Por detrás de las escobas y las fregonas, los estropajos son quizá los objetos más sucios de la casa. Húmedos, llenos de recovecos y en contacto con suciedad y restos de comida son un ambiente idóneo para la proliferación de bacterias y, muchas veces, son los grandes descuidados a la hora de llevar a cabo la limpieza de la cocina.
Tenemos claro que las superficies de trabajo tienen que estar limpias, así como los platos en los que servimos nuestra comida, pero qué pasa si la herramienta que usamos para limpiarlos no está tan limpia como debería. Pues obvio, que la limpieza no será efectiva porque estaremos repartiendo bacterias por toda la cocina. Así que hoy vamos a hablar de cómo limpiar los estropajos, cuántos debemos utilizar y cuándo se deben renovar.
Cómo limpiar los estropajos de la cocina
Uno de los principales errores que cometemos con el estropajo es guardarlo húmedo bajo el fregadero después de haberlo enjuagado. Solo con eso estamos alimentando un nido de bacterias y organismos patógenos que luego iremos pasando a todo lo que toque el estropajo.
Supongo que a nadie se le ocurre, pero también es un error grave usar el mismo estropajo para todo (platos, encimeras, baños), mucho más higiénico tener un estropajo para cada cosa.
Cómo limpiar los estropajos después de cada uso
- Para mantener el estropajo en buenas condiciones es importante retirar los restos de comidas de platos y ollas usando papel de cocina y lo más fácil, si normalmente usamos servilletas de papel, es usar la servilleta usada para retirar los restos del plato intentando eliminar la mayor cantidad posible de restos sólidos, salsas o grasas, pues si lo hacemos con el estropajo estaremos ensuciándolo con restos que son muy difíciles de eliminar después.
- Después de fregar los platos, debemos limpiar también el estropajo. Esto podemos hacerlo con un poco del jabón de lavar los platos -algunos son antibacterias y son perfectos para esto- o sumergiendo el estropajo en un poco de agua con lejía y luego enjuagándolo y escurriéndolo bien aprentando con fuerza.
- Si hemos usado el estropajo para limpiar una tabla en la que hemos estado cortando carne o pescado crudos, o si lo hemos usado para limpiar jugos que haya soltado una pieza de carne, una buena forma de desinfectarlo después de haberlo enjuagado y escurrido es meterlo durante 1 minuto en el microondas, con eso el agua que quede en el estropajo alcanzará una temperatura que destruirá los gérmenes. Si no tenemos microondas, también funcionaría meterla en el lavaplatos si usamos un programa a alta temperatura o, el método de la abuela, hervirlos en agua con unas gotas de lejía.
- Después de lavarlo es importante dejarlo secar bien al aire Una buena idea es tener un par de estropajos para cada uso e ir rotando si cuando necesitamos usarlo no se ha secado desde la vez anterior.
Cuándo hay que cambiar el estropajo
Aparte de tirarlo a la basura cuando empieza a estar tan “despellejado” que casi no limpia, si notamos que no huele bien incluso a pesar de haberlo limpiado con regularidad, también debemos descartarlo, pues los malos olores son signo de que hay bacterias.
Y tú, ¿limpiabas bien los estropajos? ¿O eres de los que los guardan bajo el fregadero? En cualquier caso, ahora ya sabéis cómo limpiar los estropajos correctamente.
Fuente | Consumer