El chef mirandés Alejandro Serrano llevará su estrella Michelin a Copenhague por un mes

Cuando Alejandro Serrano se alzó con su primera estrella Michelin en 2021, pasó a ser el chef más joven (por entonces tenía 24 años) en conseguir tal reconocimiento ese año. Con su cocina no solo reinterpretar la despensa del 'Mar de Castilla', sino aportar una mirada fresca e inocente demostrando que se pueden trazar nuevos caminos para entrar en el sendero de la Guía Roja. 

Esa manera de mirar, de ver, de observar e interpretar, es lo que convierte la cocina de Alejandro en una muy especial y que descubre un mundo de fantasía y diversión, como en el que siente haber vivido el mirandés desde pequeño. Un mundo que a los ojos de Serrano se ve de color de rosa, su favorito, con el que tiñe elaboraciones, vajilla y aspiraciones y acompaña con unas "gafas rosas que ponemos en el pase de los postres, invitando al cliente a ver el mundo de color de rosa, sin prejuicios, con inocencia, como un niño, como lo veía yo de pequeño". 

Sobre este escenario, uno que se parece más al de un tiovivo que el de un teatro, Alejandro Serrano lanza su nueva propuesta efímera. Una que se podrá disfrutar algo lejos de su casa, concretamente en los Jardines del Tívoli de Copenhague, dentro del icónico parque de atracciones abierto en 1843, el segundo más antiguo en Dinamarca. Hasta allí también viajarán sus gafas rosas.

La propuesta se podrá disfrutar en la Pagoda Japonesa del 24 de abril al 26 de mayo, una experiencia en la que anteriormente han participado chefs como Paco Morales (Noor***, Córdoba) o Toni Romero (Suculent, Barcelona). Tras la visita de Serrano, otros aclamados restaurantes internacionales trasladarán también sus cocinas temporalmente hasta el mítico lugar donde anualmente seleccionan prestigiosos establecimientos de la guía Michelin con los que acercar al público danés sabores de todo el mundo. Hiša Franko, Ösch Noir, ASKA, Modu y Koks, son los invitados este 2024. 

Miranda de Ebro en Dinamarca

Para esta propuesta, como no podía ser de otra forma, teniendo lugar en un parque de atracciones, Alejandro y su equipo se han inspirado en sus buenos momentos, fantasías y niñez, "todos ellos conectados con un artista". En línea con su filosofía en la cocina, con la que homenajea sabores tradicionales castellanos con técnicas vanguardistas Se podrá disfrutar a través de dos menús: uno de 8 pases en el servicio de comida y otro de 14 en el de la cena. 

Love in the Japanese Pagoda.

Si el rosa es el color favorito de Serrano, ambos menús no podían comenzar de otra manera que con la sopa de estrellas y el ravioli; en el caso de la sopa se sirve en un plato que se enciende cuando se apagan las luces. "Es un plato muy especial porque traslada a ese momento en la cama de pequeño cuando estaba tumbado viendo como brillaban las estrellas de la habitación, ahora de mayores viendo las estrellas (Michelin) y los sueños que se van cumpliendo". 

En el menú del almuerzo no faltarán creaciones icónicas del restaurante mirandés, además de algunas inéditas para la ocasión como es el caso de la Pink salad, una nueva interpretación de la ensaladilla rusa, abanderada de la cocina castiza que toma en este plato otra apariencia y color. 

Ensaladilla rusa y lubina al pil pil y guisante lágrima.

Dentro del menú de la cena se podrá disfrutar de los platos que integran el menú corto, además de otras elaboraciones diseñadas para el pop up, como el salmonete con marianito. 

Se trata de una propuesta, además, que han apoyado con el trabajo de artistas a los que se sienten y están vinculados, por su creatividad y filososofía, como Ana Rod, autora de las esculturas en las mesas; Luca Hugo Brucculeri, encargado de los visuales; Palomo Spain, quien ha diseñado los uniformes; Misterpiro, aportando el arte de las paredes y la cubertería, Andrei Warren, encargado del diseño de las marcas y Victoria Rivers, curadora del proyecto.