No nos cansamos de repetir que el gusto por el picante es algo muy particular de cada uno, por eso, en las recetas que llevan picante hay que andarse con mucho ojo, que a veces uno se deja llevar por las cantidades que indica la receta y luego a la hora de probarlo resulta que esa cucharadita de cayena molida que para nosotros es un toquecillo picante, para otros puede ser un auténtico sufrimiento. Por esta razón, vamos a recopilar una serie de truquitos que sirven para corregir un guiso demasiado picante y que es bueno tenerlos en mente si en algún momento se nos va la mano o, que a veces también pasa, si un pimiento que creíamos dulce nos da la sorpresa y nos deja la receta subidita de picante.
Trucos para corregir un guiso demasiado picante
Existen varias alternativas tanto para corregir un guiso demasiado picante, y algunas que también sirven para corregir el exceso de picante en otras preparaciones como aliños o vinagretas.
Añadir vegetales ricos en azúcares
Los vegetales y hortalizas ricos en azúcares y almidones, como las patatas, las zanahorias o los boniatos absorben parte del picante y su sabor dulzón también ayuda a compensar el picante excesivo, por lo que podemos añadir al guiso una patata o un par de zanahorias cortadas en trozos pequeños.
Añadir frutos secos
La grasa de los frutos secos ayuda a compensar el sabor picante, por lo que se puede añadir crema de cacahuete, almendra triturada o incluso tahini (la pasta de sésamo tostado que se usa para hacer hummus y que os enseñamos a preparar en este enlace).
Añadir azúcar o líquidos dulces
El picante también se puede rebajar añadiendo azúcar granulado, miel, sirope de arce o de ágave o incluso un poco de kétchup. Este truco también funciona para aliños, vinagretas, etc
Añadir más caldo
Si se trata de un guiso en el que hemos usado como base algún caldo de carne, pollo, pescado o verduras y tenemos más caldo base, podemos añadir más caldo o incluso sustituir parte del líquido que pica demasiado por caldo sin picante y así conseguiremos un guiso con el picante más diluido.
Añadir lácteos
Los lácteos equilibran el picante, por lo que dependiendo del tipo de plato podemos añadir leche, yogur griego, nata o incluso un poco de mantequilla para contrarrestar el picante. También funcionaría bien la leche de coco.
Añadir ingredientes ácidos
Dependiendo del tipo de guiso, se puede añadir tomate cortado en dados o un chorro de vinagre. Si se trata de aliños para ensaladas, funciona bien añadir zumo de cítricos, como lima o limón.
Y hasta aquí nuestros trucos para corregir un guiso demasiado picante, ¿conocéis alguno más?
Fuente | She knows