Esta es una fácil, rápida y muy sabrosa manera de preparar unas pechugas de pollo. Las pechugas quedan muy jugosas y llenas de sabor gracias a la panceta con la que las envolvemos, al queso con el que las rellenamos, y a la salsa de queso que las acompaña. Además como están hechas en el horno, la receta es un poco más saludable.

Podemos tener las pechugas listas con antelación y meterlas en el horno en el último momento. Una vez hechas, sólo tendremos que reducir al fuego la salsa que quede en la bandeja, para darle cuerpo, y servirla como acompañamiento, y ¡listo!

Preparación de Pechuga de pollo rellena al horno, con panceta y salsa de queso

1. Limpiamos las dos mitades de pechuga de grasita, y con un cuchillo afilado abrimos un hueco en las pechugas sin llegar al fondo, como un bolsillo.
2. Ponemos dentro las dos cuñas de queso. He utilizado un queso de oveja curado, con mucho sabor, pero podéis utilizar el que más os guste.
3. Envolvemos con las lonchas de panceta.
4. Ponemos el caldo caliente en un bol y añadimos el queso de untar. Mezclamos bien.
5. Disponemos las dos mitades de pechuga en una fuente de horno y añadimos la mezcla del caldo y queso. Añadiendo este caldo a la fuente, las pechugas quedarán más jugosas.
6. Horneamos 30 minutos a 200 ºC.
7. Sacamos las pechugas y disponemos en una fuente. Reducimos la salsa en una sartén al fuego durante unos minutos, hasta que tenga la consistencia deseada. Si es necesario, puedes añadir una puntita de Maizena diluida en agua fría para engordar la salsa más rápidamente.

Resultado

A la hora de servir, cortamos las pechugas en láminas y acompañamos con la salsa de queso, a la que espolvorearemos un poco de cebollino.

Las pechugas quedan jugosas y sabrosas, y acompañadas de una fresca ensalada constituyen un plato muy completo, ideal como cena rápida o segundo plato.

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Tiempo: 15 minutos + 30 minutos de horneado

Dificultad: 1/5

Digestión: 2/5

Precio: 5 euros