Hace tiempo que quería probar alguna receta usando plátano macho, así que el otro día eché un par  en la cesta del súper sin saber muy bien qué iba a hacer con ellos.

Después buscando por internet me encontré con esta receta y decidí hacerla cambiando un par de cosillas. Como era la primera vez que utilizaba este ingrediente tuve algunos fallos, pero los comparto con vosotros más abajo para que intentéis evitarlos.

 Preparación

Cocemos los plátanos cortados por la mitad en agua hasta que estén muy blandos. Yo los cocí con cáscara pero debido a la diferencia de tamaño uno de ellos se hizo demasiado. La próxima vez los tendré que vigilar más a menudo y de forma individual.

Después aplastamos los plátanos con un tenedor, formando una “pasta” y añadimos una pizca de sal.

Ponemos parte de la masa en nuestra mano y la aplastamos. Ponemos en el centro un trocito de queso. Después tapamos el queso con más masa y le damos forma de disco.

Rebozamos el bocadito en huevo y luego en pan rallado.

Ya lo tenemos listo para freir hasta que esté doradito, a temperatura no demasiado alta para que se haga despacio y de tiempo al queso a fundirse.

Resultado

Lo he servido con nuestro Arroz a la cubana, sustituyendo al plátano frito, aunque también se pueden comer solos tal cual. Le da un punto diferente y original al plato, os recomiendo probarlo.

Además también duran hasta el día siguiente así que si os sobran ¡ya tenéis algo para picar entre horas!

Con un plátano nos salen aproximadamente 4-6 bocaditos, dependiendo del tamaño.

Tiempo:  40 min.

Dificultad: 2/5

Digestión: 2/5

Precio:  2,50 €