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Cuando llega la hora de la cena, tras una agotadora jornada, lo que menos apetece es ponerse a cocinar durante horas. Por este motivo, es habitual que se recurra a platos rápidos y que, en ocasiones, no resultan demasiado saludables. Sin embargo, la realidad es que una cena rápida no está reñida con un plato saludable, destacando entre ellas una receta proteica con tres ingredientes que es baja en grasa, reducida en hidratos y que puedes preparar en apenas unos minutos.
La receta en cuestión es el pollo a las hierbas con tallo de brócoli salteado, una receta que se elabora solo con brócoli grande, una pechuga de pollo y aceite de oliva virgen extra. A partir de estos ingredientes, puedes preparar una receta que es tan sencilla como nutritiva.
Para empezar, hay que comenzar cortando en cubos la pechuga de pollo para posteriormente condimentar y, si se desea, mezclar con un poco de zumo de limón y aceite de oliva. A continuación, hay que remover, tapar y dejar que repose en la nevera, de forma que se consiga que todos los condimentos y sabores se integren los unos con los otros.
Ingredientes del pollo a las hierbas con tallo de brócoli salteado
- Brócoli grande
- Una pechuga de pollo
- Aceite de oliva virgen extra
- Zumo de limón (opcional)
- Caldo o vino (opcional)
- Perejil fresco picado (opcional)
Paso 1
Cortar la pechuga de pollo en cubos. Condimentar y mezclar con un poco de zumo de limón y aceite de oliva si se desea. Remover, tapar y dejar reposar en la nevera.
Paso 2
Lavar el tallo de brócoli, separando las hojas. Utilizar un pelaverduras para quitar las partes duras y externas del tronco. Cortar cada tallo en dos mitades longitudinales y luego picar en piezas pequeñas.
Paso 3
En una sartén antiadherente con un poco de aceite de oliva virgen extra, saltear el pollo hasta que se dore. Agregar el brócoli junto con un poco de caldo o vino y cocinar hasta que se evapore la mayor parte del líquido.
Paso 4
Condimentar y servir inmediatamente, añadiendo un poco de perejil fresco picado por encima si se desea.
Consejos para una cena saludable
Una vez visto cómo preparar el pollo a las hierbas con tallo de brócoli salteado, conviene tener en cuenta una serie de recomendaciones básicas para poder disfrutar de una cena saludable y equilibrada. Una prioridad a la hora de disfrutar de la última comida del día es optar por platos que sean saludables, pudiendo encontrar muchas opciones diferentes, fáciles y rápidas de preparar para que no tengas que invertir mucho tiempo en la cocina.
Aunque todo depende en gran parte de los gustos de cada uno, si buscas una cena ligera y saludable, debes tratar de evitar consumir grandes cantidades de hidratos complejos (almidones), dado que estos van a aportar una energía que no esa necesaria cuando se va a dormir, y que puede acabar haciendo que se convierta en grasa corporal. No obstante, todo dependerá del tipo de actividad física que se haya hecho antes de cenar o si se han tomado carbohidratos a lo largo del día o no.
Esto no quiere decir que no se puedan incluir en la cena algunos alimentos como un arroz integral o una pequeña cantidad de pasta, pero siempre habrá que hacerlo de una forma moderada para que sea una cena equilibrada.
Para las cenas los expertos recomiendan dar preferencia a los alimentos vegetales, magros y de elaboración sencilla, siendo una buena opción para ello las cremas, sopas y caldos, buenas opciones para poder cenar de forma nutritiva, con muy pocas calorías y un alto poder saciante. Por supuesto, habrá que evitar las frituras, las carnes grasas o muy elaboradas y habrá que tener muy en cuenta las cantidades consumidas.
En lo que respecta al postre, siempre se debe dar prioridad a la fruta fresca o el yogur desnatado, eligiendo una u otra opción en función de la composición de la cena que se haya tomado.
Trucos para controlar las calorías en la cena
Si quieres tener bajo control las calorías ingeridas a la hora de la cena porque estás buscando adelgazar o controlar tu peso, te recomendamos tener en cuenta estos consejos:
- Comienza con platos líquidos: el comenzar la cena con unos platos líquidos, con cremas, sopas o caldos, ayudan a incrementar la sensación de saciedad, lo que hace que a su vez se puedan controlar mejor las raciones posteriores.
- Come despacio y procesa bien los alimentos: a la hora de cenar es habitual que se disponga de más tiempo que en otros momentos del día para poder comer con tranquilidad, por lo que debería ser aprovechado para ello. Trata de comer de forma pausada, ya que de esta manera será posible llegar a identificar la señal de saciedad a tiempo, evitando así comer más cantidad de la necesaria.
- Verduras y hortalizas, protagonistas: en una cena saludable y equilibrada es importante dar prioridad a las verduras y hortalizas, lo que ayuda tanto a controlar las calorías ingeridas como a conseguir el aporte necesario cada día de fibra, agua, minerales y antioxidantes, todos ellos necesarios para el buen funcionamiento del organismo.
Con solo seguir estos tres simples consejos podrás tener un mayor control sobre las calorías ingeridas a la hora de la cena, momento del día en el que hay que apostar por platos más ligeros.