Después de más de nueve meses con el coronavirus presente en la vida diaria, la población está bastante familiarizada con las distintas pruebas de diagnóstico. Hace unos meses se incorporaron a los hospitales los test de antígenos, cuya ventaja principal es la rapidez en el resultados (se obtienen en 15 minutos), aunque su sensibilidad es menor que una PCR, que continúa siendo la prueba de referencia para detectar el virus.
Ahora se suma a la lista una nueva prueba diagnóstica, la PCR en saliva. Promete fiabilidad, rapidez y, su mayor virtud, menores molestias para el paciente en la extracción de la muestras. “Desde el punto de vista médico, además, su sensibilidad nos ofrece un alto índice de fiabilidad”, asegura el doctor Leopoldo Álvarez, de Quirónprevención.
Los test PCR permiten detectar el virus en las primeras fases de la infección con gran sensibilidad y especificidad, incluso en pacientes asintomáticos, y por esta razón es la prueba más eficaz para diagnosticar la enfermedad. Con la aparición de los test de saliva, cabe destacar que la mayor diferencia entre éstos y una PCR tradicional es el tipo de muestra, puesto que el proceso de análisis de la misma es el mismo. Aunque sí se han detectado diferencias en la fiabilidad de las muestras: la nasofaríngea permite detectar carga viral incluso después de la fase de contagio, mientras que la de saliva es más eficaz detectando la presencia del virus en la primera fase.
Adiós a los temidos bastoncillos
La mayor ventaja de esta prueba es que es mucho más cómoda y menos invasiva para el paciente. El procedimiento para la extracción es muy simple y no requiere ser realizado por un especialista, como sí ocurre con la PCR tradicional. “El proceso de recogida de la muestra para la PCR con saliva es muy sencillo y en tan sólo 2 o 3 minutos estará lista para su envío al laboratorio.”; explica el doctor Álvarez. Posteriormente, los resultados se pueden obtener entre 24 y 48 horas.
En esta prueba no son necesarios los temidos bastoncillos, sino que basta con depositar la saliva en un frasco o utilizar un salivette, un dispositivo muy simple para la extracción de muestras de saliva mediante la masticación de un colector. Por la facilidad en la extracción, esta prueba puede ser “más recomendable para su uso en niños pequeños y personas mayores”.
Para la toma de la muestra, el paciente debe seguir ciertas directrices que no suponen mayor complicación como no comer, beber, masticar chicle o fumar 30 minutos antes de realizar la prueba. Por otro lado, “es conveniente limpiar de residuos la cavidad bucal bebiendo agua treinta minutos antes de la toma de la muestra, así como mantener una correcta higiene de manos en todo momento”, apunta el doctor Álvarez. También es recomendable, explica el experto, hacerlo a primera hora de la mañana y antes de aplicar cremas o maquillaje en los labios.
Finalmente, un beneficio añadido de realizar pruebas PCR en saliva es que permite recoger muestras de una gran cantidad de personas más fácilmente y eliminando el riesgo de contagio de personal sanitario durante la toma de muestras. Además, ya que las muestras también deben trasladarse a un laboratorio para su análisis, éste resultaría igualmente sensible que el de la PCR tradicional. Los resultados obtenidos hasta ahora con el análisis colectivo de ambas PCR, explica el Dr. Álvarez, son totalmente comparables, por lo que se ha concluido que es una prueba fiable.
La prueba, desde casa
Parece claro que la principal ventaja de la PCR en saliva es la sencillez de la extracción de la muestra, lo que permitirá que incluso los pacientes puedan realizarse la prueba desde su propio domicilio. Para ello, la empresa de prevención de riesgos laborales del grupo Quirónsalud, Quirónprevención, ofrece esta prueba en todos sus centros de España, y además tienen la posibilidad de enviar a casa un kit en un día laborable para la toma de la muestra. Después, el paciente debe enviar su muestra al laboratorio y en uno o dos días podrá recibir los resultados. También se realiza esta prueba en todos los hospitales del grupo.
Estas semanas muchas personas han decidido hacerse pruebas de diagnóstico de cara a las reuniones familiares de Navidad. En estos casos, lo más recomendable es realizar una prueba PCR, ya que es la más fiable a la hora de detectar una posible infección activa y así poder pasar unas fiestas más seguras.