Publicada
Actualizada

Por primera vez, España ha celebrado un certamen nacional para premiar al mejor bocadillo de cordero, y el ganador ha sido el restaurante Olla de Huesca, gracias a una propuesta basada en Ternasco de Aragón. Este singular bocadillo, conocido popularmente como “El Paquito”, ha conquistado paladares y corazones en todo el país, destacándose como un símbolo de innovación gastronómica y tradición local.

Un bocadillo con nombre propio

El Paquito comenzó su andadura en 2019 en Madrid como parte de una campaña para modernizar el consumo de carne de cordero y cabrito. Desde entonces, su popularidad ha crecido exponencialmente, expandiéndose a más de 800 establecimientos en toda España y adaptándose a los gustos más diversos. Este bocadillo, siempre servido entre panes y con infinitas variantes, ha roto barreras al atraer al público joven y convertirse en un formato accesible y versátil.

La reciente celebración del certamen El Mejor Paquito de España marca un hito en su historia. Organizado en Zaragoza, este concurso reunió a 11 finalistas de diferentes provincias, cada uno con una interpretación única del bocadillo. Desde un mollete andaluz con chivo lechal hasta una versión con beicon de cordero ahumado en León, las propuestas destacaron por su creatividad y respeto a la materia prima.

Cocineros concursantes Mejor Paquito de España

El campeón: Olla de Huesca y su Ternasco de Aragón

El jurado, formado por destacados chefs y periodistas gastronómicos, otorgó el máximo galardón al Paquito elaborado por Roberto Villarroya, del restaurante Olla de Huesca. Su creación, que desde este martes figura en la carta del restaurante por un precio de 15€, está inspirada en la tradición aragonesa.

Lo elaboran con Ternasco de Aragón asado y desmigado, acompañado de patata panadera asada, una mayonesa a base del jugo de la carne, cebolla morada y un pan de chapata artesanal aromatizado con tomillo y romero.

“Este reconocimiento nos llena de alegría y nos impulsa a seguir innovando”, afirmó Villarroya, quien destacó que su bocadillo rinde homenaje a las raíces culinarias de Aragón, evocando sabores familiares y memorias compartidas.

Dos finalistas de lujo

El segundo puesto fue para el restaurante Pablo, de León, que presentó un Paquito con beicon de cordero ahumado y una salsa llamada “keptchazo”, elaborada con huesos asados y tomate. Por su parte, Yerbagüena, en Málaga, sorprendió con un Paquito de chivo lechal al ajillo servido en un mollete de cristal, con pimientos a la brasa y una salsa al ají.

Mejor Paquito nacional, los bocadillos finalistas.

Una tradición con futuro

El éxito del Paquito no solo radica en su sabor, sino también en su capacidad para adaptarse a las nuevas tendencias gastronómicas. Tomás Rodríguez, director de INTEROVIC, destacó que este bocadillo es una muestra de cómo la carne de cordero puede modernizarse y convertirse en una opción sostenible, asequible y deliciosa.

Además, la incorporación de ilustraciones de Ana Jarén en los establecimientos participantes subraya la apuesta por una experiencia estética que conecta con el público contemporáneo.

Un símbolo de identidad española

Con esta iniciativa, el Paquito se consolida como una verdadera institución culinaria en España, capaz de unir tradición e innovación en cada bocado. Gracias a la creatividad de chefs como Roberto Villarroya y al impulso de proyectos como este certamen, queda claro que el bocadillo de cordero seguirá teniendo un futuro brillante en la gastronomía nacional.