Harry Styles, el cantante, compositor y actor británico que saltó a la fama gracias a su participación en la boy band One Directionha pasado el último fin de semana de agosto en Madrid para disfrutar del festival Kalorama. Allí compartió espacio con artistas de talla internacional como Sam Smith, para sorpresa de los asistentes, que no esperaban encontrarse en ese evento al artista de singles tan exitosos como Watermelon Sugar.

Styles también aprovechó su viaje para conocer uno de los sitios de tortilla más famosos de la capital: La Martinuca, tal y como han informado desde la propia marca. Esta cadena cuenta con cuatro establecimientos en Madrid, pero el cantante visitó el que se encuentra ubicado en la calle Barquillo, en el barrio de Chueca.

Tanto le gustó que incluso repitió una segunda vez para probar otro de los sabores que elaboran en el restaurante. La primera ocasión eligió la tortilla con cebolla, que preparan con cebolla confitada en su propio jugo a baja temperatura durante horas. Posteriormente, le añaden el huevo, que se mezcla con una base de patata frita y cebolla normal.

En su segunda visita, el artista optó por la tortilla con pimiento verde. Esta se cocina con pimiento verde italiano cortado a dados que se pocha durante una hora y se mezcla con huevo y patata, consiguiendo una crema que se lleva hasta el punto de cocinado característico de La Martinuca.

En definitiva, Harry Styles ha quedado cautivado por las destrezas culinarias de La Martinuca, la compañía que, bajo el lema "Come bien, cuídate mucho", quiere acercar una receta de siempre a las nuevas generaciones y hacerla internacional. La visita del británico marca uno de los primeros pasos hacia este ambicioso objetivo.

Lo que comenzó como una ilusión por lanzar un proyecto personal para compartir la receta tradicional de la abuela Martina, se ha convertido en la marca de tortilla con mayor crecimiento en España (según aseguran, cocinan semanalmente 3.000 tortillas caseras). La empresa, que ha sabido fusionar la tradición culinaria con la innovación, ofreciendo una selecta gama de tortillas, desde las clásicas con y sin cebolla, hasta variedades más sofisticadas, trabaja para adaptarse constantemente a los gustos y preferencias de sus clientes.

Desde hace menos de tres meses, la marca ha aterrizado también en Barcelona, en un local de la calle Morales 27, en el barrio de Les Corts (además de a través de las plataformas de delivery). De esta forma, continúa con su plan de expansión y sale por primera vez de Madrid, la ciudad que la vio nacer hace tan sólo tres años.