Qué queréis que os diga, si es que me pierden los patés y, en general, cualquier cosa que se pueda untar en el pan, eso sí, salada, que yo siempre he sido más de salado que de dulce. Da igual la hora del día, si me dan a elegir un pan con tomate y aceite y un pan con chocolate, existen un 99 % de posibilidades de que me quede con la primera opción. Y hablando de opciones, este paté de atún ahumado es una muy fácil con la que puedes resolver cualquier apuro y salir a hombros por la puerta grande.

(*) Puede ser bajo en grasas, pero en ese caso que sea de una marca que no sepa mucho a yogur, que en algunas marcas la versión baja en grasas tiene un punto importante de acidez que recuerda más al yogur que al queso.

(**) Yo he utilizado una mayonesa casera hecha con la receta que os dejé hace algún tiempo en la que os explicaba cómo preparar una mayonesa casera con muy poca grasa.

(***) Si el atún es un atún envasado en un aceite de oliva de buena calidad puede aprovecharse este aceite para preparar la mayonesa y el paté tendrá un sabor mucho más intenso.

(****) El katsuobushi son copos de bonito seco y ahumado que se usan mucho en la comida japonesa, de hecho son el ingrediente principal del caldo que se usa como base para casi todo, el caldo dashi. En la receta de okonomiyaki que os dejé hace algunas semanas os cuento dónde se puede conseguir. En esta receta de paté de atún ahumado es el ingrediente clave ya que es esto lo que le da ese saborcillo ahumado tan irresistible.

Preparación del paté de atún ahumado

Como podéis imaginar, la preparación es nivel preescolar de cocina, porque no tiene ciencia alguna, menos aún si usáis una mayonesa comercial.

01: Poner todos los ingredientes en un bol amplio

Pues eso, todos los ingredientes en un bol o en el vaso de la batidora. Es importante que se amplio porque es katsuobushi es tan vaporoso que abulta mucho y al meter la batidora tiene tendencia a salir por los aires.

02: Triturar con la batidora

Por supuesto que también se puede usar cualquier robot de cocina para triturar los ingredientes hasta conseguir una masa homogénea, pero a mí cuando se trata de estas cosas tan rápidas me sigue resultando más práctico usar la batidora de brazo de toda la vida por una razón muy sencilla, tardo muchísimo menos tiempo en lavar el pie de la batidora y el bol, que en lavar la batidora de vaso o un procesador de alimentos en los que para lavarlos hay que desmontar cuchillas, lavar tapas, recipiente con asas y recovecos en las zonas de cierre y anclaje de las cuchillas.

En cualquier caso, uséis lo que uséis se trata de batir hasta tener una crema homogénea que, de ser necesario, guardaremos en la nevera y la sacaremos unos 10 minutos antes de consumirla para que se atempere.

03: Servir el paté de atún ahumado

Si servimos nuestro paté de atún ahumado recién terminado de hacer tendrá una textura que vale tanto para untar como para dippear, si lo dejamos unas horas en la nevera cogerá una consistencia similar a la del queso en crema y tendrá más textura de paté para untar.

Resultado

Eso sí, da igual que este recién hecho o refrigerado durante horas, en ambos casos está riquísimo tanto para untar sobre pan fresco o tostado, para dippear con snacks como nachos o similares o, por supuesto, para utilizarlo como relleno de sándwiches de pan de miga, como los de Rodilla, en los que puedes utilizar el paté solo o añadir algunos ingredientes adicionales en plan vegetales como lechuga, tomate, cebolla o pepinillos o proteicos como huevo cocido si quieres hacer sándwiches más contundentes.

Recuerda también que si preparas este paté para alguna fiesta con amigos y alguno de ellos es vegano, también tenemos en Cocinillas una opción de paté de atún vegano que es tan fácil de preparar como este que os hemos enseñado hoy.

Curiosamente, para esta otra versión de falso paté de atún también necesitamos un ingrediente típico de la cocina japonesa, el alga nori, unas láminas de alga desecadas que no solo sirven para enrollar las piezas de maki en los restaurantes de sushi, sino que también es ampliamente utilizada en la cocina vegana para aportar sabores marinos a muchas preparaciones.

En el mercado podemos encontrarla tanto en láminas como en copos, siendo las primeras muy fáciles de encontrar en prácticamente cualquier supermercado que tenga sección de productos internacionales. Si las queremos en copos para ahorrarnos el trabajo de tener que picarlas, entonces tendremos que acercarnos a algún herbolario o, la solución del siglo XXI, echar mano de tiendas online para que nos lo traigan a casa.

Y para los que no les guste el atún

Que de todo hay en esta vida, pues ya puestos a hacer patés, como no se tarda nada y si es una reunión de amigos, siempre puedes hacer varios como por ejemplo:

Este paté de chorizo facilísimo perfecto para los que no quieren ver el pescado ni en pintura.

Este hummus de aguacate que cuando lo hagas la primera vez se convertirá en un habitual de todas tus reuniones familiares o de amigos.

O este tapenade o paté de aceitunas que es siempre un as bajo la manga porque lo mismo vale para un roto que para un descosido, es apto para veganos, para celíacos y para intolerantes a la lactosa, siempre y cuando no odien las aceitunas, claro está.

Para el paté de Cabrales hay que currárselo un poquito más, hay que usar el microondas, pero es perfecto para los que buscan emociones fuertes… en cuanto a sabor.

Y para terminar la fiesta, este ligerísimo paté de calabacín, perfecto para los que se cuidan y no descuidan la alimentación ni cuando están de fiesta.