El 18 por ciento de los pacientes españoles con coronavirus que pasaron por las UCI eran diabéticos, según datos de la estadística que manejan las unidades de cuidados intensivos de la Comunidad de Madrid aportados por el doctor Teodoro Grau, especialista del Hospital 12 de Octubre.
El médico ha presentado estos datos en el seminario 'Problemas en nutrición crítica en tiempos de pandemia', organizado por la Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias (SEMICYUC) con la colaboración de Vegenat Healthcare.
De acuerdo con estas cifras, España se situaría por debajo de otros países como Estados Unidos o Italia, en los que estudios similares cifran el número de pacientes críticos diabéticos en más del 20 por ciento.
"El uso de esteroides, sobre todo a dosis elevadas, es lo que más nos ha impedido controlar la glucemia en esos pacientes", ha comentado el intensivista, quien ha relacionado este punto con la resistencia a la insulina de algunos enfermos (también como consecuencia del patrón inflamatorio).
Para el doctor Grau, el control glucémico en los pacientes COVID-19 debe ser el mismo que el que se realiza con los pacientes de sepsis: "Un control moderado que no estricto, manteniendo la glucemia entre 150-180 mg/dL".
Ese control pasa por una correcta terapia nutricional. Que los pacientes con coronavirus, especialmente los obesos y diabéticos, recibiesen "una nutrición adecuada es también un aspecto importante", ha detallado la doctora Luisa Bordejé, intensivista del Hospital Germans Trias i Pujol (Barcelona).
Para ello, los doctores españoles recomiendan una dieta hiperproteica que contrarreste la pérdida de masa muscular severa que sufren los pacientes críticos y evite la sarcopenia derivada de los tratamientos.
Al mismo tiempo, una suplementación de vitaminas D y C, que está comprobado que guarda relación con tasas más bajas de mortalidad.