Hace no muchos años, cuando las primeras freidoras de aire se empezaban a promocionar, algunos, o tal vez muchos, pensamos que, aunque sonaba tentador eso de poder comer unas patatas tan crujientes como si estuvieran fritas en aceite, pero cocinadas sin grasa, el moderno electrodoméstico no serviría para mucho más. ¡Qué equivocados estábamos!
Afortunadamente, no tardamos en darnos cuenta de que la freidora de aire, la air fryer (o 'satisfryer' como han empezado a llamarla algunos por todo el placer que proporciona cocinar en ella) no es más que un horno pequeñito y que, cuando se trata de cocinar pocas cantidades, es una digna sustituta de éste.
En ese 'cajón mágico' que es la freidora de aire podemos asar verduras, gratinar platos de pasta, cocinar alitas, muslos y contramuslos de pollo, asar todo tipo de brochetas, cocinar pescado o, incluso, hornear tartas, bizcochos y magdalenas.
10 recetas fáciles para usar la freidora de aire todos los días
Si hablamos de recetas para freidora de aire, sí o sí hay que empezar por las patatas fritas. La receta que venía a revolucionar este aparato, pues nos permite preparar unas patatas fritas tan doradas y crujientes como las de la foto -dos raciones- usando solo una cucharada de aceite.
Si alguna vez has soñado con un cubo de alitas de pollo como los de las películas americanas, con la freidora de aire es muy fácil hacerlo realidad. Quedan deliciosas, tiernas por dentro y con la piel crujientísima. Quedan genial sin añadir ni una gota de aceite por lo que no resultan nada pringosas a la hora de comerlas. Maravilla.
Hacer estas patatas tan resultonas no puede ser más fácil, quedan tiernas y jugosas por dentro, pero con la piel crujiente. Una delicia. Funcionan bien en una comida formal con invitados en día de fiesta o para alegrarte hasta una humilde ensalada en un día de diario.
Asar verduras en la freidora de aire es tan sencillo como envolverlas en papel de aluminio y meterlas dentro hasta que suene el pitido indicando que el tiempo de cocción ha terminado. Después solo hay que aliñarlas al gusto de cada uno y disfrutarlas. Guarnición infalible.
Una alternativa a las patatas fritas son estos palitos de boniato crujiente. Se trata de una hortaliza con propiedades nutricionales más interesantes que las de la patata.
Se hacen rápido y sin complicaciones, son baratos y están riquísimos. Cuando los pruebes vas a desear comer legumbres de esta manera, que no todo van a ser hummus y potajes.
Cocinar calabacín como si fuera pasta y en la freidora de aire, sin ensuciar nada más que la fuente en la que la vas a servir. Esta receta es un sí rotundo.
Parece magia, pero es tan real como tú que estás leyendo esto ahora mismo. Con la freidora de aire puedes hacer hasta unas albóndigas jugositas sin tener que freírlas en aceite.
No necesariamente todo lo que cocinemos en la freidora de aire va a ser supersanísimo. Es cierto que vamos a usar menos aceite, pero si nos ponemos disfrutones y utilizamos ingredientes como una deliciosa capa de queso por encima para gratinar, pues el resultado va a tener más grasa y más calorías y eso tampoco es un drama.
Los platos serán tan sanos como los ingredientes que empleemos para cocinarlos. Así de simple. Por su parte, la freidora de aire se va a portar como una campeona tanto con platos ultraligeros como con platos que son algo más 'gochos'.
Y aquí una idea para prepararte la comida en tiempo récord sin más que cocer unos huevos pasados por agua y cocinar unas patatas en la freidora de aire. Con eso y unas lonchas de jamón tienes un plato montado que gusta a casi todos. Algo así como la versión más saludable de los huevos fritos con patatas.