Este verano, rompiendo con la tradición, muchos valientes se han lanzado a la piscina con sus primeros negocios. Aunque suele ser la llegada del otoño la que marca el arranque para muchos (nuevos) proyectos de restauración. Repasamos algunas de las novedades que nos vienen dando alegrías estos meses más recientes y sumamos las que prometen no dejarnos indiferentes en los que quedan de 2024. 

A las novedades de Ibiza, que como sitio costero que es debe echar 'todo el pescado' en el asador en los meses que se extienden las vacaciones estivales, se suman las que también avanzamos día a día. Un buen surtido de paradas para abrir abriendo boca antes de recorrer el resto del mapa. 

"Abriremos la semana del 16" cuenta el mirandés sobre el nuevo bar que abrirá en su 'pueblo' y que viene a complementar al gastronómico con estrella Michelin ya consolidado. Un concepto casual que cuenta con el diseño de BOV STUDIO con el que llegar a más gente con un ticket medio de 30€ donde se pueda disfrutar del buen ambiente, la música y la cultura durante todo el año. Alejandro Serrano y su equipo quieren aunar al mundo cultural para conducir experiencias, "haremos un trabajo de curating para todos los meses tener un cartel diferente".

Con un menú entre semana a 19,50€ y carta y menú el fin de semana y cocina abierta donde el wok y las brasas van a ser protagonistas, adaptarán platos emblemáticos suyos y apostarán para platos para compartir como la ensaladilla o el fish & chips. 

Malilla es una de las zonas en crecimiento de Valencia, y con el propósito de hacer barrio acaba de abrir sus puertas el primer gastronómico de la zona. Abierto de lunes a domingo desde el desayuno hasta la cena, apuesta por el producto y la calidad con platos como el ajoblanco con tartar de gamba.

Se trata del primer local de la ciudad que utiliza la IA no solamente para gestionar las reservas, sino también para conocer los gustos de sus comensales. Pero en cocina la carta la defiende el chef Julius Bienert que combina sabores tradicionales con técnicas contemporáneas.

Parece que el triunfo de Carlos Casillas en la Gala Michelin 2023 en la que volvió a casa y dos estrellas Michelin (una de ellas verde) sigue dando sus frutos. El joven chef acaba de emprender el proyecto de su vida. Ha traslado su restaurante Barro a un edificio que presume de unas de las mejores vistas a la ciudad amurallada de Ávila con capacidad suficiente para dar rienda suelta a sus sueños. 

De momento se cumplen con Fango, una coctelería que ocupa la planta inferior del complejo y que ha contado con el asesoramiento de Esthy Merino -que pronto contará con alojamiento- y pronto lo harán con Surco, el patio de juegos de Casillas donde la carta cobra un espíritu más accesible y distendido. 

Parece que la fiebre de (buena) pizza se sigue extendiendo y surgen prometedores proyectos más allá de las grandes ciudades. En este caso se trata de Biga, un espacio a escasos metros de la Plaza Mayor que trabaja la pizza napolitana y a la hora de escoger sus ingredientes prima la calidad.

Todas ellas a partir de masa madre con harina Coromina y con un apartado para pizzas sin base de tomate, como la de sobrasada, mozzarella, tomates confitados y miel. Entre sus proveedores cuentan con ibéricos de la marca salmantina de doble montanera Arturo Sánchez o queso curado de Zamora.

Casa Solla está a punto de celebrar su 63º cumpleaños y con ello, este restaurante familiar que desde más de 20 dirige Pepe Solla, acaba de pasar por un lavado de cara. Un mayor mimo al local -donde la iluminación y el cambio por el que han pasado las mesas juegan un papel especial- respetando su esencia para celebrar su larga trayectoria.

Este cambio coincide también con una nueva puesta a punto de su menú degustación para el que su relación con los proveedores de huerta y mal es más estrecha que nunca. 

Se espera que este proyecto con la familia Zalduegui detrás abra sus puertas en los próximos días. En este local a las puertas del barrio Salamanca se quiere homenajear al bar de toda la vida. Llenar su barra y taburetes de esa clientela de toda la vida que buscan una carta sin pretensiones. Un proyecto, con acento vasco y el sello Ansón+Bonet. 

Dabiz Muñoz acaba de aterrizar en el aeropuerto de Madrid. Lo hacía, en colaboración con Avolta, este viernes pasado con la apertura de un nuevo local que amplia la oferta gastronómica de la T4S del Aeropuerto Adolfo Suárez de Madrid y espera hacerlo en otras próximamente.

Sigue la estela de GoXO con platos accesibles a un público más amplio, en formato 'fast food' y que recorren el univerXO creativo de Muñoz, ese que se inspira en sus viajes, los mismo que alimentan la despensa del chef de DiverXO: laksa, ramen, mollete de tortilla, bikini o, claro que sí, la tarta de queso de la Pedroche, son algunas de las opciones que circulan en la carta. 

Una parada en el camino antes de desvelar nuevos planes que quedan pendientes por confirmar como son el futuro de GoXO en Barcelona y la nueva ubicación para su restaurante tres estrellas. 

Los chicos de la taberna asiática más canalla de Madrid por fin han hecho oficial la ubicación de su nuevo local. Aunque fue inaugurado a principios de verano su dirección se ha mantenido en secreto hasta hace pocos días -comenzaron compartiéndola por mensaje privado con los más allegados-; querían una apertura discreta aunque desapercibidos no han pasado, la legión de seguidores que tienen ya han llenado sus mesas para descubrir sus nuevos platos. 

