Es posible que nunca lo hayas escuchado o que cuando te lo hayan comentado por primera vez, pero todos los italianos se toman un vaso de agua antes de beberse un café, y lo hacen por un curioso motivo. En realidad, se trata de una buena costumbre que quizás debería expandirse por el resto de países, sobre todo cuando se le da cada vez más importancia a una bebida que sigue ganando popularidad.
El café es una de las bebidas más consumidas del mundo, por lo que es habitual que no falte en ningún hogar, tanto a la hora del desayuno como en otros muchos momentos del día, como tras la comida o a la hora de la merienda. De hecho, es un gran aliado para poder llevar a cabo numerosas actividades en el día a día, contando con el extra de energía que en muchas ocasiones puede llegar a ser necesario.
No todas las partes del mundo, no obstante, comparten la misma pasión por esta bebida, si bien en España nos caracterizamos por ser grandes cafeteros. Es común que sea la bebida que nos acompañe en el día a día, tanto por su aporte energético (y otros muchos beneficios) como por el puro placer que aporta el sabor y aroma del café.
Un buen café tostado y molido, ya sea consumido al momento o no, e infusionado con agua es uno de los grandes placeres a disfrutar, debiendo tener en cuenta que el café también se toma sin azúcar. Aunque para muchos pueda resultar complicado tomarlo de esta manera, es la manera más pura y preferible para poder apreciar el café en su totalidad.
Cómo toman el café los italianos
En Italia el café se sirve de maneras muy diferentes, pero hay una particularidad que hace que su consumo sea especial en el país transalpino, que es el hecho de beber un vaso de agua antes de tomar el café. En un principio se podría pensar que lo lógico sería tomarlo después para quitar el sabor del café e incluso para aclarar la boca y los dientes, o simplemente para eliminar el sabor amargo de esta bebida, pero sirve precisamente todo lo contrario.
Los italianos son grandes expertos en el mundo del café, y es por ello por lo que toman un vaso de agua antes para enjuagarse la boca y poder sentir más el sabor característico de esta bebida.
De esta manera será posible apreciar la calidad de ese café, sin nada que pueda enmascarar u ocultar el sabor de esa bebida que se va a preparar. Los italianos tratan a este café como un auténtico tesoro, siendo posible disfrutar de él tanto a primera hora del día como en cualquier otro momento.
En el caso del café italiano, que tiene un tueste ligeramente inferior, lo que se busca es que se note el sabor amargo, y con la ayuda de la ingesta de un vaso de agua antes de tomarlo, permitirá poder disfrutar en boca del exquisito sabor de una bebida que ya es parte de nuestro día a día.
Consejos y recomendaciones
Hace un par de décadas atrás el café y el té eran consideradas infusiones para consumir durante la hora del desayuno o a la hora de la merienda, con un consumo de café que no era tan elevado como lo es en la actualidad.
Comenzar el día con una rica taza de café es muy beneficioso a distintos niveles, ya que contiene distintos beneficios para el organismo que conviene tener en cuenta, como su contribución para preparar el cuerpo ante un esfuerzo físico importante, haciendo que se perciba el cansancio más tarde, mejorando el rendimiento.
Su ingesta también ayuda a mantenerse alerta y despierto durante más tiempo, además de aportar distintos compuestos antioxidantes que actúan contra los radicales libres y algunos metales pesados que provocan el envejecimiento de los tejidos, ayudando de esta manera a prevenir la aparición de diferentes enfermedades. Además, también ayuda a que se mantenga la piel elástica, tersa y joven.
Por otro lado, el café es un antidepresivo natural, ya que se encarga de regular el estrés al bloquear los receptores de la dopamina, un neurotransmisor que está relacionado con la ansiedad y el estrés. También hay que destacar que el consumo regular de café reduce el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular o cardiovascular, si bien hay que tener en cuenta que quienes padecen de hipertensión y colesterol alto es recomendable controlar su consumo.
Además, con respecto al consumo del café, hay varias recomendaciones a tener en cuenta par a poder disfrutar de él de manera segura, comenzando por no consumir más de 400 mg de cafeína al día, lo que equivale a tres tazas, y continuando con por la preferencia de optar por consumir café de grano. Por otro lado, conviene evitar el café azucarado, ya que en ese caso se podría estar consumiendo una mayor cantidad de azúcar de la deseable para el organismo. Para combatir su sabor amargo natural, se puede combinar tomándolo con canela o vainilla.
Por otro lado, no se debería utilizar el café como un reemplazo de alimentos o para mantenerse despierto, puesto que el organismo necesita de nutrientes que no se encuentran en el café, así como de un descanso reparador.