La llamada 'ensaladilla rusa' es uno de los platos más demandados en los bares y restaurantes de España junto a las patatas bravas, la tortilla o las croquetas. Según los registros, su primera aparición en nuestro país data del año 1858, en un menú del libro La cocina moderna, del chef español Mariano Muñoz. Por aquel entonces, su receta estaba formada por una mezcla de legumbres, verduras y carnes frías.
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Como dato curioso, tras la Guerra Civil, en algunos círculos franquistas se trató de modificar su nombre por "ensaladilla nacional" o "ensaladilla imperial", para evitar así asociar esta comida con un origen soviético o comunista. No obstante, el cambio no terminó de cuajar y la gente siguió llamándola de la misma forma.
Este 14 de noviembre se celebra el 'Día Mundial de la Ensaladilla Rusa' y hace unas semanas uno de los chefs españoles más importantes reveló dónde se cocinaba su ensaladilla rusa favorita. Ángel León, del restaurante Aponiente (3 estrellas Michelin), contó en una entrevista al podcast gastronómico La Picaeta cómo debía prepararse esta receta y cuáles eran las ensaladillas más "alucinantes" y las más "infernales" ("de meter a la gente en la cárcel", bromeaba) que había probado.
"Yo soy un psicópata de la ensaladilla", comenzaba diciendo. "La ensaladilla es la radiografía de un garito para mí", advertía. Para el conocido como 'El Chef del Mar', la peor experiencia con este plato la había vivido en un local donde se lo sirvieron con "las verduras calientes".
Por fortuna, también ha dado con lugares donde la forma de preparar la ensaladilla le ha conquistado totalmente. Es el caso del restaurante valenciano Saiti, del cocinero Vicente Patiño. Según León, allí cocinan su ensaladilla rusa favorita. La particularidad de esta receta reside en que Patiño marina las patatas cocidas con el jugo de los pepinillos y el de los alcaparrones, logrando un sabor que vuelve loco al chef jerezano: "Eso es para meterle un chillido al tío. Es una colgaera".
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Saiti, ubicado en el número 4 de la calle de la Reina Na Germana, abrió en 2014 y desde entonces ha logrado hacerse con 2 Soletes Repsol y aparece como recomendado en la Guía Michelin. Su cocina, de base mediterránea-tradicional y centrada en el producto local de temporada, dispone de cuatro menús diferentes que cambian cuatro veces al año en función de la estación, con precios que oscilan desde los 45 a los 90 euros. Además, su bodega cuenta con más de 140 referencias para dar con el maridaje perfecto a cualquiera de sus platos.