¡Mi placa de inducción no reconoce la sartén nueva que me he comprado y la sartén es de inducción!
Si te ha pasado eso, tranquilo, no te tires de los pelos, que ni te han timado con la sartén ni significa que tu cocina se haya estropeado. El motivo del fallo es mucho más simple de lo que imaginas y bastante habitual.
Obviamente, si tu olla o sartén no es apta para inducción, no funcionará jamás. Comprobar que lo es, es tan sencillo como echar un vistazo a la base, pues la mayoría suelen indicarlo ahí, o acercar un imán. Si el imán se queda pegado a la base, definitivamente, tu sartén, olla o cazuela es válida para cocinar en cocinas de inducción. Pero… aún así puede darse alguna circunstancia en la que no funcione como debería.
¿Por qué mi placa de inducción no funciona con todas las sartenes que dicen ser aptas para inducción?
Además de asegurarnos de que el fondo de la sartén esté fabricado con un material magnético, para que la placa reconozca como válida una sartén, wok, olla o cazuela hay que tener en cuenta un par de cosas importantes.
El tamaño de la sartén respecto al diámetro de la zona de cocción.
Si la sartén, o mejor dicho, el fondo magnético de la sartén, es más pequeño que el diámetro de la zona de cocción, lo más probable es que la placa no llegue ni siquiera a activarse. Esto es algo que sucede con relativa frecuencia cuando intentamos cocinar con sartenes muy pequeñas y, a veces, con sartenes tipo wok que, pese a tener diámetros grandes, la base suele ser muy pequeña.
Sucede que las zonas de cocción de las placas de inducción tienen unos sensores que son los que detectan si tenemos una olla o sartén sobre ellas. En los modelos más sencillos, y también los más habituales, es que estos sensores estén en alguna parte del borde exterior del foco. Esa es la razón por la que alguna vez te habrá pasado que una sartén pequeña que te funciona en un foco no te funciona bien en otro de mayor tamaño.
En el mercado también existen placas con detectores múltiples en cada zona de cocción, placas híbridas con lo que se conocen como zonas flexibles de inducción, que son unos áreas rectangulares sobre las que podremos colocar nuestro menaje en cualquier punto, incluso aquellos de fondo cuadrado o rectangular e incluso placas de inducción sin zonas, también conocidas como placas de inducción total.
El contacto total es fundamental
Otro aspecto importante, a la hora de que nuestra batería de cocina funcione correctamente sobre nuestra placa de inducción, no solo que sea detectada, es que el fondo de las piezas sea lo suficientemente grueso y plano como para que esté completamente en contacto con la placa. Por eso es muy recomendable invertir en menaje de calidad e intentar huir en la medida de lo posible de ollas y sartenes con bases demasiado finas que acaban por abombarse cuando se utilizan a altas temperaturas.
Por si estáis pensando en comprar menaje, os dejo unos cuantos enlaces de ollas y sartenes que a nosotros nos han dado muy buen resultado.
Para terminar, os dejo un vídeo en el que podéis ver cómo mi placa detecta o no una sartén de 18 cm de diámetro según la acerco o la alejo del borde.
Como veis, todo tenía una explicación y ni la placa se había roto ni la sartén era un fake.