El ambiente festivo se lleva viviendo desde hace días en la Ciudad de Valencia, entregada a la celebración de sus populares Fallas. Tras unas jornadas de mascletás y paellas a la fresca, este jueves 14 de marzo es fecha clave, ya que es el día en el que se elige al Ninot Indultat de las fallas infantiles y que da paso a la 'traca final'. 

Entre los muchos visitantes que se han desplazado estos días hasta la Ciudad del Turia - y los que quedan por desplazarse para vivir en primera persona el espectáculo de la Cremá se celebra la noche del 19 de marzo, día de San José- es posible que esté el periodista Carlos Herrera, gran amante del folclore español y las fiestas populares que se reparten por nuestra geografía. 

Amante de fiestas, pero también de la buena mesa. Es todo un cocinillas, como dejó constancia en su aparición en el programa de Canal Cocina "Me voy a comer el mundo" con la receta de patatas guisadas con sepia que se marcó junto a la presentadora, la periodista Verónica Zumalacárregui. Herrera no tiene problema en ponerse el delantal cuando toca, pero tampoco se pierde una cuando toca disfrutar y tiene una red de sitios de referencia a los que acudir dependiendo de la ciudad. 

En el caso de Valencia, en el mapa gastronómico del periodista destaca un templo del producto que lleva siendo referente los 40 años de historia que cumple. Se trata del bar Maipi, "un restaurante en Valencia, caracterizado desde sus inicios, en 1983, por ofrecer un producto de alta calidad", como comparten desde el restaurante.

Lo constatan Gabi Serrano, fundador y propietario junto a su mujer Pilar Costa, que comienzan sus días acudiendo al mercado para seleccionar de primera mano los productos que van a circular y brillar por su barra, una que se abarrota todos los días y que ha recibido a numerosos rostros conocidos, además del de Carlos Herrera. 

Se trata de una de "esas barras 'mágicas' con un encanto especial que aúna en un mismo espacio la esencia de la gastronomía española de mercado, la buena compañía y conversación, con un servicio eficiente, que la ha convertido en una de las más solicitadas de Valencia" apuntan y por ello su carta se compone del clásico picoteo que no puede faltar en estos escenarios.

Un amplio repertorio de elaboraciones que van desde entrantes fríos que incluyen ensaladas y anchoas, clásicos infalibles como la ensaladilla rusa, croquetas o habitas (ahora de temporada) con huevo frito; de sus mariscos, la quisquilla y gambas y tapas a la plancha por la que pasan la sepia, sus huevas o el calamar. Platillos para abrir boca que preparan el camino a otras alternativas más contundentes como son los platos de su apartado con fundamento que incluye manitas de cerdo o albóndigas, o las sugerencias dentro de las carnes a la plancha o los pescados. Para el postre, te recomendamos que dejes sitio suficiente también.