Lluc Crusellas (1996, Santa Eulàlia de Riuprimer, Barcelona) fue el primer español en lograr el título de mejor chocolatero del mundo, según la edición de 2022 del concurso World Chocolate Masters (WCM), que tuvo lugar en París. Y no sólo eso: también ha sido el más joven en obtenerlo de toda la historia de este certamen, con sólo 26 años.
El catalán ha ofrecido recientemente una entrevista al periodista Víctor Escribano de EFE, en la que ha asegurado que el chocolate "no merece para nada" su fama de producto poco sano. "Una tableta de 70% de cacao lleva menos azúcar que una Coca-Cola", ha afirmado a la agencia desde Shanghái, a donde ha acudido para participar como jurado en la preselección china de la próxima final del World Chocolate Masters.
"Esta etiqueta perjudica mucho al chocolate, y no sé por qué se le ha puesto cuando hay muchos más productos o ingredientes en el mercado (...) que tienen mucho más azúcar que comernos un trocito de chocolate", ha añadio. Para remediarlo, agrega, es vital "explicar bien" las propiedades nutricionales y energéticas del chocolate y "no engañar a la gente": "Al final, es un fruto seco. En una tableta es un fruto seco con azúcar, y esto (con moderación, como todo) beneficia al cuerpo".
Crusellas, de 28 años, apuesta por "escuchar cada vez más a los artesanos y a los profesionales del sector" a la hora de comprar chocolate: "Si quiero comprar un coche, iré al concesionario, y si quiero comprar chocolate tengo que ir a una tienda de chocolates, no puedo ir al supermercado".
El de Santa Eulàlia de Riuprimer (Barcelona) cree que a la pastelería le hace falta "educar mucho más a la gente", y pone como ejemplo el "buen trabajo" de la cocina a nivel mundial con iniciativas como la Guía Michelin, que permiten identificar buenos restaurantes y distinguirlos de los malos. "Poco a poco estamos en ello. ¿Cómo? Pues haciendo productos lo mejor que podamos y comunicando lo mejor posible", apunta.
Crusellas trata de centrarse en lo positivo: si bien reconoce la "mala noticia" que es el encarecimiento del chocolate (algo que atribuye, en parte, a la "especulación"), también cree que una "subida controlada" de los precios hará que el producto sea "más exclusivo" y que la gente "lo disfrute mucho más".
Y es que el pastelero asegura que "se hacen muchas aberraciones, quizá demasiadas" con el chocolate, tanto por comercializar sucedáneos con grasas diferentes al cacao para abaratar costes como por la "bajísima calidad" del empleado en snacks, especialmente los envasados que se venden en grandes superficies: "Es mejor comer otra cosa que hacerla mal. El chocolate merece tener valor".
En su opinión, más allá de modas en redes como la 'tableta Dubái' (rellena de una pasta de pistacho crujiente), la bombonería "está volviendo a coger mucha fuerza", incluso pese a que las tabletas están "más interiorizadas" en el día a día de los consumidores. Además, siempre están los clásicos: si tuviera que quedarse con una sola receta, Crusellas elegiría el coulant, aunque matiza, entre risas: "Cuando está bien hecha, es increíble, con mucho sabor a chocolate. Pero muchas veces tú pides un coulant y te llevan una magdalena cruda o mal cocida".
El próximo mejor chocolatero del mundo, en 2026
Crusellas ha reconocido que le ha gustado mucho la experiencia de formar parte del jurado de la preselección de la final del World Chocolate Masters, la cual tendrá lugar en 2026 y de la que saldrá su sucesor como mejor chocolatero del mundo. "He probado muchos cítricos que no había probado nunca, distintos a lo que estamos acostumbrados, que ya no salimos del limón, la naranja y la lima, y un poco el yuzu. Aquí hay muchos más como el kumquat, muy extraños para mí pero muy interesantes", ha declarado.
El barcelonés cree que a los chocolateros chinos "no les falta mucho" para estar al nivel de los occidentales, y destaca sobre todo su destreza artística. Aunque es la primera vez que visita el país, tiene mucha experiencia con el cacao asiático: "Es uno de mis favoritos. Es muy especial, me gusta muchísimo", indica. A diferencia de en África o Sudamérica, la humedad obliga a utilizar fuego para secarlo y eso le confiere "un ahumado agradable, a madera y caramelo".
Ahora también ha probado el de China, un país sin tradición chocolatera, pero que tiene algunas plantaciones en el sur del país: "Es muy diferente. Tiene un sabor afrutado muy fuerte, quizá demasiado o no estamos acostumbrados a tanto, con unas notas como a melón", explica. El próximo lunes 25 de noviembre podremos ver Crusellas en el programa de MasterChef Celebrity, donde los concursantes tendrán que adentrarse en el mundo dulce.