González Barros: “Las startups viven un momento dulce”
El fundador de una de las grandes ‘fábricas’ de firmas de Internet reconoce, pese a todo, que existe inflación en valoraciones.
16 octubre, 2015 02:28Por sus manos han pasado muchos proyectos. Grandes y pequeños. Exitosos y otros no tanto. Grupo Intercom, su empresa y ‘cuna’ de destacadas compañías digitales como Infojobs o Softonic, representa un buen termómetro de ese sector. Veinte años después de fundarla, Antonio González Barros está convencido de que tras la dura crisis económica se vive un “momento dulce” para las firmas en Internet. La incubadora ha logrado que, por primera vez desde que estalló la crisis, ocho de sus principales participadas eleven su negocio a doble dígito.
“El cambio ha sido tremendo; el momento no tiene nada que ver con el que vivimos hace tres años”, reconoce el directivo en declaraciones a EL ESPAÑOL. Después de la travesía en el desierto que arrancó a finales de la pasada década, llegan los buenos resultados de algunas de sus compañías. Una de las consecuencias directas: existe más interés por adquirirlas por parte de potenciales compradores.
En estos veinte años –se fundó en 1995 en Barcelona-, Intercom ha ingresado en su caja más de 180 millones de euros en las ventas de hasta una quincena de firmas. Dos de las más destacadas son: Infojobs, primero al canadiense de clasificados Trader y luego al noruego Schbisted, y Niumba, al gigante Tripadvisor. Ahora, negocia la venta de otras dos de su cartera. “Están, más o menos, en el ecuador de las conversaciones; en tres de cada cuatro negociaciones que llegan a este punto se acaba en acuerdo de venta”, precisa el empresario.
El cambio ha sido tremendo; el momento no tiene nada que ver con el que vivimos hace tres años
Inflación en las valoraciones
Esta situación coincide con un mayor interés en las startups y proyectos innovadores no sólo mostrado por las grandes corporaciones sino también por los inversores de capital riesgo y grandes patrimonios. Estos últimos han visto al sector como una buena vía para encontrar la rentabilidad que no logran en otros terrenos.
El efecto en el mercado es claro: una “inflación” en las valoraciones económicas de los proyectos. Así lo reconoce el propio González Barros, quien ya vivió al frente de Grupo Intercom la explosión de la burbuja puntocom. Él entiende que no hay grandes diferencias respecto al número de empresas que nacen y, por tanto, al porcentaje de las que triunfan. Sí hay cambios en la fijación de los precios.
La burbuja puntocom de 2000 afectó a las grandes, pero no vi la inflación en empresas recién nacidas como sí veo ahora
“La burbuja puntocom de 2000 afectó a las grandes, pero no vi la inflación en empresas recién nacidas como sí veo ahora”, reconoce. Y pone un ejemplo: hoy hay compañías que con menos de medio año de vida logran una ronda de financiación y se fijan precios que llegan a superar, en muchas ocasiones, el millón de euros. La razón: “Cierta descompensación entre oferta de capital y demanda”.
En mercados más maduros y con un tamaño mucho mayor que el español, se da por descontado un ajuste de esos precios fijados para valorar startups. ¿Se dará también en España? González Barros cree que habrá una rebaja “no sólo en las compañías que están en la ‘Champions League’, sino en todas”.
Esa reducción vendrá, según él, por tres vías: rondas de financiación a valoración muy inferior –como ocurrió recientemente con Softonic-, la venta de la compañía a otras empresas con una rebaja en la cifra final o, en algunos casos, el cierre definitivo. “Los precios altos y bajos forman parte del ciclo económico… son las reglas del juego”, recuerda.
Los precios altos y bajos forman parte del ciclo económico… son las reglas del juego
Cambio de estrategia
Mientras esto sucede, Grupo Intercom reajusta su estrategia. González Barros, junto a los más de 450 socios, persigue seleccionar mejor los proyectos. Y es por ello que en los últimos años ha ido reduciendo su cartera de participadas. Llegó a gestionar más de 35 compañías en su seno antes de 2010. Hoy cuenta con una veintena, después de haber cerrado algunas que no funcionaron e, incluso, haber vendido a un precio más bajo. Y quiere menguar esa cifra.
“Queremos poner más foco sobre menos proyectos y apoyarlos con más capital para que crezcan más rápido en un mercado con una gran competencia”, explica el directivo. El recorte se producirá en el lado de las compañías maduras y no del lado de las más experimentales. Las primeras hoy suman ocho y las segundas, 12. En los próximos tres años, las primeras podrían quedarse en seis o, incluso, en algo menos. En la actualidad, en su cartera se encuentran firmas como Enalquiler, Emagister o Solostock.