El éxito de la vacuna contra la bronquiolitis en España: "Es un hito histórico en la pediatría"
Los expertos esperan que esta vacuna contra el virus respiratorio sincitial también haga reducir lo casos de hiperreactividad bronquial a largo plazo.
18 septiembre, 2024 02:38Las campañas de vacunación frente a las infecciones respiratorias arrancan ahora que se acercan los meses de frío en España. Entre ellas, la nueva temporada de vacunación frente a la bronquiolitis ocasionada por el virus respiratorio sincitial (VRS) para lactantes se espera con especial ilusión. Esto se debe a que el año pasado fue protagonista de un gran éxito: el Ministerio de Sanidad ha calculado que evitó el año pasado hasta 10.000 hospitalizaciones y que se administró a cerca del 90% de la población susceptible de recibirla en nuestro país.
Esto se traduce en una reducción del 75% en las hospitalizaciones de niños menores de un año y hasta 277.000 dosis administradas. "Los pediatras estamos felices. Esta vacuna ha supuesto un hito histórico en Pediatría, como pudo ser en su momento la aparición de la vacuna de la meningitis", celebra María Garcés, pediatra y miembro del Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría (CAV-AEP). Esta vacuna es, en realidad, un anticuerpo monoclonal que recibe el nombre de nirsevimab y se comercializa como Beyfortus.
"Digamos que proporciona a los bebés los anticuerpos que cualquier adulto podría generar frente al VRS. Ellos todavía son muy pequeños para producirlos", explica Garcés. Esta fórmula fue aprobada por la Unión Europea hace dos años para prevenir la enfermedad de las vías respiratorias inferiores que produce el VRS. La temporada 2023-2024 fue, en este sentido, la primera en la que se introdujo nirsevimab en España después de que fuera aprobado por la Comisión de Salud Pública (CSP).
Repetir el éxito
La temporada que empieza ahora, por lo tanto, es la segunda en que se administra esta vacuna. "No me cabe duda de que se va a repetir el éxito del año pasado, sobre todo después de ver lo bien que funcionó en su primera temporada", asegura la pediatra. "Los pediatras en atención primaria (AP) hemos transmitido mucho la importancia de esta vacuna". De hecho, se considera que el VRS es el responsable de hasta el 80% de las bronquiolitis y de las neumonías en los lactantes y está especialmente presente en el ambiente entre los meses de octubre a marzo.
Tal y como cuenta la experta, estas bronquiolitis que requieren la hospitalización de los lactantes limitan en gran medida la vida de las familias afectadas. "Son niños muy pequeños que tienen el riesgo de necesitar ser intubados y no hay un tratamiento específico para la insuficiencia respiratoria que padecen. Sólo podemos proporcionar medidas de sostén, como oxígeno, alimentación o suero", subraya Garcés. De hecho, una vez curados estos niños pueden presentar una hiperreactividad bronquial, el pulmón queda más sensible y pueden tener cuadros de asma.
Por esta razón, los pediatras también esperan que la vacuna tenga un efecto a largo plazo. Al evitar que más niños contraigan esta infección severa, podrían descender también los casos en el futuro de asmas. Además, no es necesario que estos niños tengan patologías previas que los hicieran más vulnerables. Hasta el 98% de los lactantes que requieren ser hospitalizados por esta infección se encuentran previamente sanos, tal y como se explica en la página del CAV-AEP.
Alta seguridad y eficacia
Por fortuna, al tener España una baja tasa de mortalidad, el principal reto que presentaba el VRS eran unas altas cifras de hospitalización en recién nacidos. La vacuna, en este sentido, podría reducir considerablemente estas tasas, además de los costes hospitalarios derivados, la preocupación de los padres y esos posibles casos a largo plazo de hiperreactividad bronquial. La vacuna está financiada en toda España y, tal y como explica Garcés, ha aportado datos impresionantes de seguridad y de efectividad.
"Sólo se han observado irritaciones en la piel en la zona en la que se administra en algunos casos y la eficacia está en torno al 80%, en los casos más severos incluso del 90%. Hay una evidencia clarísima de los beneficios de esta vacuna y vamos que los anticuerpos monoclonales son seguros, efectivos y deben administrarse a los niños. Es una alegría que, a partir de ahora, haya niños que nunca lleguen a sufrir la enfermedad", sostiene Garcés.
En esta temporada 2024-2025 la vacuna está recomendada para la población que tenga menos de seis meses de edad al comienzo de la campaña y durante la misma, es decir, bebés nacidos entre el 1 de abril de 2024 y el 31 de marzo de 2025. Además, también están incluidos los prematuros de menos de 35 semanas y la población infantil con condiciones previas que elevan su riesgo de padecer una infección grave. "En esta temporada parece que tenemos, además, asegurado el abastecimiento de esta vacuna", cuenta la pediatra.
España es, en este sentido, uno de los grandes pioneros en la aplicación de esta vacuna en la población infantil. "Teníamos datos consistentes y las decisiones que se han tomado en sociedades científicas y otros organismos han sido acertadas. Los resultados son espectaculares. Lo mismo está pasando ahora en Chile, que está acabando su invierno, donde también están viendo esos buenos resultados", explica Garcés.