Tengo mudanza a la vista y llevo dos días en la tediosa tarea de buscar un piso bueno, bonito y barato que sea mi hogar en una nueva etapa de mi vida que acaba de comenzar. No es tarea fácil, el que está bien orientado y tiene buena luz está incomunicado; el que está bien comunicado es diminuto y me da claustrofobia solo de pensarlo;si es espacioso, la cocina está hecha unos zorros y eso para una cocinillas como yo es un problema… Sí, también hay algunos que lo tienen todo, pero esos cuestan una pasta.

Pero hablando de cocinas, que en mi caso es un factor con mucho peso a la hora de decidir, la verdad es que no hay una tendencia común y lo que estoy viendo me sorprende un poco. Así que he pensado que como es posible que algunos de vosotros también estéis a la caza de vuestro nuevo hogar y ese piso al que le habéis echado el ojo tenga un tipo de cocina que no habéis usado antes os va a interesar saber cuáles son las ventajas y los inconvenientes de cada tipo de cocina, gas, vitrocerámica o inducción.

Gas, vitrocerámica o inducción, ventajas e inconvenientes de cada tipo de cocina

A día de hoy los tipos de cocina que más nos encontramos en un piso son gas, vitrocerámica o inducción. En algunos casos rarísimos podemos encontrarnos cocinas eléctricas con las que no me voy a extender porque no tienen ventaja ninguna, son lentas, difíciles de limpiar y consumen muchísima electricidad.

Ventajas e inconvenientes de las cocinas de gas

Son la fuente de calor favorita en las cocinas profesionales y en las cocinas domésticas pueden ser de dos tipos, cocinas de gas monobloque con horno de gas, con las que si sois amantes de la repostería podéis llorar amargamente cuando no podáis regular la temperatura del horno, y las placas de gas con horno eléctrico que para algunos puede ser una opción interesante. Yo la he usado durante mucho tiempo pero si tuviese que volver a ellas sería con resignación.

Ventajas de las cocinas de gas

• Calientan rápido
• Consumen poca energía.
• Admiten todo tipo de recipientes.
• Son perfectas para preparar guisos tradicionales.

Inconvenientes de las cocinas de gas

• Son difíciles de limpiar, ya que hay que limpiar la base, los quemadores y las parrillas y es fácil que se acumule suciedad de la que se resiste.
• Son causa de más accidentes en la cocina debidos a los despistes.
• La mayoría funcionan con bombonas de gas butano y hay que estar pendientes de reponer la de repuesto antes de que se acabe la que está en uso que por la ley de Murphy siempre se acaba en el peor momento.

Ventajas e inconvenientes de la vitrocerámica

En los últimos años les han ganado mucho terreno a las cocinas de gas y a día de hoy son tan habituales como estas. Mis últimos seis años han sido con este tipo de cocinas y, personalmente, no me disgustan.

Ventajas de la vitrocerámica

• Son más baratas que las cocinas de inducción.
• Son más fáciles de limpiar que las cocinas de gas, sobre todo si se limpian después de cada uso para no dejar restos de comida ni de grasa que se acaben quemando con el calor.
• Permiten todo tipo de recipientes.
• Conservan bien el calor residual, lo que nos permite terminar de cocinar guisos con el fuego apagado.

Inconvenientes de la vitrocerámica

• Tarda tiempo en calentarse, más que el gas o que la inducción, por lo que el consumo de energía es mayor.
• Se rayan si no se limpian con los productos adecuados.

Ventajas e inconvenientes de las cocinas de inducción

Son las más modernas y no es fácil encontrarlas instaladas en pisos que ya tengan algunos años, ni siquiera aunque estén completamente reformados.

Ventajas de las cocinas de inducción

• Calientan muy rápido, por lo que el consumo de energía es menor.
• Lo que se calienta es el recipiente, pero el cristal permanece frío, lo que reduce el riesgo de accidentes y evita que la comida que se derrama se queme, cosa que también hace que su limpieza sea facilísima.
• Las más modernas ofrecen ventajas adicionales como programar el tiempo o la temperatura de cocción.

Inconvenientes de las cocinas de inducción

• Son las más caras de todas, por lo que es necesaria una mayor inversión inicial.
• No admiten todo tipo menaje, ya que solo funcionan con utensilios magnéticos como los de hierro o acero, pero no se pueden usar con ollas y sartenes de aluminio o de barro.

Por comodidad, está claro entre gas, vitrocerámica o inducción, es esta última la que gana y, si se cocina mucho, en poco tiempo estará amortizada la mayor inversión inicial.

Y para vosotros, ¿cuál es vuestro tipo de cocina favorito? Yo desde luego no le haría ascos a una de inducción, pero visto lo visto, me da que seguiré preparándoos mis recetas en una vitrocerámica.

Imagen | Felix Reinmann