Los tres sabios del vino unidos en torno a una exitosa bodega: Lagar de Proventus

Los tres sabios del vino unidos en torno a una exitosa bodega: Lagar de Proventus

Actualidad gastronómica

Los tres sabios del vino unidos en torno a una exitosa bodega: Lagar de Proventus

Los vinos Tr3mano destacan en Ribera del Duero

10 octubre, 2023 02:00

Esta es la historia de tres personajes, poderosos y reconocidos, que se han unido para hacer unos vinos de extraordinaria calidad y comercializarlos con éxito, por eso a la marca la pusieron Tr3mano. Tres manos empujando en la misma dirección.

Empecemos por el principio. Gumersindo Ruiz Noriega era vecino de Colombres. Este es un pueblecito precioso, casi el último de Asturias lindando con Cantabria. De entre sus edificios destaca uno, un caserón enorme y muy bonito rodeado de un gran jardín cuajado de palmeras. Es una de las casas de indianos más poderosas de todo el norte de España. Es más, es un sitio muy visitado porque también es la sede del Museo de Indianos. A Gumersindo ese ambiente le debió influir y en 1953 abandonó su pueblecito natal para irse a México, concretamente a la capital, el DF, y en cuyo centro unos familiares tenían una tienda que aquí llamaríamos de ultramarinos y allí de abarrotes, vendiendo comestibles y de todo, y que se llamaba y llama La Europea.

Al cabo de los años Don Gumersindo compra la tienda que ya debía ser una tienda muy ilustrada y buena, y con la ayuda de sus hijos montan hasta 69 tiendas repartidas por toda la República de México. Su hijo José Ramón, uno de los tres personajes de esta historia, hacia los ochenta y noventa, se pone al frente de una empresa que constituyen llamada Importaciones Colombres, orientada a importar y distribuir vinos en México, fundamentalmente españoles, y con una especial apuesta por la Ribera del Duero. Sus tiendas, de calidad, distribuyen con éxito los vinos y es un punto de referencia de toda bodega española que quiera vender en aquel país. Es más, incluso organizan anualmente una feria de vinos de Ribera del Duero en México.

Amistades en la viña

Entre los vinos que importa José Ramón Ruiz, están los de la bodega Fernando Remírez de Ganuza, situada en Samaniego, Rioja Alavesa. Su propietario es todo un personaje y de los más importantes del vino en España. Navarro-alavés, tan brillante como simpático, comienza en el vino como corredor de fincas comprando, vendiendo, agrupando. Hace muy buenos negocios y en un momento dado selecciona las mejores fincas que tiene y monta con ellas una bodega a la que pone su nombre. La firma, se convierte enseguida en una de las más prestigiosas de toda España. Pionera y primera línea en la revolución vinícola de la Rioja Alavesa. Uno de sus vinos, el Remírez de Ganuza Gran Reserva 2004, es el primero en conseguir los 100 puntos Parker en España. Una puntuación que te proyecta directamente al mercado de los Estados Unidos. En México ya vende mucho de manos de La Europea, y con su jefe José Ramón, traba una buena amistad.

En 2013 los Ruiz, que vienen habitualmente a España, sueñan con montar una bodega en Ribera del Duero; y al final encuentran una, Qumram, se llamaba, que les puede servir, en Padilla de Duero, muy cerca de Peñafiel. Una bodega estupenda, pero que tenían que trasformar entera, lo que se terminó de culminar el 2020. Se ignora si don Gumersindo, que murió con 101 años hace pocos, sintió que esta bodega y estos terrenos eran como una especie de casa de indianos, como las de su pueblo; pero lo real es que había vuelto a su país con inversiones y un negocio bueno debajo del brazo. A la bodega le pusieron de nombre Lagar de Proventus.

Fernando Remírez de Ganuza, que es un lince, se enteró enseguida y se fue a hablar con su amigo José Ramón. Mira por dónde, que casualidad, Remírez de Ganuza es propietario de unas hectáreas de magníficos viñedos de tempranillo, muy cerca de la bodega. Las había comprado hacía muchos años, pero no lo sabía nadie. Total, que se ponen de acuerdo y se asocian en el proyecto.

Ya van dos, pero falta un tercero. José Ramón está en México, aunque venga continuamente; Fernando Remírez está en su bodega en Samaniego, y va mucho, sobre todo a los viñedos, pero les falta la tercera mano. Alguien que dirigiera la bodega, que dirigiera la enología, que fuera a la vez gerente y director comercial y de exportación. Una persona con capacidad para todo eso, serio y eficiente; y Juan José y Fernando tienen al hombre adecuado. Se llama Pedro Aibar.

