La Organización Mundial de la Salud (OMS) todavía no ha encontrado pruebas concluyentes de que el coronavirus pueda contagiarse a través de un contacto con una superficie artificial como pomos de puerta o teclados, según un último informe de la agencia médica de la ONU.
Sin embargo, la organización mantiene su recomendación a favor de la desinfección de superficies y objetos, siempre que sea posible y para tranquilidad de la población.
El estudio hace referencia a otro informe en el que se precisaba que el virus podría sobrevivir hasta siete días sobre una superficie. En este sentido, la OMS recuerda que estas pruebas fueron realizadas en un laboratorio, lejos de las condiciones del mundo real.
"La enfermedad Covid-19 se transmite principalmente a través de un contacto físico cercano y por residuos respiratorios", según el documento.
"En el momento de la publicación de este informe no se ha relacionado de manera concluyente el contagio con una superficie medioambiental contaminada, según los estudios disponibles", de acuerdo con el documento.
No obstante, y aunque no se tiene constancia por el momento de este tipo de casos, la OMS no descarta que estas superficies puedan alojar otro tipo de virus, de ahí que se insista en su desinfección habitual.
De esta forma, el coronavirus Sars CoV-2 vuelve a hacer una de las suyas: desmentirse a sí mismo. Durante estos meses, se ha dado por supuesto que el patógeno sobrevivía en las superficies y en los objetos inanimados, lo que ha llegado a la generalización incorrecta del uso de guantes y al temor colectivo.
Las primeras investigaciones realizadas al respecto parecían confirmar esta hipótesis: el virus puede permanecer en distintas superficies hasta tres días, como es el caso de los tenedores o las cucharas que utilizamos a menudo para comer. Así lo adelantaba en marzo un estudio realizado por los Institutos Nacionales de Salud (NIH) de Estados Unidos que se publicó en la prestigiosa revista The New England Journal of Medicine.
Según el trabajo, el coronavirus Sars CoV-2 podría estar presente en nuestros cubiertos de acero o en nuestras ollas y sartenes entre 13 y 72 horas. Así, en materiales plásticos como las botellas de leche o los envases de fruta que compramos en el supermercado, por ejemplo, entre dos y tres días. De acuerdo con la investigación, el virus podrías estar también presente hasta 24 horas en una cartulina y hasta cuatro horas en unas monedas de cobre.
Pero ya entonces se dudó de que esto implicara que tocar objetos o superficies fuera una manera de contraer el Covid-19. "¿Esto quiere decir que si tocamos fomites (objetos contaminados) nos infectaremos automáticamente?"- escribíamos en el artículo publicado al respecto en aquella fecha-.
No, la cosa no es tan fácil. De hecho, es posible que ya hayas tocado algún material contaminado y no haya pasado nada. Tal y como explica Marián García, farmacéutica y divulgadora, el Ministerio de Sanidad ya advirtió de que "la temperatura y la sequedad reducen progresivamente la resistencia del virus". Además, es posible que el virus que podemos encontrar en estas superficies no tenga la carga suficiente como para infectarnos.
Ahora, la Organización Mundial de la Salud viene a incidir en esa idea en su último informe, lo que dará tranquilidad a muchas personas temerosas de adquirir el Covid-19 por esta vía, pero también vuelve a confirmar que es mucha la información que nos queda por saber sobre el nuevo coronavirus.