Obstrucción intestinal: así es el peligroso trastorno por el que el papa Francisco será operado

El papa Francisco estará ingresado durante unos días en el hospital Gemelli de Roma, después de que este miércoles sea operado del abdomen. "A primera hora de la tarde será sometido bajo anestesia general a una intervención quirúrgica de laparotomía y cirugía plástica de la pared abdominal con prótesis", ha informado la Santa Sede en un comunicado. Esta operación se ha hecho necesaria a causa de una hernia incisional incarcerada que está provocando síndromes suboclusivos recurrentes.

La obstrucción intestinal por la que el Papa será operado de urgencia es un bloqueo que no permite que pase la comida ni cualquier líquido a través de los intestinos, tal y como apuntan desde Mayo Clinic. Esta patología, que también se denomina oclusión intestinal, intestino bloqueado u obstrucción gastrointestinal, puede producirse por muchas causas.

Varían en función de la edad del paciente y la localización de la obstrucción. Según la American Society of Clinical Oncology, es más frecuente en personas con ciertos tipos de cáncer y en personas con cáncer avanzado. "En pacientes que no tienen antecedente de cirugía previa, podemos pensar en causa de origen tumoral como es el cáncer de colon, o hernias de pared abdominal no diagnosticadas previamente", explica en declaraciones a este periódico el doctor Felipe Acedo, especialista de Cirugía General y del Aparato Digestivo en HM Montepríncipe.

[Los 6 alimentos que están destrozando tu intestino sin que te des cuenta: habituales en España]

Otra de las causas más comunes de obstrucción intestinal en adultos son las adherencias intestinales; esto es, unas bandas de tejido fibroso en la cavidad abdominal. Otras causas posibles de obstrucción intestinal incluyen las hernias, las enfermedades intestinales inflamatorias o las heces retenidas. 

Cuáles son los síntomas

"En enfermedades tumorales existen distintos tratamientos que pueden realizarse, dependiendo de la localización del tumor que hace más compleja la decisión terapéutica", apunta Acedo. La mayoría de las obstrucciones intestinales son bloqueos parciales que mejoran por sí solos. La sonda nasogástrica puede ayudar a que se desbloquee el intestino cuando se eliminan los líquidos y los gases. Algunas personas necesitan más tratamiento, como supositorios o enemas, para ayudar con la evacuación del intestino.

Una obstrucción completa sí que puede requerir cirugía —como sucede en el caso del papa Francisco—, puesto que si la obstrucción no se trata, el intestino puede llegar a perforarse, liberando así su contenido y causando inflamación e infección de la cavidad abdominal.

Los síntomas de la obstrucción intestinal suelen incluir dolor abdominal de tipo cólico, acompañado de hinchazón y pérdida del apetito. Este dolor empieza de forma irregular, aunque finalmente se vuelve continuo. Los vómitos son frecuentes en las obstrucciones del intestino delgado; sin embargo, en las del intestino grueso no son tan comunes y además comienzan más tarde.

La obstrucción intestinal completa provoca estreñimiento grave, mientras que la parcial puede causar diarrea en algunos casos. Los signos también difieren si se produce el conocido como estrangulamiento intestinal, una interrupción del flujo sanguíneo al intestino. Ante esta situación, el dolor se vuelve intenso y constante. La fiebre es frecuente y particularmente probable si se perfora la pared intestinal. Esta perforación puede entrar a la cavidad abdominal y propagar bacterias, por lo que puede ser mortal.

Factores de riesgo

Como en todas las patologías, algunas características incrementan el riesgo de una obstrucción intestinal. Dentro de los cuadros de abdomen agudo, uno de los más frecuentes es la oclusión intestinal, completa o incompleta, que constituye entre el 20 y el 35% de los ingresos urgentes de las áreas quirúrgicas hospitalarias, según este artículo.

Así, si los intestinos de una persona no se han desarrollado adecuadamente, serán más propensas a las obstrucciones. Otro de los factores de riesgo por lo que se puede desarrollar una obstrucción intestinal es el cáncer, especialmente el de abdomen.

Aquellas personas a las que se les haya diagnosticado la enfermedad de Crohn también tienen un mayor riesgo, ya que las paredes de los intestinos pueden engrosar durante la enfermedad. Una cirugía abdominal también puede incrementar el riesgo de adhesiones. Además de la cirugía, los tratamientos para la obstrucción intestinal pueden incluir medicamentos, ya que puede ayudar a aliviar la molestia causada por este trastorno intestinal.

Los cambios simples en la dieta y estilo de vida pueden ayudar a reducir el riesgo de obstrucciones intestinales. También ayudarán con la recuperación después de un episodio de obstrucción. En este sentido, la edad hace que el sistema digestivo se vuelva más lento, por los que es recomendable hacer cambios en la dieta en las etapas más tardías de la vida para compensarlo.

"Como es lógico, los pacientes de mayor edad tienen en sus antecedentes un mayor número de intervenciones abdominales, que constituyen la primera causa de cuadros obstructivos", señala el doctor de HM Montepríncipe. En este grupo poblacional también son más frecuentes los tumores, otra de las causas de la obstrucción intestinal. "Un factor de riesgo para presentar cuadros obstructivos también es la presencia de enfermedades intestinales crónicas o agudas".

El riesgo de mortalidad de esta patología dependerá de diversos factores: "De la causa de la obstrucción, de la situación previa del paciente con sus enfermedades asociadas y de la complejidad del procedimiento terapéutico necesario para la corrección de la obstrucción", enumera Acedo.