El Forn Velarte, con más de 130 años de historia, ha sido reconocido como el mejor productor de pan tradicional de Valencia, consolidando su lugar de referencia entre la panadería artesanal valenciana. Un logro que subraya la calidad del producto, además de su compromiso con la preservación de las técnicas tradicionales y la innovación constante.

El evento, organizado por el Gremio de Panaderos y Pasteleros de Valencia en su 53.ª edición, se celebra anualmente en el marco de las Fiestas Patronales en honor a la Virgen de la Merced. Este concurso, ya un clásico en el calendario festivo, no solo es un tributo a los mejores hornos de la comunidad, sino también una plataforma para destacar la creatividad y reivindicar el respeto por las técnicas artesanales que siguen moldeando la oferta panadera de la región.

Tradición e innovación: la fórmula ganadora del Forn Velarte

El Forn Velarte, que quedó segundo en la categoría de ornamentación y escaparate en la edición pasada, ha logrado el primer premio en la categoría de Panes Tradicionales, imponiéndose frente a competidores de renombre como el Horno Inma Moliner y la Pastelería Martínez, que obtuvieron el segundo y tercer puesto respectivamente.

El escaparate de Forn Velarte repleto de panes para el concurso de la edición pasada.

Con más de 130 años de historia a sus espaldas, Forn Velarte, fundado en 1878 y ubicado en la pedanía de Castellar-Oliveral, es un negocio familiar formado por dos establecimientos que ha pasado de generación en generación consolidando una reputación basada en la calidad y en la elaboración de panes con masa madre y largas fermentaciones.

Su receta ganadora este año sigue fiel a los procesos tradicionales, conservando ese sabor auténtico que ha sido referente de los valencianos durante más de un siglo.

El obrador se ha especializado en productos que son reflejo de la rica cultura gastronómica de la región, como las famosas cocas de calabaza, los clásicos 'panquemaos', y otros panes únicos como el de calabaza asada. Su pan del abuelo, uno de los más demandados por su sabor profundo y rústico, es un claro ejemplo de su dedicación a mantener viva la tradición.

Panes de Forn Velarte, primer premio en la categoría de Panes Tradicionales de la 53 edición del Concurso que organiza el Gremio de Panaderos y Pasteleros de Valencia

El presidente del gremio, Juanjo Rausell, lo destacó en sus declaraciones, subrayando que el concurso "es una muestra de la diversidad y riqueza del sector", y celebrando cómo establecimientos como el Forn Velarte no solo mantienen viva la tradición, sino que también impulsan la innovación en la panadería artesanal.

Un concurso para celebrar el arte del pan

La edición de este año del Concurso de Panes Tradicionales tuvo lugar en el Centro de Artesanía de la Comunitat Valenciana, un escenario que refleja el valor que la región otorga a los productos elaborados con dedicación y esmero. Con la participación de una veintena de maestros panaderos, el certamen sirvió para poner de manifiesto no solo la excelencia en el arte del pan, sino también la importancia de preservar las tradiciones que han formado parte del paisaje gastronómico valenciano durante siglos.

Además de la categoría de panes tradicionales, el certamen también reconoció a los mejores en la modalidad de Panes de Formato Libre, donde el horno Más que Pan se alzó con el primer premio, seguido por La Tahona del Abuelo y Vicente García. Estos premios, aunque centrados en formatos y técnicas más innovadoras, complementan el enfoque de la categoría tradicional, demostrando que la creatividad y la evolución son esenciales para mantener viva esta antigua práctica.

Un aspecto notable del concurso es su dimensión solidaria. Tras la competición, todas las piezas presentadas fueron donadas a la Casa de la Caridad de Valencia, mostrando cómo el gremio de panaderos no solo está comprometido con la excelencia en su oficio, sino también con contribuir a la comunidad en momentos de necesidad.

El reconocimiento al Forn Velarte en 2024 no es solo una celebración de su maestría, sino también un símbolo de lo que la panadería valenciana puede lograr cuando se combina tradición e innovación. En un sector que enfrenta desafíos constantes debido a la industrialización y las nuevas demandas del consumidor, es fundamental que obradores como éste continúen liderando el camino, sirviendo de ejemplo para futuras generaciones de panaderos.