La marmita de atún, también conocida como marmitako, es un guiso tradicional de la cocina marinera del norte de España, especialmente popular en el País Vasco y Cantabria. Es un plato contundente, sencillo y sabroso, que originalmente era preparado por los pescadores vascos y cántabros en alta mar.
A lo largo del tiempo, este plato ha evolucionado y adoptado diferentes variantes en varias regiones de España, pero la base siempre es similar: atún (o bonito), patatas, pimientos, tomate y cebolla, cocidos en un caldo que concentra los sabores del mar y la tierra.
En Asturias, la marmita de atún se conoce más comúnmente como bonito con patatas, y es un plato tradicional que se prepara especialmente durante los meses de verano, coincidiendo con la temporada del bonito del norte.
La receta asturiana sigue un esquema muy parecido al marmitako vasco, aunque con algunas diferencias, como la posibilidad de añadir un toque de sidra asturiana, que le da un carácter distintivo y un sabor ligeramente ácido.
Ingredientes
500 g de bonito del norte (o atún), cortado en trozos grandes
800 g de patatas (mejor de calidad gallega o asturiana)
1 cebolla grande, picada en juliana
1 pimiento rojo, cortado en tiras
1 pimiento verde, cortado en tiras
2 tomates maduros, pelados y picados
3 dientes de ajo
1 vaso de sidra asturiana (o vino blanco)
Caldo de pescado (puedes usar las espinas y la cabeza del bonito para prepararlo)
1 hoja de laurel
1 cucharada de pimentón dulce (o una mezcla de dulce y picante)
Aceite de oliva virgen extra
Sal y pimienta al gusto
Perejil fresco para decorar (opcional)
Paso 1
En una cazuela grande, añade un buen chorro de aceite de oliva y sofríe los dientes de ajo pelados y picados finamente. Cuando estén dorados, añade la cebolla picada en juliana o trozos pequeños. Cocina a fuego medio hasta que esté transparente.
Paso 2
Añade los pimientos (rojo y verde) cortados en tiras finas y sofríelos junto con la cebolla. Cocina todo junto durante unos 10-15 minutos, removiendo de vez en cuando para que se ablanden.
Paso 3
Luego incorpora los tomates rallados o el tomate triturado. Cocina a fuego medio hasta que el tomate pierda su agua y se convierta en una salsa espesa, unos 10 minutos más.
Paso 4
Pela las patatas y chasca (rompe) en trozos irregulares, de modo que suelten almidón al cocinarse y espesen el caldo.
Paso 5
Añade las patatas a la cazuela con el sofrito y remueve para que se impregnen de los sabores de las verduras.
Paso 6
Añade el vaso de sidra (o vino blanco) y deja que se evapore el alcohol durante unos minutos, mientras remueves las patatas y las verduras.
Paso 7
Cubre las patatas con el caldo de pescado (o agua si no tienes caldo). Añade la hoja de laurel y el pimentón dulce, y remueve bien. Deja que las patatas se cocinen a fuego medio-bajo durante unos 20-25 minutos, o hasta que estén tiernas. Remueve de vez en cuando para evitar que se peguen al fondo de la cazuela.
Paso 8
Cuando las patatas estén casi hechas, añade el bonito del norte (o atún) cortado en trozos grandes. Cocina el bonito solo durante unos 3-5 minutos, ya que no debe hacerse demasiado para evitar que se quede seco. El pescado debe quedar jugoso y tierno por dentro.
Paso 9
Prueba el guiso y ajusta de sal y pimienta al gusto. Si lo prefieres más espeso, deja reposar el guiso unos minutos antes de servir para que el caldo se asiente bien.
Paso 10
Sirve la marmita de atún caliente, decorada con un poco de perejil fresco picado. Puedes acompañarla con un buen pan de hogaza asturiano para mojar en el delicioso caldo.
Consejos para hacer una marmita de bonito
Ingredientes
500 g de bonito del norte (o atún), cortado en trozos grandes
800 g de patatas (mejor de calidad gallega o asturiana)
1 cebolla grande, picada en juliana
1 pimiento rojo, cortado en tiras
1 pimiento verde, cortado en tiras
2 tomates maduros, pelados y picados
3 dientes de ajo
1 vaso de sidra asturiana (o vino blanco)
Caldo de pescado (puedes usar las espinas y la cabeza del bonito para prepararlo)
1 hoja de laurel
1 cucharada de pimentón dulce (o una mezcla de dulce y picante)
Aceite de oliva virgen extra
Sal y pimienta al gusto
Perejil fresco para decorar (opcional)
Paso 1
En una cazuela grande, añade un buen chorro de aceite de oliva y sofríe los dientes de ajo pelados y picados finamente. Cuando estén dorados, añade la cebolla picada en juliana o trozos pequeños. Cocina a fuego medio hasta que esté transparente.
Paso 2
Añade los pimientos (rojo y verde) cortados en tiras finas y sofríelos junto con la cebolla. Cocina todo junto durante unos 10-15 minutos, removiendo de vez en cuando para que se ablanden.
Paso 3
Luego incorpora los tomates rallados o el tomate triturado. Cocina a fuego medio hasta que el tomate pierda su agua y se convierta en una salsa espesa, unos 10 minutos más.
Paso 4
Pela las patatas y chasca (rompe) en trozos irregulares, de modo que suelten almidón al cocinarse y espesen el caldo.
Paso 5
Añade las patatas a la cazuela con el sofrito y remueve para que se impregnen de los sabores de las verduras.
Paso 6
Añade el vaso de sidra (o vino blanco) y deja que se evapore el alcohol durante unos minutos, mientras remueves las patatas y las verduras.
Paso 7
Cubre las patatas con el caldo de pescado (o agua si no tienes caldo). Añade la hoja de laurel y el pimentón dulce, y remueve bien. Deja que las patatas se cocinen a fuego medio-bajo durante unos 20-25 minutos, o hasta que estén tiernas. Remueve de vez en cuando para evitar que se peguen al fondo de la cazuela.
Paso 8
Cuando las patatas estén casi hechas, añade el bonito del norte (o atún) cortado en trozos grandes. Cocina el bonito solo durante unos 3-5 minutos, ya que no debe hacerse demasiado para evitar que se quede seco. El pescado debe quedar jugoso y tierno por dentro.
Paso 9
Prueba el guiso y ajusta de sal y pimienta al gusto. Si lo prefieres más espeso, deja reposar el guiso unos minutos antes de servir para que el caldo se asiente bien.
Paso 10
Sirve la marmita de atún caliente, decorada con un poco de perejil fresco picado. Puedes acompañarla con un buen pan de hogaza asturiano para mojar en el delicioso caldo.
En primer lugar, si prefieres un toque picante, puedes añadir pimentón picante o un poco de guindilla al sofrito. Además, algunas versiones del guiso añaden guisantes o incluso zanahorias para dar más color y dulzura al plato.
El bonito del norte es el pescado más tradicional en esta receta, pero si no lo encuentras, puedes usar atún fresco u otros pescados similares.
Propiedades nutricionales de la marmita de bonito
Este guiso es un plato muy completo desde el punto de vista nutricional. En consecuencia, contiene proteínas de alta calidad, proporcionadas por el bonito o atún, que también es una excelente fuente de ácidos grasos omega-3, beneficiosos para la salud cardiovascular.
También carbohidratos complejos y fibra gracias a las patatas, así como vitaminas y minerales que aportan los pimientos, el tomate y la cebolla, como la vitamina C y antioxidantes. Igualmente, contiene grasas saludables del aceite de oliva virgen extra.