Recuerdo los tiempos en los que antes que las pizzas o la comida china, la único que se podía comprar ya cocinado eran pollos asados. Eran muchas las pollerías que contaban con un “asapollos”, un horno vertical en el que podían asarse a la vez más de 20 pollos que giraban ensartados en una fila de espetos mientras se iban asando lentamente.
Y aquellos pollos tenían algo especial, una piel uniformemente crujiente, una carne tierna supongo que a día de hoy un tanto mitificado por haberse convertido en un recuerdo de infancia.
Asar un pollo al horno perfecto en casa
El caso es que hoy en día, con los hornos eléctricos multifunción que pueden calentar simultáneamente techo y solera proporcionando calor envolvente y con termostatos que permiten controlar las temperaturas en todo momento, asar un pollo al horno perfecto en casa es algo relativamente sencillo y puede conseguirse de varias formas.
Quizá lo más difícil hoy en día sea conseguir un buen pollo, pues los pollos de granja apenas tienen sabor y los pollos de corral que venden en supermercados, aunque son ligeramente mejores, tampoco son como los pollos que cría tu abuela. Aunque con algún truquito, podemos conseguir que hasta el pollo más barato del súper pueda desfilar por la mesa y aprobar con nota.
Para que se entiendan mejor estos truquitos, os los voy a ir contando poniendo como ejemplos recetas en las que los hemos empleado, para que veáis qué pintaza más buena puede tener un pollo asado en casa.
Asar un pollo al horno perfecto sobre lata de cerveza
Aunque muchos hornos modernos vienen equipados con un girapollos, el funcionamiento de estos suele dejar bastante que desear. Es bastante probable que sea prácticamente imposible colocar el pollo de manera que no acabe con el pollo colgando sobre el espeto y este girando solo sin conseguir arrastrar al pollo.
En cambio podemos conseguir un pollo asado con la piel dorada y crujiente por todas partes y un interior jugoso si lo cocinamos sobre una lata de cerveza abierta, en la que parte del líquido lo habremos usado mezclado con las especias para adobar el pollo y el resto lo dejaremos en la lata durante la cocción para que al evaporarse mantenga la carne del pollo jugosa.
Pollo asado perfecto con una salmuera
La técnica de la salmuera te la contamos en su momento cuando te explicamos cómo asar un pollo usando la función horno de la Olla GM F, aunque también se consiguen resultados estupendos en horno convencional.
Consiste en dejar el pollo sumergido en una salmuera durante horas – que será lo que le de el sabor-, y cuando llegue el momento de asarlo, sacarlo, secarlo bien y untarlo bien con mantequilla y asarlo muy lentamente -a 140ºC- hasta que veamos que está cocinado. Cuando la carne esté cocinada y tierna, entonces subimos la tempeartura hasta un mínimo de 200ºC y lo dejamos durante unos 10 minutos hasta que se dore la mayor superficie de piel posible.
Pollo asado superfácil
Mi receta favorita y creo que la más fácil de todas, porque con esta el pollo se asa en trozos y se consigue que toda la piel quede crujiente. La receta es idónea para singles o parejas, pues no es necesario complicarse la vida y el resultado es un pollo que queda muy jugoso gracias a la cama de verduras sobre la que se cocina.
Los condimentos y un poco de vino blanco o brandy a mitad de cocción potencian los sabores del conjunto, haciendo de esta receta un plato que lo mismo te puedes preparar un día de diario que tengas algo de tiempo como cocinarlo para el menú de una comida formal en la que tengas invitados.
Bonus: Pollo asado sin grasa
Aunque el tema que estábamos tratando era de asar un pollo al horno perfecto, no me puedo despedir sin comentaros esta receta que siempre sale fabulosa. No es un pollo asado al uso, porque para empezar se le quita la piel antes de cocinarlo para que la receta sea muy ligera, y porque está hecho en una olla en vez de en el horno.
Pero os animo a que la tengáis en cuenta porque solo necesitáis dos ingredientes y uno de ellos es el pollo salpimentado al gusto.
Y que sepáis que quiero ver fotos de vuestros pollos asados.