Cuatro años después del inicio de la pandemia y tres desde que comenzaron las vacunaciones masivas contra la Covid todavía siguen generándose nuevos bulos sobre las vacunas para inducir confusión, dando la vuelta a lo que en realidad son noticias positivas que son un espaldarazo para esas demonizadas vacunas.

El último de estos bulos se refiere a que Japón ha anunciado que las prohíbe tras detectar un tsunami de muertes súbitas.

"Hoy, Japón ha prohibido las 'seguras y efectivas' vacunas covid y urge a otras naciones a hacer lo mismo tras un grave aumento en el exceso de muertes", apunta la cuenta de X (antes, Twitter) 'Concerned Citizen' (Ciudadano Preocupado).

"La verdad sobre lo que se ha hecho a la humanidad continúa fluyendo, no pueden pararla", señala y adjunta un pantallazo de una web donde se lee de titular "Japón prohíbe las inyecciones Covid por el aumento de muertes súbitas".

La web, 'prepareforchange.net' (prepárate para el cambio), ha tomado esta noticia de otra con el mismo titular. Entre las noticias top de esta otra web, 'newsaddicts.com' (adictos a las noticias), podemos leer algunas como "Canadá congelará las cuentas bancarias de ciudadanos con bajo crédito social", "Bill Gates: el DNI digital será obligatorio para participar en sociedad" o "Un doctor famoso emite la alerta roja: 'Las madres embarazadas americanas están muriendo ahora a ritmos alarmantes'".

La noticia cuenta que Japón acaba de prohibir las vacunas Covid basadas en ARN mensajero y hace un llamamiento a las naciones para que sigan su ejemplo tras un estudio oficial del Gobierno que relaciona las inyecciones al incremento de muertes súbitas en la nación.

No dice nada más: ni quién ha hecho el anuncio, ni cuántas muertes súbitas se han contabilizado, ni a partir de cuándo se prohibirían, ni qué pasaría con la gente vacunada.

Caída de la población en Japón

Sí dice que este problema se ha vuelto tan grave que el país está afrontando "ahora" un colapso de la población ya que mueren más ciudadanos que nacen bebés.

Este problema es real, pero no está relacionado con las vacunas. De hecho, Japón lleva 14 años viendo reducir sus cifras de población al registrar cada vez menos nacimientos y recibir muy poca inmigración.

La verdad es que Japón no prohíbe las vacunas sino que el Gobierno ha dejado de financiarlas para los menores de 65 años a partir de este marzo, que es cuando comienza el año fiscal en el país.

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Como muchos otros países (España entre ellos), lo que fueron campañas de vacunación masiva en toda la población en los dos primeros años se ha reducido a ofrecer refuerzos solo a la población vulnerable: personas mayores y gente con condiciones de riesgo.

Para el resto se entiende que, con las vacunas ya inoculadas —aunque se basen en variantes muy alejadas de las que están en circulación ahora mismo— y las repetidas infecciones que ha vivido gran parte de la población este tiempo, su sistema inmune está preparado para resistir al virus.

Esto significa justo lo contrario de lo que pretenden los antivacunas: en realidad, el anuncio de Japón es símbolo del éxito en la vacunación.

Regreso a la normalidad

El diario The Japan Times, en una noticia fechada el 5 de marzo, explica que el Gobierno "dijo el martes que dejará de subsidiar los gastos médicos de personas infectadas con Covid-19, incluyendo la fijación del coste de los medicamentos, a finales de marzo dado el declive en el número de casos".

El sistema de salud nipón regresa, de esta forma, a la normalidad. Así, los pacientes tendrán que pagar entre el 10% y el 30% del coste de los medicamentos Covid, dependiendo de su nivel de renta, y tampoco se reservarán camas para infectados por SARS-CoV-2.

Japón no le tiene miedo a las vacunas. De hecho, en noviembre del año pasado se aprobó la primera de ellas desarrollada en el país (por el laboratorio Daiichi-Sankyo) y dirigida a la variante XBB, actualmente circulante. Una vacuna, por cierto, basada en el ARN mensajero.

El propio primer ministro japonés, Fumio Kishida (que ya ha superado los 65 años), se inoculó un refuerzo vacunal contra la Covid ese mismo mes. Su Gobierno compró 1,4 millones de dosis de la vacuna.