Cómo mantener limpia tu sartén de hierro
Aprende a mantener limpia tu sartén de hierro con este truco fácil y rápido utilizando solo la sal gorda para cocinar que tenemos en la cocina
11 octubre, 2016 17:20Si eres de los que prefiere una buena sartén de hierro tradicional a las novedosas de Teflón habrás observado que éstas se ensucian con facilidad. Con este sencillo truco las tendrás siempre limpias como el primer día para seguir cocinando platos de calidad con las recetas de Cocinillas.
Las viejas sartenes de hierro vuelven a estar de moda. Recuerdan a la cocina tradicional y no contienen productos extraños que perjudiquen a nuestra salud, como las sartenes de Teflón que pueden emitir partículas contaminantes a la comida. Además, una sartén de hierro es barata y fácil de cuidar, y como ese metal es un gran conductor, permite que el calor se reparta uniformemente por toda la sartén de forma que facilita mucho nuestra labor en la cocina.
La suciedad: El enemigo de nuestra sartén de hierro
El gran problema de estas sartenes es que acumulan mucha suciedad en la superficie. Es típico observar restos negros que se quedan adheridos a la sartén y que en ocasiones son difíciles de quitar sólo con un estropajo y jabón. A veces optamos por raspar, pero esto no es lo más adecuado para conservar nuestra sartén de hierro durante mucho tiempo ni tampoco es la opción más sencilla.
El mejor truco es usar sal gorda. Sí, la sal con la que cocinamos sirve también para limpiar nuestras sartenes de forma fácil y efectiva. Basta con echar un puñado de sal en la sartén de hierro, calentarla y restregar con un estropajo. Con esto eliminamos los restos que permanecen adheridos a la superficie del hierro y acabamos con los olores acumulados por su uso.
Si se te resiste la suciedad, a los fogones
Incluso si algunos restos de suciedad se te resisten porque, por ejemplo, hayas quemado alguna comida, puedes hacer algo más. El truco de la sal gorda tiene una segunda fase. Cuando eches el puñado de sal coloca la sartén en los fogones y deja que la sal se tueste ligeramente. Cuando ya esté algo morena, retira la sartén de hierro del fuego y con mucho cuidado de no quemarte restriegas con el estropajo. Así quedará perfecta. Si este truco te funciona o conoces otro, no dudes en escribirnos un comentario.