Soy experta en longevidad y esta es la única recomendación que tengo para los mayores de 50 años en España en 2025
- La actividad física, junto con otras acciones, puede ser la clave para mantener una vida larga y saludable.
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Dejar de fumar, reducir el consumo de alcohol, comer menos comida basura y más verduras, apuntarse al gimnasio, aprender inglés… El comienzo de un nuevo año suele venir cargado de propósitos para mejorar nuestra vida. Sin embargo, la realidad es que, en muchas ocasiones, estos objetivos no llegan a concretarse, lo que lleva a preguntarnos si realmente vale la pena intentarlo.
A pesar de esta percepción, dos geriatras especializados en longevidad aseguran, en el medio digital Parade, que establecer propósitos relacionados con la salud sí merece la pena, siempre que sean realistas y sostenibles a largo plazo. Por eso, han hecho un llamamiento especial a las personas mayores de 50 años adoptar un hábito clave para mejorar su salud y calidad de vida de manera significativa: hacer ejercicio.
Así lo afirma la Dra. Sonja Rosen, geriatra y directora médica de geriatría en Cedars-Sinai: “Si quieres dar un paso hacia una vida más larga y saludable, este es el objetivo que debes plantearte”. A este llamamiento, se une el Dr. Richard W. Besdine, profesor de medicina en la División de Geriatría y Medicina Paliativa de la Alpert Medical School de la Universidad de Brown: “¡Sé más físicamente activo!”.
Ambos expertos en longevidad coinciden en que la actividad física es la mejor decisión que las personas mayores de 50 años pueden tomar. Esta beneficia tanto al corazón como al cerebro, reduciendo el riesgo de enfermedades cardiovasculares y de demencia. También mejora el flujo sanguíneo al cerebro, lo que ayuda a prevenir la acumulación de placas, vinculada a la demencia. Incluso se ha demostrado que el ejercicio moderado puede reducir el riesgo de Alzheimer.
Además de estos beneficios para el corazón y el cerebro, los especialistas destacan que el ejercicio regular mejora el equilibrio y reduce el riesgo de caídas. “El ejercicio disminuye las caídas hasta en un 39%”, señala la Dra. Rosen, añadiendo que también tiene un impacto positivo en la salud mental: “El ejercicio produce endorfinas naturales que ayudan a combatir la depresión”.
Compromiso y no caer en el desánimo
Aunque los beneficios de la actividad física son bien conocidos, el desafío es conseguir que se convierta en un hábito duradero. Para ello, la Dra. Rosen aconseja una actividad física que realmente se disfrute. Por ejemplo, recomienda los ejercicios en grupo. “Hacer ejercicio en grupo o incluso en línea es una excelente forma de mantenerse activo físicamente y, al mismo tiempo, de conectarse socialmente”, aconseja.
Los doctores coinciden en que comprometerse a caminar a diario es un buen comienzo. La investigación científica muestra que caminar 6.000 pasos al día está relacionado con una vida más larga. “Si tienes 70 años o más, caminar 150 minutos a la semana, o 30 minutos cinco días a la semana, reduce el riesgo de enfermedades cardíacas, diabetes y Alzheimer”, afirma el Dr. Besdine.
Otra opción que sugiere la Dra. Rosen es seguir las recomendaciones de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de hacer al menos 150 minutos de ejercicio de intensidad moderada por semana. Esto equivale a 22 minutos al día todos los días o 30 minutos diarios cinco días a la semana. Además, el Dr. Besdine aconseja incluir entrenamiento de fuerza un par de días a la semana para mantener la masa muscular y ósea y reducir el riesgo de caídas.
Un reto demográfico
En nuestro país, la esperanza de vida se sitúa en los 83 años. Además, el segmento de población mayor de 50 años constituye una parte significativa de la población total. Según el INE, alrededor del 40% de los habitantes de España tienen 50 años o más, y este porcentaje sigue creciendo debido al envejecimiento de la población. Dado que cada vez hay menos nacimientos, podemos afirmar que España es y será, al menos durante un tiempo, un país envejecido.
Este envejecimiento hace que el cuidado de la salud en la mediana y tercera edad sea una prioridad tanto a nivel personal como en términos de políticas de salud pública. Adoptar hábitos saludables, como el ejercicio físico regular, puede ser especialmente importante para esta franja de edad. Según estudios, en España, más del 25% de las personas mayores de 65 años sufren caídas anuales, y el sedentarismo es un factor de riesgo clave tanto para estas caídas como para el desarrollo de enfermedades crónicas como diabetes, enfermedades cardiovasculares y demencia.
Incorporar propósitos relacionados con la salud, como los que proponen los dos especialistas, no solo podría mejorar la calidad de vida individual, sino también aliviar la presión sobre el sistema sanitario. En un país donde casi una quinta parte del PIB se destina al gasto público en pensiones y sanidad , prevenir enfermedades relacionadas con la inactividad física en personas mayores de 50 años podría tener un impacto positivo en la economía y en la sostenibilidad del sistema.
Por tanto, más allá de una simple recomendación personal, los propósitos de Año Nuevo de la Dra. Sonja Rosen y del Dr. Besfine puede generar un impacto que se alinea con las necesidades demográficas y de salud pública de España. Para un país que envejece rápidamente, fomentar hábitos saludables puede marcar la diferencia en la calidad de vida de millones de personas.