Pedro Aibar y Fernando Remírez de Ganuza

Pedro Aibar y Fernando Remírez de Ganuza

Aibar fue el director general y enólogo de la bodega Viñas del Vero, la más poderosa del Somontano y probablemente de todo Aragón. Trabó amistad con José Ramón porque le compraba sus vinos para La Europea. Cuando González Byass se hace con Viñas del Vero, Pedro Aibar, un hombre de mucho prestigio, tiene dudas de a donde dirigirse. Le ofrecen entonces ponerse al frente de Bodegas El Coto, ese gigante que opera en Rioja. Decide que sí, se marcha con la familia y se instala en Logroño. Y ahí van a por él.

El Coto funciona perfectamente y está cómodo, pero Ruiz pasa mucho por Logroño y siempre le convoca para comer o cenar y verse. Ahora ya va con otra idea, además de pasar un rato juntos; y le acompaña habitualmente Fernando Remírez, que también se conoce con Aibar porque los grandes del vino se conocen todos. Le insisten una y otra vez para que sea la tercera mano; pero a Pedro Aibar, que ha dirigido dos empresas enormes con millones de botellas de producción y con grandes equipos a sus órdenes, le cuesta dar el paso de irse a una pequeña bodeguita en Valladolid a montar todo, prácticamente desde cero. Después de tres o cuatro intentonas, el astur-mejicano y el navarro-alavés convencen al aragonés, y ahí está Tr3mano. Era 2016.

Fernando Remírez de Ganuza, Gumersindo Ruiz, Pedro Aibar, José Ramón Ruiz y su hijo.

Fernando Remírez de Ganuza, Gumersindo Ruiz, Pedro Aibar, José Ramón Ruiz y su hijo.

Desde entonces la trayectoria de la casa es ascendente, basada en dos grandes tintos, Proventus y Tr3mano. Acaba de salir la cosecha del 2020, el año en que ya se pudo hacer todo el trabajo en la bodega nueva. Y, además, en esta ocasión han introducido un blanco de albillo mayor realmente espectacular. “Un trabajo muy duro”, explica Aibar. “La albillo mayor se autoriza en 2019 y prácticamente hay muy poco porque se arrancó en beneficio de la tempranillo. Para encontrar las uvas para hacer este vino hemos tenido que ir viñita a viñita de plantaciones muy viejas donde no se había tocado, e ir recogiendo en las cepas sueltas” añade.

Los vinos de Lagar de Proventus

El resultado de tanto trabajo, sin embargo, ha merecido la pena. Fermentado en barrica y con 9 meses de crianza posterior el Tr3mno Albillo Mayor 2020 es una maravilla, es intenso, limpio, directo, con muchos registros en nariz donde abundan frutas y flores blancas, ligeramente cítrico. La boca es poderosa y contundente con grasa, volumen, muy salino y con una equilibrada acidez que lo hace muy fresco. Tiene un precio de 35 euros.

Tr3mno Albillo Mayor 2020

Tr3mno Albillo Mayor 2020

Los tintos, sin embargo, son la base de esta bodega. Proventus 2020, tempranillo cien por cien, con 14 meses de crianza en barrica. Expresivo, directo, con mucha fruta roja madura y a la vez una gran sensación de frescura. En la boca reaparece esa casta Ribera que lo hace potente, sabroso y bien equilibrado. Su PVP es de 22 euros.

Proventus

Proventus

Por último, el Tr3mano 2020, también totalmente de tempranillo y con una crianza de 18 meses se caracteriza por su finura y elegancia, frutas negras y rojas maduras, presencia de notas de crianza, cacao, café, y algo de monte bajo y jara. En boca es muy carnoso, estructurado, pero de paso muy sedoso. Un vino muy largo. P. V. P. 35 euros.

Tr3smano

Tr3smano

Aibar y Remírez de Ganuza se ven mucho. El segundo se suele pasar por Padilla de Duero a menudo y catan en barrica juntos, valorando la evolución de los vinos. Sería interesante escuchar lo que dicen entre ellos estos dos grandes especialistas. También habitualmente viene de México Juan Ramón Ruiz, muchas veces con la familia. Y allí se juntan las tres manos, se supone que a brindar, porque si en la actualidad van bien, el futuro se presenta muy prometedor.