En su nuevo espacio, que recuerda a un local típico de Bia Hoi en Vietnam, su carta chiquita pero matona, tal y como nos tienen acostumbrados: su Yum Kai Dao de huevos fritos con salsa de tamarindos ya tiene adeptos, al igual que su nécora Pad Horada salteada con albahaca thai y una deliciosa raya Ikan Bakar, un plato procedente de Malasia, que preparan con sambal.

Una de las novedades en Valencia llega de la mano del Grupo Portolito. Ubicado frente a la playa de las Arenas, se centra en la cocina mediterránea y de mercado con las brasas y el producto como protagonista. Con una amplia carta que defiende el chef Fabio Legori donde brillan los pescados de la lonja y los arroces -a partir de los granos que les ofrecen Molino Roca- se alternan por semana. Con el Mediterráneo de frente y un ambiente relajado, apuesta por la 'slow life' con platos creativos como el mi-cuit de tuétano a la brasa y helado de higos.

Después de haber pasado por reputadas cocinas como la de Azurmedi el cocinero gallego Alberto Lareo vuelve a sus orígenes -en Santiago de Compostela también se formó en Casa Marcelo- para emprender proyecto propio con una propuesta que centra en platos para compartir. 

Marcos Granda ha mudado su Skina a una nueva ubicación. Su "sueño materializado" en un espacio con nuevas y mayores aspiraciones para su dos estrellas Michelin. Con él, ha inaugurado Millésimé, ubicado en una casa andaluza donde encontrar una carta mediterránea con bocados elegantes y otros más informales a cargo del chef Mario Cachinero y más de 900 referencias de champagne, unos cuantos por copa. 

Jinwon Yoon, el coreano que se dio a conocer con Quini, su restaurante de cocina casera ubicado cerca de Atocha en Madrid, se ha mudado hasta el Mercado de Mostenses para emprender una nueva aventura sin abandonar su esencia. Esta vez está causando sensación homenajeando al buljok, un plato tradicional basado en el codillo salteado con salsa picante que lleva más de dos horas de elaboración en el fuego. 

Al igual que en su anterior proyecto, se ha instalado en un local sencillo y con pocas mesas pero deliciosamente acogedor. Su carta también es reducida pero cuidada, centrándose en mimar otras recetas típicas ssamjang, jangjji, ohyang jokbal o el bossam (la panceta) que se pueden compartir entre varias personas, al igual que su aclamado codillo. 

Nacida en Francia y criada en Madrid, la joven cocinera Alice Reydet, emprende en la capital después de haber forjado trayectoria en casas catalanas y parisinas como el Celler de Can Roca y Séptime. Lo hace asociada con Bosco Suárez de Puga y Arnaud Bernard, en un bistronómico en Chamberí. Ubicado en un espacio que es clave para el proyecto, se esfuerza en cuidar la temporalidad y estrechar lazos con los productos y sus productores. 

Otras paradas a tener en cuenta

Más allá de nuestras fronteras, pero con acento español, está la apertura de Lolo, lo nuevo del chef extremeño José Pizarro, que triunfa en Londres apostando por el recetario español tradicional. 

Entre otras cosas, por la capital se habla también de lo nuevo de los hermanos Figurato y su Pizzeria Friggitoria, del nuevo local de Biang Biang en el Mercado de Vallehermoso y de La Lonchería, un coqueto local en las faldas de La Latina que sirve ricos bocadillos y te resuelve un desayuno y cualquier comida. 

Gastón Acurio vuelve a Madrid con La Mar. Después de aparecer por España en 2007 con su alta cocina peruana, en Astrid & Gastón en el madrileño del Paseo de la Castellana, y en los últimos años haber estado presente solo en Barcelona bajo el sello Yakumanka, Acurio abrirá una cevichería enfrente del Santiago Bernabéu.

En Girona, los Roca abrían a principios de agosto Vii, un bar con el vino como eje con Audrey Doré al frente y David Freijomil en cocina. En Bilbao ha abierto Luma, lo nuevo Sergio González y Carla Ornedo, que aunque mantiene el pulpo que les dio la fama, quieren recrearse con una cocina más creativa sin perder de vista sus raíces. 

En Valencia, Manaw - Nikker Bar acaba de estrenar local. Q'Tomas y Barrafina abre local en octubre y esta vez lo harán con un concepto japonés-mediterráneo. Germán Carrizo y Carito Lourenço, al frente de Fierro, han tenido la genial idea de quedarse con Maipi y prolongar la vida de un local emblemático donde las tapas y los guisos seguirán siendo el corazón de la carta.

En Albacete, Suculento viene haciendo ruido en los últimos días. Acaba de abrir sus puertas para ofrecer platos creativos que revisan el recetario tradicional. Al frente está Diego Reyes, argentino con más de 20 años en España que pasó por Disfrutar y Ramses, y se ha ido hasta la Mancha para abrir su barra gastronómica. 

Si nos dirigimos al sur, en las conversaciones está presente Leartá, que abrió sus puertas en marzo y Ricardo Sanz que volvió al sur a finales de mayo con Kai, un nuevo espacio donde ofrece una fusión japo-mediterránea dentro del nuevo centro de ocio La Laguna de Estepona. Benito Gómez, el reputado cocinero al frente de Bardal, el dos estrellas Michelin con el que cuenta Ronda, se ha llevado Tragatá hasta el centro de Málaga. En la misma provincia, pero distinta ciudad, Benalmádena, Juanjo Carmona ha abierto su nuevo restaurante Aviva.