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Si estás buscando un aperitivo delicioso y fácil de preparar para disfrutar con amigos o mientras ves tu serie favorita, las chips de queso son una excelente opción. Este snack es ideal para acompañar con cerveza o vino, y lo mejor es que es sencillo, económico y saludable.

Las chips de queso parmesano son una excelente forma de disfrutar del sabor intenso y característico de este queso, conocido por su equilibrio entre dulce, salado y amargo, con una textura granulada y un color que varía de amarillo claro a oscuro. Este aperitivo no solo es sabroso, sino que también ofrece beneficios nutricionales importantes.

El queso parmesano, aunque calórico, es una buena fuente de proteínas de alta calidad y no contiene lactosa, lo que lo convierte en una opción apta para los intolerantes a la leche. Consumido con moderación, este queso puede ser una parte saludable de tu dieta, aportando 35,60 gramos de proteínas, 25,80 gramos de grasa y 375 calorías por cada 100 gramos.

Ingredientes de las chips de queso

  • 1 pieza de queso parmesano rallado (o queso brie)
  • Papel de horno

Paso 1

Precalienta el horno a 180 grados centígrados.

Paso 2

Prepara una bandeja para hornear con papel de horno.

Paso 3

Distribuye el queso parmesano rallado en pequeños círculos sobre el papel de horno, dejando suficiente espacio entre ellos.

Paso 4

Hornea las chips de queso durante 3-4 minutos.

Paso 5

Deja enfriar las chips antes de servir.

Otros aperitivos fáciles y ricos

Las chips de queso parmesano son perfectas para poder disfrutar de un buen picoteo en solitario o con amigos, pero existen una infinidad de posibilidades a las que poder recurrir y que se alejan de los aperitivos básicos, como los embutidos y quesos, las patatas fritas, o las aceitunas, que suelen ser imprescindibles en las mesas de encuentros con amigos y familiares.

Si quieres alejarte un poco de lo convencional y preparar otros aperitivos fáciles y originales, algunas opciones interesantes son las siguientes:

Canapés de queso azul y pera

El queso azul, combinado con pera, miel y nueces picadas, es una opción perfecta para preparar unos canapés sobre pan o tostas, un aperitivo con el que podrás sorprender a tus amigos e invitados.

Prepararlos es muy sencillo, pues basta con empezar por cortar el pan y tostarlo hasta el punto deseado, para luego partir el queso azul y colocarlo sobre el pan. Luego habrá que hacer lo propio con la pera, que debe ser cortada en pequeños trozos y situarlos encima del queso. Sobre este último habrá que colocar la cantidad de miel deseada y finalmente esparcir por encima las nueces trituradas.

Si el queso azul es demasiado fuerte, se podrá utilizar en su lugar otro tipo de queso como el de cabra o queso feta, con los que también se puede conseguir un buen resultado.

Bolas de yogur especiadas

Esta receta de aperitivo destaca por su versatilidad, sencillez y excelente sabor, necesitando para su elaboración tan solo un litro de yogur natural, una cucharadita de sal, una cucharadita de pimienta de cayena y una cucharadita de curry en polvo.

Reunidos estos ingredientes, para elaborar unas bolas de yogur especiadas, debe seguir los siguientes pasos:

  1. En primer lugar, habrá que forrar un colador con una gasa de doble espesor y colocarlo sobre un tazón grande, para luego mezclar el yogur, la sal, el curry en polvo y la cayena si se usa, todo ello en un tazón grande, revolviendo para que se mezclen bien los ingredientes los unos con los otros.
  2. A continuación, habrá que transferir el yogur a un colador, cubriéndolo sin apretar con una envoltura de plástico, dejando que el líquido se cuele hacia el recipiente situado debajo en la nevera durante un periodo de 24 horas.
  3. Ahora habrá que cubrir un plato grande con un paño de cocina limpio, para transferir el yogur colado al plato preparado, para seguidamente cubrir ligeramente con plástico y dejar reposando, refrigerado, de 4 a 6 horas.
  4. El siguiente paso consiste en raspar el yogur del paño para colocarlo en un tazón mediano en el que hacer las bolas. Para finalizar hay que servirlo con galletas saladas o pan, formando bolas con cucharadas de queso. El toque definitivo se da decorando las bolas con nueces picadas, semillas o especias como canela o pimentón, según el gusto de cada uno.

Chips de calabacín al horno

Las chips de calabacín al horno son un aperitivo ideal para cualquier aperitivo saludable, necesitando para elaborarlas dos calabacines, 80 gramos de queso parmesano rallado, 120 gramos de panko, tomillo fresco, dos claras de huevo, sal y pimienta.

En primer lugar, habrá que precalentar el horno a 200 °C, procediendo a cortar los calabacines en rodajas de unos 2 mm y colocándolas sobre papel absorbente, echar un poco de sal y cubrir con más papel, dejándolos así durante 20 minutos para que suelten toda el agua.

A continuación, hay que mezclar en un recipiente el pan rallado o panko con el queso parmesano y unas hojas de tomillo. Batir las claras en un bol grande hasta formar espuma y salpimentar. Hecho esto, habrá que pasar las rebanadas de calabacín por la harina, luego por el huevo batido y posteriormente por la mezcla de panko, queso y tomillo.

El último paso consiste en cubrir una bandeja de horno con papel vegetal, para colocar encima las rebanadas de calabacín, separadas entre ellas, y hornear durante 20-30 minutos, hasta que el calabacín esté crujiente y dorado.