Qué fue antes, ¿el huevo o la gallina? ¡Manda huevos! Pero mira que eres huevón… Si nos pusiéramos a buscar frases o expresiones que contengan la palabra huevo no pararíamos nunca, pero igual pasa con la cantidad de platos que se pueden hacer con este espectacular alimento: Huevo frito, cocido, pasado por agua, escamochado, estrellado, escalfado, al plato, al horno… y todos los que se te ocurran.

Hoy desde Cocinillas brindamos un especial homenaje al huevo celebrando el día Internacional del huevo 2011: El especial de los huevos.

La cocina es una técnica que a lo largo de la historia de la humanidad se ha ido desarrollando. Las primeras formas de alimentación del ser humano eran las más básicas, cazando y comiendo los productos que la naturaleza nos ofrecía. El huevo fue uno de los primeros alimentos que el hombre empezó a consumir que no provenían diréctamente de la naturaleza, sino que había que trabajar un poco más. Actualmente los más consumidos son los de gallina, aunque se consumen también los huevos de oca, pato y codorniz, e incluso los de avestruz en algunas partes del mundo.

En realidad los huevos de todas las especies que los pongan son comestibles, pero depende de la región que lo hagan o no. En algunos países se comen los huevos de tortuga e iguana, algo que en el mundo occidental no es normal pero fuera si. Todo son costumbres.

¿Sabías que la cáscara del huevo es todo un logro de la ingeniería natural? Me he encontrado con que curiósamente mucha gente no sabe esto, y es que si aprietas un huevo con todas tus fuerzas exáctamente por la parte superior e inferior no podrás romperlo. Pensarás que te estoy tomando el pelo para gastarte una broma y que te ensucies, pero es totalmente cierto. El diseño del huevo se basa en dos cúpulas unidas, una estructura que reparte todo el peso o fuerza aplicada por sus laterales, lo que la hace increíblemente resistente, de ahí que los arquitectos e ingenieros la hayan copiado para construir grandes estructuras. Esto hace que el huevo sea muy resistente al aplicar fuerza en ese sentido. Sin embargo, si se nos inclina un poco se romperá de inmediato.

Alguna vez he oído decir que los huevos blancos y morenos se diferencian en que uno son machos y otro hembras, pero la realidad es que depende de la raza de gallina que lo haya puesto. Lo que si es cierto es que el tamaño del huevo depende de la edad de la gallina, cuanto mayor sea de mayor tamaño son sus huevos, y en los grandes se puede producir doble ovulación y encontrarnos con un huevo con dos yemas.

De los más o menos 70 gramos que pesa un huevo el 11% lo aporta la cascara, el 31 por la yema y el 58% la clara. Es un dato aproximado y depende del ave y raza, pero son porcentajes que se acercan siempre bastante.

Otra curiosidad es que cuando el huevo se encuentra en el interior del animal no son ovalados, sino esféricos. Además tampoco son duros, son blandos. El cambio radical viene a la hora de poner el huevo, cuando el animal utiliza sus músculos internos y el huevo adquiere la forma y dureza con la que llega al exterior.

La cáscara del huevo es una fuente altísima de calcio, pero comer cáscara de huevo es bastante peligroso por las heridas internas que nos podría ocasionar. La dosis diaria de calcio recomendada es de 1 gramo, y la cáscara de un huevo tiene 6.5 gramos de calcio, así que si queremos aprovecharlo tendremos que recurrir a técnicas como la de los huevos en vinagre, que reblandecen la cáscara y la hacen consumible.

Todos sabemos que la yema del huevo es amarilla pero, ¿por qué? La yema toma el color amarillo debido a los pigmentos que las aves obtienen de sus alimentos, por lo que serán más o menos amarillos según de qué se alimenten. Erróneamente se considera que los huevos más amarillos son de mayor calidad, y por ello los cuidadores añaden aditivos al pienso que le dan un color amarillo más intenso a las yemas de los huevos de sus gallinas.  En cocina la yema se usa para emulsionar salsas debido a sus propiedades coagulantes.

En la clara es donde se encuentra la proteína del huevo, ya que lo único que la compone es un 90% de agua y el resto es casi todo proteína, vitaminas, minerales y glucosa.

Respecto a las propiedades nutricionales del huevo siempre ha habido mucha polémica. De media para un huevo crudo por cada 100 gramos tenemos 150 Kcal, y es alto en grasas (10.6 gramos) y proteínas (12.6 gramos). Además contiene Vitaminas A, B1 y B2, ácidos pantoténico y fólico, calcio, hierro, magnesio, fósforo, potasio, zinc, colina y 410 mg de colesterol. Es un alimento muy completo y muy sano, así que no deberíamos dejar de tomar huevos y deberían estar presentes, aunque con moderación, en nuestra alimentación.

Cada uno tenemos un plato favorito elaborado con huevo. Si me preguntáis por el mío os diré que no sólo es mi favorito con huevo, sino que es mi plato favorito de entre todos (al menos de los que he probado): la tortilla española. Si hay que elegir una forma de preparar el huevo tampoco tengo dudas: el huevo frito. ¿Y vosotros? ¿Cómo preferís los huevos? ¿Cuál es vuestro plato favorito elaborado con huevos?