Qué comida llevar a una casa cuando vas de invitado

Cuando te vas haciendo adulto los planes de salir de fiesta a bares de copas y discotecas se acaban. Empiezas a planear una comida o cena con amigos para pasar tu tiempo de ocio. Un buen vino, juegos de mesa y mucha comida bastan para tener la mejor noche de la semana. Cualquier excusa es buena para juntaros todos: el nacimiento de un nuevo bebé, un cumpleaños o una quedada para ver las fotos del último viaje que hicisteis.

Eso sí, como los tiempos están como están económicamente hablando, cada vez es más habitual que en ese tipo de cenas, o bien se reparta entre todos el importe de la compra o bien cada uno de los comensales aporte algún plato y así el anfitrión no tendrá tanto ajetreo. Pero si vas de invitado, a la hora de llevar comida a estas reuniones conviene no olvidar estos consejos.

Consejos para llevar comida a una cena con amigos

1. Tira de clásicos

Sandwiches, ensaladas de pasta, quiches, un buen queso o una tarta son comidas que siempre funcionan para llevar a casa de tus amigos. Tal vez un evento social como éste no sea el mejor momento para innovar en la cocina ni para probar la última receta que viste en el programa de Arguiñano o en las reposiciones de Con las manos en la masa. Está bien que seas original pero no te pases de ingenioso. Puedes acabar siendo la comidilla del grupo durante toda la noche.

2. La comida que lleves no tiene por qué ser casera

Parece una obligación que para llevar algo de comida a una cena con amigos tienes que pasar antes unas cuantas horas cocinando. Pero ya sea por falta de tiempo o porque no nos apetezca, no debemos descartar la opción de llevar algo que hayamos comprado. Unas pizzas si la cena es informal o una bandeja de sushi encargada en tu restaurante japonés favorito son también buenas opciones. La comodidad también es importante.

3. No olvides las necesidades personales del grupo

Seguro que entre todos tus amigos hay alguno que es intolerante a la lactosa o al gluten o que se ha vuelto vegano o vegetariano. Cuando lleves comida a las reuniones con amigos estaría bien que te preocuparas porque todos puedan comer. Lo ideal es que separes los alimentos conflictivos de la comida principal para que sea añadido aparte por quién quiera. Un ejemplo: lleva aparte el queso de los sándwiches o no añadas a la ensalada de pasta el atún, el huevo o el pollo si hay vegetarianos o veganos entre tus amigos. Si al final te decides porque toda tu comida sea sin alérgenos y comestible por todos por igual, te llevarás unos buenos halagos por parte  del grupo.

4. Lleva recipientes que no temas perder

Es muy probable que el recipiente de tu comida acabe olvidado en la casa de tus amigos. Lo ideal es que lleves la comida en recipientes desechables o en algún tupper que no te importe demasiado. Cuidado con llevar la bandeja del horno o el molde directamente, esos utensilios son importantes y será un verdadero dolor de cabeza si los pierdes.

5. Asegúrate de que tu comida puede ser congelada luego

En este tipo de ocasiones, la comida que lleves a las reuniones con amigos no suele terminarse. Generalmente todo el mundo aporta una cantidad para que todos puedan probar  y al final de la noche hay mucha comida que sobra. Es un buen detalle que tu comida pueda refrigerarse o congelarse con facilidad. Así, de paso, le solucionas el almuerzo del día siguiente a los amigos que pusieron la casa para la reunión.

6. Y no olvides la presentación

Todo el mundo sabe que la comida entra principalmente por los ojos. En estas reuniones se junta mucha cantidad de comida. Tendrás que perfeccionar la parte visual si quieres que tu plato no se quede en el olvido. No tienes que usar nitrógeno líquido ni efectos especiales con luces: basta con que trates de tener sándwiches coloridos con varias salsas o que uses sprinkles o fideos de colores para decorar tus postres.

Lo importante no es la comida en las reuniones con amigos

Si sigues todos estos consejos a la hora de llevar comida a una cena con amigos seguro que sales airoso y siguen invitándote. Por el contrario, si alguna vez no puedes aportar comida tampoco pasa nada, lo importante es la buena compañía.