Esta es una pequeña variación de la receta original de pollo al estilo Maryland, y la diferencia consiste en que no hay pan rallado de por medio (para aligerar un poco la receta, pero el procedimiento es igual) y no son contramuslos o alitas sino pechugas de pollo.

Una vez más, haremos uso del horno evitando el aceite pero conservando lo sabroso del pollo y además una manera fácil y nueva de hacer el pollo, que siempre se agradece. Proteinas bajas en grasas, amigo de deportistas y gente que hace dieta. Vamos a ello:

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Preparación

En un plato hondo batimos un huevo y le añadimos bien de pimienta negra (es la mejor amiga del pollo) y un poco de ajo en polvo. Por otro lado, sazonamos las 5 pechugas y las pasamos por la harina, que queden bien cubiertas.

Luego, pasamos las pechugas enharinadas por el huevo y las ponemos en una bandeja de metal o barro (si queremos añadir el pan rallado y empanarlas como la receta original Maryland, simplemente pasar por pan rallado después del huevo). Si sobra algo de huevo o harina (sólo si es poco) sin miedo podemos echarlo sobre las pechugas ya colocadas en la bandeja.

Meterlo en el horno a 180º durante unos 45 minutos y ya estará listo.

Resultado

Conservan la jugosidad, saben como si fueran con bechamel pero mucho más ligero y fácil de hacer y además te quedas con la satisfacción de haber hecho una receta nueva. Y algo que agradecen todos los cocinillas, a pesar de hacerse en 55 minutos, no hay que estar pendiente mientras se hacen, puedes mientras tanto echarte unas partidas al Angry Birds. Que os aproveche 🙂

Tiempo: 55 minutos

Dificultad: 2/5

Digestión: 2/5

Precio: 2,5 €