Son de marca Hacendado y se venden en una lata de 74 g que cuesta 3,65 €. Son los filetes de anchoas en aceite de oliva que vende Mercadona. Hasta aquí parece no haber nada extraño. Lo que resulta inquietante aparece al darle la vuelta a la lata y leer la letra pequeña. Se indica que es un producto pescado en el Cantábrico y elaborado en Marruecos. ¿Cómo es esto posible?
¿Por qué, si se pescan en España, viajan hasta otro continente para ser envasadas y luego regresan a nuestro país para ser vendidas? En principio no parece muy lógico que un producto local haga tantos kilómetros antes de ser distribuido.
¿Por qué las anchoas de Mercadona se elaboran en Marruecos?
En la sección de preguntas frecuentes de la web de Mercadona, la empresa responde a esta pregunta explicando que sus filetes de anchoa del Cantábrico son de procedencia Mar Cantábrico y aseguran que cuentan con certificados que avalan su origen. En Marruecos se envasan en una planta que es propiedad del proveedor del producto, una empresa de Vinarós (Castellón) que se llama Francisco Gil Comes, S.L.U.
El traslado de materias primas a otros países para su procesamiento y envasado es una práctica habitual que se realiza para abaratar costes monetarios.
En el caso de las anchoas de Mercadona, el producto es español y, siguiendo la normativa de etiquetado, se indica también la información del lugar de envasado aparte del lugar de origen de la materia prima.
No obstante, pese a ser pescadas en el Cantábrico, estas anchoas de Mercadona no pueden venderse con el sello «Anchoas de Cantabria» pues para ello, aparte de ser capturadas en el Cantábrico, tendría que ser en la temporada de costera y todo el proceso, incluido el envasado, tendría que llevarse a cabo sin salir de la comunidad autónoma.