Un grupo formado por 77 premios Nobel exige que se abra una investigación por la cancelación de la ayuda federal que permitía operar a EcoHealth Alliance, una organización científica que investiga en China los coronavirus transmitidos por murciélagos y que tiene colaboraciones con el Instituto Virológico de Wuhan. La decisión coincide con la difusión de un bulo, asumido por el presidente de EEUU, Donald Trump, de que eran "millones entregados al laboratorio que pudo originar la pandemia".
En la carta firmada por los especialistas, que recoge The New York Times, se califica de "absurda" la decisión tomada desde los Institutos Nacionales de Salud (NIH por sus siglas en inglés), el organismo responsable, de retirar la beca por no ajustarse "a los objetivos del programa y las prioridades de la agencia". A ello se suma una carta de protesta de la Sociedad Americana para la Bioquímica y la Biología Molecular, que representa a 31 asociaciones científicas y que exige que la cancelación sea "inmediatamente reconsiderada".
Según apunta la misiva firmada por los Nobel, la cancelación llega días después de que Trump respondiera afirmativamente a una pregunta de una reportera, que planteaba una falsa premisa: si pensaba retirar los 3,7 millones de dólares que su predecesor, Barack Obama, habían concedido a un "laboratorio chino en Wuhan". La Casa Blanca fue más lejos y mantuvo que el centro era "sospechoso" de ser el origen de la pandemia, una teoría que han repetido cargos de la administración estadounidense pero que la ciencia no respalda.
Lo cierto es que el Instituto de Virología de Wuhan está especializado en coronavirus transmitidos por murciélagos desde el brote de SARS de 2003-2004. Su subdirectora, Shi Zhengli, admitió haber "perdido el sueño" al inicio de la pandemia temiendo que el SARS-CoV-2 causante del COVID-19 se les "hubiera escapado a ellos", antes de que se confirmara su origen natural. EcoHealth Alliance está especializada en la zoonosis, la transmisión de enfermedades de animales a humanos, y en la prevención de epidemias, por lo que colaboran con el centro con asiduidad. Pero su sede está en Nueva York, y los fondos gubernamentales son gestionados en EEUU.
Según el director de EcoHealth Alliance, Peter Daszak, el NIH le interrogó brevemente después de la rueda de prensa de Trump sobre su relación con el laboratorio de Wuhan, tras lo que le comunicó que su ayuda quedaba cancelada. Preguntado por el diario, Harold E. Varmus, exdirector del NIH, admite que frecuentemente se producen choque entre la dirección del organismo y los investigadores en materias deontológicas como el uso de células madres embrionarias, pero que esta cancelación en plena pandemia supone "un ultrajante abuso de poder político para controlar el desempeño científico".
Richard J. Roberts, de New England Biolabs, ha sido el responsable de coordinar la respuesta de los Premios Nobel. "Su reacción fue muy rápida y enormemente positiva", destaca. Asegura que la investigación sobre coronavirus en murciélagos es fundamental precisamente cuando ése es el origen más verosímil de la actual pandemia. "Si vamos a cortar los fondos para alguien que es tan importante para nuestra lucha contra el coronavirus, ¿dónde iremos a parar?". La misiva concluye que se ha sentado un "peligroso precedente" al cancelar la ayuda que había sido concedida en base al "mérito científico" sin "razón justificable".