Si eres una de esas personas que quiere cuidar la línea durante el verano, pero no quieres renunciar a los placeres de poder disfrutar de la comida más refrescante, es importante que conozcas una receta sencilla con la que poder elaborar un helado perfecto. Este helado es saludable, no tiene azúcar y se prepara con solo tres ingredientes.

De esta manera, podrás seguir disfrutando del dulce por excelencia del verano sin tener que pararte a contar calorías. Es una alternativa más sana a los clásicos helados Magnum, pudiendo prepararlo en tu hogar y disfrutando de un exquisito sabor.

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Otras recetas de helados saludables para el verano

Además de este sabroso helado para el verano, podemos preparar otras muchas recetas ideales para refrescarse este verano de la forma más saludable. Estas son algunas sugerencias:

Helado tropical vegano

Si eres una persona amante de los sabores de las frutas tropicales como el coco y el mango, esta receta está hecha para ti, puesto que, además de disfrutar de un sabor delicioso, también podrás disfrutar de una textura muy cremosa.

Para su elaboración apenas se necesitan tres mangos, 200 gramos de leche de coco y un endulzante si se desea, para una vez que se tengan los ingredientes, pelar y cortar en cubos pequeños mangos e introducirlos en el congelador.

Una vez que ya estén congelados, llegará el momento de triturarlos con el robot de cocina o batidora, añadiendo la leche de coco y el endulzante deseado (azúcar de coco, dátiles, eritritol…), para finalmente servir con coco rallado por encima.

Helado cremoso de fresa

Si estás buscando una receta fácil, refrescante y llena de sabor para este verano, y que además sea saludable, tan solo necesitas dos yogures naturales y medio kilo de fresas para su preparación.

En este caso habrá que comenzar limpiando y troceando las fresas, para luego introducirlas en el congelador. A continuación, se vacía el contenido de los dos yogures naturales en un recipiente apto para batir, al que se agregarán las fresas congeladas. Ahora habrá que batir y verter la mezcla sobre los moldes de helado para llevarlos al congelador, donde deberán estar hasta el momento de su consumo.

Helado de frutos rojos

Si quieres refrescarte mientras disfrutas de unos frutos rojos, este helado está hecho para ti. Para su preparación solo necesitas medio litro de leche y frutos rojos al gusto (cerezas, frambuesas, moras…), y dado el caso de que lo desees, podrás agregar chocolate negro fundido.

El proceso es tan simple como introducir en un recipiente para batir medio litro de leche, al que añadirás los frutos rojos congelados, vertiéndolos en el molde para helados posteriormente. Una vez que estén congelados, si se desea, se puede agregar una capa de chocolate negro fundido para darle el toque definitivo.

Helado de Stracciatella

Si quieres disfrutar del sabor del helado de stracciatella, podrás elaborar esta receta de una manera fácil y rápida. Para su preparación necesitarás dos yogures griegos naturales 5-6 onzas de chocolate negro (mejor si es superior al 85% de cacao), esencia de vainilla y endulzante (opcional).

Lo primero que se debe hacer es colocar en un recipiente el yogur junto al chocolate derretido y remover bien la mezcla para que sea homogénea. En ese momento habrá que introducirlo en el congelador y, aproximadamente cada 30 minutos, sacar y remover (dos veces). Luego, solo habrá que agregar un poco más de chocolate derretido por encima, así como unos cacahuetes picados, congelando hasta que llegue el momento de disfrutar de este helado.

Helados de hielo

Los helados de hielo son siempre una opción a tener en cuenta, ya que son un tipo de helado refrescante y bajo en calorías ideal para poder hacer frente al calor del verano. Para poder elaborar uno de ellos es importante elegir una base adecuada y jugar con la textura para encontrar la opción que mejor se adapte a tus gustos y preferencias.

En lugar de usar zumos comerciales llenos de azúcares para su elaboración, es preferible elaborarlos usando zumos naturales. Para ello, puedes exprimir frutas frescas como limones, sandías, naranjas… para poder conseguir una base llena de vitaminas y refrescante, mientras que, si prefieres un sabor más cremoso, podrás recurrir al uso de leche de coco o yogur natural sin azúcar como base para ellos.

Una vez seleccionada la base del helado, se le puede aportar sabor añadiendo frutas frescas, con trozos de mango, rodajas de kiwi, trozos de arándanos, etcétera, de forma que se consiga aportar textura, así como un toque de dulzor natural.