciones locales"- está preparada para llevar a cabo "una producción a gran escala, segura y efectiva".
Además de este avance, los científicos chinos tienen otras opciones sobre la mesa. Según Beijing, hay otra vacuna basada en vectores virales de la gripe que se encuentra actualmente en fase de experimentación con animales y que comenzará sus ensayos clínicos en abril, según la agencia estatal de noticias Xinhua.
Y también las miradas siguen atentas otro de los trabajos más esperanzadores, el proyecto participado por el Hospital Oriental de Shanghai y la compañía local de biotecnología Stemirna Therapeutics. Esta iniciativa se enfoca en influir sobre la el ARNm (ácido ribonucleico mensajero), que contiene la información genética procedente del ADN y que interviene en la síntesis de proteínas. Según científicos participantes, las vacunas basadas en ARNm presentan ciclos de desarrollo y producción más cortos que las tradicionales.
EEUU pretende la 'vacuna alemana'
El tiempo es un factor en contra en estos momentos en los que varios países europeos sufren medidas muy restrictivas y el número de casos solo empieza a crecer en Estados Unidos, por ejemplo.
Desde Washington se está promocionando también la investigación, si bien un diario alemán, Welt am Sonntag, desveló el pasado domingo que la administración Trump estaría negociando el acceso exclusivo a una vacuna en la que trabaja el laboratorio CureVac. Según fuentes próximas al ejecutivo germano citadas por este medio, la idea del presidente de EEUU es dar uso a la vacuna únicamente para sus ciudadanos, lo que ha sido afeado no solo por estas fuentes sino por el presidente de la compañía ubicada en Tübingen, Dietmar Hopp, quien defiende el principio de solidaridad para evitar exclusividades. Este mismo martes, por otra parte, era la misma compañía la que negaba cualquier contacto con emisarios estadounidenses.
Australia explica cómo se combate el virus
En las últimas horas, científicos australianos también han arrojado luz sobre la sombra del coronavirus. En el artículo publicado este miércoles en la revista Nature Medicine, el equipo de investigadores de la Universidad de Melbourne explica cómo el sistema inmunológico combate el Covid-19. Se trata de una información que puede resultar muy importante para entender mejor los mecanismos de la patología y combatirla de forma más efectiva.
En un mundo ideal, la vacuna debería imitar la respuesta inmunológica de nuestro cuerpo
"Esta información nos permitirá evaluar a cualquier candidato a ser vacunado, ya que en un mundo ideal la vacuna debería imitar la respuesta inmunológica de nuestro cuerpo", señaló Katherine Kedzierska, jefa del equipo de investigación, al medio local australiano ABC. Kedzierska agregó que las células que han visto "surgir" justo antes de la recuperación de la paciente son las mismas que combaten la gripe.