Alerta contra la "falacia" de la inmunidad de grupo: la carta de 80 científicos
'The Lancet' recoge una carta de expertos de todo el mundo, incluyendo un español, que afirman que la inmunidad de 'rebaño' no está apoyada por la ciencia.
15 octubre, 2020 00:47Noticias relacionadas
Las personas y autoridades sanitarias que todavía mantienen la idea de que fomentar que un número elevado de personas menos vulnerables pase la Covid-19 y el resto se proteja así de la infección por la mal llamada inmunidad de rebaño -lo correcto es hablar de "de grupo"- están equivocadas.
Así lo ha destacado un grupo de 80 investigadores de todo el mundo -incluyendo al español José María Martín Moreno- en una carta publicada en la noche de este miércoles en la prestigiosa revista The Lancet, una iniciativa bautizada como El memorandum John Snow [el padre de la epidemiología moderna] en la que pretenden exponer su punto de vista en cuanto al consenso científico en torno a la Covid-19 y las estrategias que hay que llevar a cabo para proteger "la sociedad y la economía".
Los expertos de distintas disciplinas, desde la Medicina y la Salud pública a las Matemáticas, afirman que "es crucial actuar de forma urgente y decisiva". "Se necesita aplicar medidas efectivas que supriman y controlen la transmisión y hacerlo de forma masiva, aunque deben estar apoyadas por programas financieros y socilaes que animen a la buena acogida por parte de la comunidad y que suplan las desigualdades amplificadas durante la pandemia".
"Es probable que se requieran restricciones continuadas en el corto plazo para reducir la transmisión y arreglar las consecuencias de las respuestas ineficaces a la pandemia, todo ello para evitar futuros confinamientos", continuan.
"El propósito de estas restricciones es suprimir de forma eficaz las infecciones por Sars CoV-2 hasta que se queden en unos niveles tan bajos que permitan la detección rápida de nuevos casos y la localización de brotes, y que se pueda responder de forma rápida a través de la estrategia 'encontrar, hacer test, rastrear y aislar", escriben los investigadores, que apuntan a que proteger la economía está "inexorablemente ligado" al control de la Covid-19, acabando así con la falsa dicotomía economía o enfermedad.
Los autores reconocen que las restricciones actuales han llevado comprensiblemente a una desmoralización generalizada y han acabado con la confianza de la gente hacia las instituciones.
Esto ha hecho, apuntan, a que haya un "interés renovado" por las estrategias que promueven la inmunidad de grupo -las que abogan por una enfermedad descontrolada en la población de bajo riesgo mientras se protege a los vulnerables, lo que algunos creen que llevaría a la inmunidad de grupo de esa población de bajo riesgo, que acabaría protegiendo a los vulnerables-.
Pero los científicos firmantes -de las más prestigiosas instituciones y universidades del mundo- creen que esa teoría tiene muchos puntos débiles.
Explican que la transmisión incontrolada en gente joven aumenta de forma significativa la enfermedad y la muerte en toda la población, además de apuntar a que la experiencia real de muchos países demuestra que no es posible restringir los brotes sólo a ciertas secciones de la sociedad, además ser prácticamente imposible y, desde luego, muy poco ético, aislar sólo a ciertos segmentos de la población.
Así, afirman que los esfuerzos para proteger a los más vulnerables son esenciales, pero tienen que ir de la mano de estrategias poblacionales con enfoques múltiples.
Además, escriben que no hay evidencia de que la inmunidad natural -a la que se puede aspirar mientras no haya vacunas- proteja a largo plazo, por lo que este tipo de estrategia no llevaría a la inmunidad de grupo sino a olas de transmisión que se repetirían durante varios años.
Esto, explican, se ha visto en muchas enfermedades infecciosas hasta que se introdujo la vacuna respectiva frente a cada una de ellas. Así, los autores lo tienen claro:hay que suprimir la transmisión del virus hasta que la población pueda vacunarse.